BMW R NineT Racer y R NineT Pure en el Salón de Colonia

Es evidente que la tendencia retro en el mundo de la moto es ahora mismo una de las de mayor crecimiento. Uno de los éxitos de los últimos años es la BMW R NineT, una moto que sobrepasó las expectativas de BMW desde el mismo momento de su presentación.

Ahora se amplía sustancialmente la gama Vintage germana con motor bóxer. A partir de ahora, BMW contará, además de la nueva Scrambler, con una nueva R NineT Pure y una espectacular R NineT Racer. La primera supone un nuevo «look» para la roadster, digamos básica, de la gama. Y haciendo honor al apellido «Pure» se ha buscado la esencia de la moto, un estilo intemporal y de siempre. Por ello, el depósito y el guardabarros delantero se han pintado en un color gris en combinación con un chasis negro, color también presente en la horquilla y mandos.

Estelar BMW R NineT Racer

Pero es la versión BMW R NineT Racer la que seguro hará girar cabezas, una preciosa café racer en los colores competición de la marca (blanco, con bandas azules y rojas), con un precioso carenado en forma de cúpula clásica y un colín monoplaza, también de formas retro.

Las dos motores emplean la misma base mecánica de motor bóxer previo a la última generación refrigerada parcialmente por agua, el conocido 1.170 cc de 110 CV, con cambio de seis velocidades y transmisión por cardan. El chasis cuenta con tres partes: un cuerpo central en el que se ancla el tren delantero, con horquilla invertida; un cuerpo trasero donde va el asiento; y un subchasis trasero para el pasajero. Todos ellos están atornillados entre sí, de forma que las posibilidades de personalización son mayores, algo que desde el primer diseño ha presidido la filosofía de las BMW R NineT.

Obviamente, el ABS es de serie en ambos casos; el control de estabilidad ASC podrá pedirse como opción, al igual que, como es habitual en la marca, una larga lista de accesorios de acabado y equipamiento para personalizar la moto.