Te traemos todos los detalles de la presentación de los dos megascooters de BMW que se presentaron este lunes y martes en Madrid.
Es una de las novedades 2012 más esperadas del año, y no es para menos. Significa el regreso de BMW al segmento scooter en un momento en el que los modelos -maxi- están en su mejor momento de la historia. El magnífico éxito de ventas del Yamaha TMAX y la avalancha de nuevos rivales de la mano de Honda (Integra), Aprilia (SRV850) y la propia BMW con sus alternativas deportiva C600 Sport y Gran Turismo C650 GT convierten a ese sector en el más animado de la actualidad.
En este -post- encontrarás a partir de ahora toda la información actualizada de lo que nos encontremos en su presentación internacional, que contará de dos momentos clave: uno hoy lunes con su prueba en las calles de Madrid y otro mañana con un completo recorrido por carreteras de todo tipo.
Para que vayas -abriendo boca-, aquí tienes un resumen de las características técnicas de los nuevos megascooter alemanes, unas variantes que vienen a conquistar un terreno en el que el Yamaha TMAX ha dominado con mano de hierro- hasta ahora.
Presentación:
Para comenzar la mañana y poneros en antecedentes de una de las motos que se probarán por las calles de Madrid, os dejamos el vídeo oficial de la BMW C600 Sport en acción, uno de los modelos a los que se ha subido Ramón López, director de Fórmula Moto, que disfrutó de la presentación mundial de la marca alemana.
Los habíamos visto en el Salón de Milán 2011, pero la atmósfera de Madrid les sienta mucho mejor a los maxiscooter BMW. Nos están esperando para salir con ellos por las calles de la capital, donde seguro que no vamos a pasar desapercibidos.
La atención al detalle y los componentes de calidad resaltan al primer vistazo.
La instrumentación es de primera clase y su diseño hace que se distingue de inmediato de todas sus competidoras en las dos versiones, Sport y GT. ¡No puedo esperar a arrancarlas y ver cómo van! Se admiten apuestas- ¿Cumplirán con las expectativas que han despertado? ¿Tú qué dices? Recordar que la fecha de su lanzamiento será el 14 de abril.
POR FIN EN ACCIÓN
Después del scooter con techo C1, BMW vuelve a este terreno con la lección bien aprendida: los experimentos, ¡con gaseosa!
Los alemanes han sabido hacer un scooter de gran nivel, a la altura de lo mejor en este segmento. Unos breves trayectos por el denso tráfico de la capital ha servido para tomar unas primeras referencias de lo que deparará el desembarco BMW entre los maxiscooter.
La primera toma de contacto ha sido con la versión GT, la más turística de las dos C y directamente dirigida a hacer la competencia a las Suzuki Burgman 650 y Honda SW-T600 que hasta ahora han dominado este sector. Cuando la subes o bajas del caballete notas unos kilos que te pueden intimidar al principio, pero que desaparecen como por arte de magia tras recorrer los primeros metros. Por cierto, el freno de estacionamiento se activa junto con el caballete, una soluci’on pionera y sobresaliente.
Entonces te encuentras con una agilidad inusitada para su volumen. Su tamaño es ciertamente más contundente que el de su hermana Sport con las que compartimos recorrido. La posición de conducción es idónea para los que ronden el 1,80 m de altura por el triángulo que conforman asiento, manillar y plataforma, aunque incluso los que menos Cola Cao han tomado de pequeños no tendrán problemas de llegar con los pies al suelo por la forma de la parte delantera del asiento y la plataforma.
Cuando el tráfico lo permite, aumentamos el ritmo y descubrimos una protección aerodinámica de primera. La pantalla cambia de altura de modo electrónico, todo un lujo digno de moto GT. En cuanto a las suspensiones, no se muestran demasiado blandas para su filosofía y las vibraciones son nulas a cualquier régimen. La combinación de transmisión primaria por correa y final por cadena funciona a la perfección.
Tan sólo destacamos en el -debe- una primera aceleración poco musculosa en el primer contacto del embrague. Pero cuando coge aire, la llegada de la potencia evidencia todo el potencial de sus 60 CV. A la hora de detenerlo, los frenos son contundentes, con un ABS muy capaz aunque interviene demasiado pronto en el tren posterior.
