Por qué la Honda CL500 es una moto idónea si te acabas de sacar el carnet A2
La Honda CL 500 fue lanzada hace apenas un año y fue entonces cuando pudimos probarla por primera vez. En aquel momento nos dejó un buen sabor de boca, así que reencontrarnos con ella casi doce meses después es una experiencia agradable.
Y hemos vuelto a constatar que es una moto muy equilibrada y, sobre todo, idónea si acabas de sacarte el carnet A2 y quieres dejar atrás los 15 CV de las 125 c.c. ¿Por qué? Pues por varias cosas que vamos a contarte a continuación.
1.- Motor
Tiene 47 CV, que es el límite para circular con carnet A2. Si a eso le sumas unos desarrollos de transmisión tirando a cortos, tenemos una buena aceleración. Obviamente no es un misil, pero corre lo suficiente como para que no se te quede corta en poco tiempo.
2.- Diseño
Su rollo scrambler le sienta genial, está meticulosamente aplicado. Además, cuenta con un montón de accesorios para personalizarla, como adhesivos, tapas laterales, asientos de distinta altura o una cúpula para el faro. La pintura, únicamente presente en el depósito de combustible, puede ser naranja, verde, azul o negra. Es una moto en la que la estética es uno de los puntos fuertes. No pasarás desapercibido ni visual ni auditivamente, porque el escape específico para la CL500 hace que el pequeño motor suene genial.
3.- Cómoda
Es francamente confortable, y eso que su asiento no destaca por serlo en especial. Su manillar alto le proporciona una postura de pilotaje muy apropiada. Puedes hacer muchos kilómetros aquí sin padecer excesivo cansancio.
4.- Suspensión
La trasera es buena, pero la delantera lo es aún más. Su horquilla telescópica de 41 mm se lo traga todo, y además hace el juego compresión-extensión de manera muy neutra, lo cual repercute directamente en que sientas confianza y seguridad.
5.- Ligerita
Pesa 191 kg en orden de marcha, pero lo realmente positivo aquí es que se siente muy ágil y ligera. La mueves casi como quieres, obedece sin objetar dentro de lo razonable y, de nuevo, otorga mucha confianza al conductor.
6.- Buen tacto
Todo tiene buen tacto. El acelerador, los frenos, el embrague o la dirección parecen ponderados de manera que brinden una gratificante y fácil experiencia de conducción.
7.- ¡Qué poco gasta!
Este motor es el archiconocido bicilíndrico de medio litro de Honda (471 c.c. en verdad), que destaca por su robustez y fiabilidad, así como por su bajo consumo. Homologa tan sólo 3,6 L/100 km, pero ahí no está lo mejor de todo, sino en que en uso real el gasto no dista demasiado de esa cifra. Si conduces tranquilo puedes llevarla muy fácilmente por debajo de 4,0 L/100 km. Si le sacas todo el partido al motor, excederás esos 4,0 L/100 km, pero por muy, muy poco.
8- Precio
Esta Honda CL500 cuesta 6.750 euros. Francamente me parece un precio muy competitivo porque aun no siendo todo lo potente que quizá quisieras, es una moto que vale para todo. Es una gran compañera en ciudad, puede servirte para irte de viaje sin ningún problema y, cómo no, te permite salir de ruta con tus amigos y disfrutarla en el ámbito en el que mejor se mueve: las carreteras de curvas a velocidad media.
¿Dónde puede mejorar la Honda CL500?
En realidad en pocas cosas, puesto que los defectos que tiene son difícilmente subsanables sin un profundo restyling que al menos ahora no tendría sentido aplicar. Para mí, lo más molesto es que la instrumentación es algo escueta y que cuando la da el sol directamente se ve bastante regular. Aunque en estos días he aprendido a convivir con ello.
Por otra parte, aunque esto es consecuencia del diseño, el depósito de combustible no es muy grande: 12 litros. Vale que el consumo de gasolina es bajo, pero esto te obliga a estar especialmente atento al nivel de llenado. Además el indicador de llenado es un gráfico digital de sólo cuatro segmentos, de modo que saber con precisión cuánta gasolina queda… es un acto de fe.
Pero bueno, quita esas dos cosillas y, para mí, estamos ante una moto muy recomendable si quieres un modelo bonito, de todo uso y para una conducción tirando a tranquila pero aun así con prestaciones suficientes para que tardes bastante tiempo en sentir que necesitas más.