Yamaha Hyper Modified by Roland Sands

2012 11 21 IMG 2012 11
Yamaha Hyper Modified by Roland Sands
Ramón López
Ramón López
Desde su lanzamiento en 2001, el TMAX no ha recibido nunca una visión tan asombrosa como la que el preparador estadounidense Roland Sands presentó en el último Salón de Milán.


El alemán Marcus Walz y el francés Ludovic Lazareth han puesto su grano de arena para hacer modelos extra-especiales desde la base Yamaha TMAX. Ambos han realizado su trabajo manteniendo el espíritu de este modelo como fiel maxiscooter deportivo, un camino que el norteamericano Roland Sands ha obviado para convertir su TMAX Hyper Modified en un engendro entre moto dragster y scooter como jamás habíamos presenciado.

Maravilla de la ingeniería

Ronald Sands es un conocido preparador de modelos deportivos a los que siempre imprime un carácter único. Modelos sobre motores de MotoGP o Ducati le han servido para convertirse en un icono en estas lides. Además, sus raíces como piloto del Campeonato AMA de Superbikes hace que él mismo pilote sus creaciones, dándole un toque RR sin parangón entre sus rivales. Su TMAX se ha quedado desnuda hasta los huesos. Como él mismo afirma, «con este proyecto Hyper Modified queríamos que el TMAX se quedara en los elementos básicos. Vi una foto del chasis de aluminio, toda una seña de identidad de las deportivas Yamaha, y me quedé impresionado por la estructura que había debajo del carenado. Me sorprendió que la estructura del TMAX estuviera tan chula; era diferente y tenía un punto raro. Me sentí identificado. Estaba realmente intrigado y comencé a pensar en las posibilidades de usar esta maravilla de la ingeniería para crear mi versión».

En su proceso de creación, nos explica que «una vez que has quitado todo el plástico es un scooter perfecto para aligerarlo. La mayoría de la gente no espera ver un chasis de aluminio tan deportivo en un scooter, así que decidimos que sería la espina dorsal de nuestro proyecto. Para que la moto tuviera una imagen más deportiva, le añadimos una serie de rejillas e hicimos algunas otras cosas para que resultara más agresivo y con carácter. Rehicimos la parte trasera al completo y la recubrimos con un vinilo muy impactante que queda genial; luego instalamos un manillar plano y sobreelevado y una serie de diseños con números. La toma de aire del radiador también es diseño nuestro; nos dimos cuenta de que al quitar todos los plásticos hacía falta un sitio para apoyar los pies, así que ahora cumple también esa función. El guardabarros delantero es uno modificado de una YZF-R6; luego diseñamos unas nuevas tapas para el motor y les hicimos una serie de huecos para que la moto se viera más radical. En total, crear nuestra T-MAX Hyper Modified nos llevó unas cuatro semanas y no fue nada sencillo».

Una pasada

«Este trabajo ha sido estresante, mucho más complicado que modificar una moto normal. Luchábamos continuamente contra la tentación de hacer del TMAX una moto convencional. Habría sido muy fácil montar un depósito de gasolina tradicional y modificar la parte trasera para mantener una línea clásica de moto, pero queríamos mantener su carácter de rareza. Tuvimos que contenernos para no dejarnos llevar, pero creo que el resultado ha sido bueno porque la acogida del público ha sido fantástica. ¡Y con el escape deportivo suena genial! Es una pasada.»