Mañana probaremos sus virtudes en carretera. Ahora esperamos el turno para probar el C600 Sport, el -antiTMAX-. Enseguida te cuento cómo va.
EL YAMAHA TMAX YA NO ESTÁ SOLO
Bajarte del C650 GT y subirte al C600 Sport es como descubrir un nuevo mundo. Tú eliges, pero debes tener muy claras las ideas.
No me extraña que en BMW hayan elegido el término Sport para definir a su versión C más económica. Es un maxiscooter -cañero- y te lo comunica desde el primer instante. Es mucho más estrecho que su hermano GT y aunque solo sea por sensación, se siente mucho más liviano. Esto ya te anima a permitirte más alegrías, aunque el propulsor y los reglajes de ambos modelos sean idénticos. De hecho, acelerando al máximo desde parado lado a lado con un GT, las diferencias son inapreciables.
Su sistema que permite albergar un casco bajo el asiento es todo un descubrimiento. En marcha puedes llevar un integral y en parado se convierte en un hueco flexible apto para dos cascos. Está patentado por BMW, pero me parece que le van a salir imitadores muy pronto-
La posición de conducción del Sport también te pide -guerra-. Vas sentado más adelantado hacia el manillar, lo que te permite tener más confianza en el tren delantero. Las trayectorias son más decididas y, asimismo, más precisas. Se puede decir que es más fácil de manejar, aunque la protección del GT es superior, sobre todo cuando las condiciones meteorológicas sean adversas.
Lo dicho, te tocará elegir. Para empezar, en ciudad ha vencido la versión Sport. Veremos mañana qué sucede en carretera.
DOS FORMAS DE DISFRUTAR LA RUTA
C650 GT o C600 Sport, tanto monta, monta tanto. BMW reinventa el disfrute en carretera con un maxiscooter para los más exigentes.
Como en todo maxiscooter, las ciudades atestadas de tráfico no son el mejor medio para extraer lo mejor que son capaces de ofrecer. Por eso hemos dejado Madrid capital nuestras espaldas y nos hemos dirigido a carreteras que conocen bien los moteros del centro de la Península para analizar la propuesta scooter de BMW.
Y la conclusión es muy positiva. Para comenzar, el confort es cinco estrellas en ambas. Mejor seis en la GT y cinco en la Sport. La primera protege mucho mejor las piernas y jugar con su pantalla regulable electrónicamente (manual en la Sport) es inevitable. La Sport cuenta además con un asiento un poco más duro que se une a una ergonomía más deportiva, por tanto, menos confortable. No obstante, la estabilidad a máxima velocidad es notable en ambas, aunque con la posición de pantalla más elevada de la GT te encuentras con ciertas turbulencias en el casco.
Y ahora que hablamos de velocidad máxima, los BMW C llegan sin despeinarse al tope de la escala del velocímetro situado en la cifra de 180 km/h. Entonces corta encendido y te recuerda que estás en España, no en sus carreteras alemanas de origen sin límite de velocidad-
En tramos de curvas, la confianza en plena inclinación es máxima y mantiene las trayectorias sin esfuerzo. Aquí sobresale la sensación de control sobre la pisada de la rueda delantera en el Sport, que permite cambios de dirección más vivaces. Y cuando llega la hora de frenar con decisión a la entrada de las curvas, el equipo de frenos se muestra adecuado, aunque no te pases con las manetas porque la entrada del ABS te puede sorprender si vas -por faena-.
Si quieres una palabra que defina al BMW C600 Sport es divertido, muy divertido. Para el C650 GT me quedo con eficaz, sobre todo si eres un tragamillas de pro. Que no te quepa la menor duda que estos scooter darían más de un dolor de cabeza en sus respectivos ambientes a más de una moto-moto de sus características. Para alcanzar el éxito hay que tener muy en cuenta el precio, pero sabiendo cómo se las gasta BMW en el mercado español, donde con motos de lujo como las R1200 GS, R1200 RT y K1600 GT domina ranking de ventas, me parece que con sus nuevos maxiscooter han apostado sobre seguro.