Luces adaptativas en la BMW K 1600 GT
La solución de faros de xenón adaptativos, por el que la óptica frontal se adapta a los requerimientos dinámicos de una moto, es una de las novedades más sobresalientes de la nueva serie Gran Turismo que BMW presentará en el próximo Salón de Colonia.
El faro principal consiste en un módulo móvil de proyección de xenón montado en el centro y con un espejo reflector. Los sensores de altura registran los datos del eje delantero y trasero para la regulación del alcance de las luces. Debido a la compensación de inclinación, el faro ilumina durante la marcha en línea recta, independientemente del estado de conducción y de carga, siempre en la zona prefijada y de manera óptima.
El equipamiento especial de -luces adaptativas- contiene además un motor de desplazamiento variable que convierte al espejo reflector, normalmente estático, en un espejo abatible. Dependiendo de la inclinación, el espejo gira alrededor de un eje y corrige así el ángulo de inclinación. La luz del faro principal sufre una corrección debido a la compensación de la inclinación del vehículo. El resultado es una iluminación más eficiente y una conducción nocturna en curvas más segura.
La determinación de la inclinación del vehículo se realiza mediante una caja de sensores como en el modelo deportivo S1000 RR. Las informaciones se transmiten mediante un bus CAN y se utilizan para el control de tracción DTC así como para el sistema antibloqueo.
Los faros redondos de luz de carretera con aros conductores de luz, situados a la derecha e izquierda del módulo xenón, identifican el rostro de las K 1600 GT/GTL. Por primera vez se integran en una BMW las luces de posición típicas de los automóviles de la firma alemana.