Prueba Honda ADV 350: más que una cara bonita
Sobre el papel aquello parecía una burrada. Recuerdo los comentarios de la gente el día que se mostró por primera vez. A unos comentarios asombrados, «pero… ¿eso que es?”, le siguieron unos emocionados «pues es bonita, sea lo que sea». Después, dudas: “¿llegará a las tiendas?, ¿será sólo un prototipo de salón?”. La respuesta fue bastante rápida. Efectivamente, aquello era un “concept” de salón que enseguida se convirtió en una moto de calle de difícil definición. Honda puso las cosas en su sitio: ¿es un scooter o una moto? Es una moto crossover con cambio automático de seis marchas con doble embrague, es decir, un concepto muy novedoso que triunfó aunque, como dice la propia Honda, Europa no sabía que la necesitaba.
El caso es que el éxito pilló a todo el mundo con «el pie cambiado». No recuerdo cuánto tiempo exactamente después, pero apostaría que pocos meses, surgieron rumores entorno a la existencia de un X-ADV con menor cilindrada. De hecho, se publicaron fotos de un scooter similar bajo el nombre ADV 150 del que se dijo que llegaría a Europa como 125. Por ahora no está aquí, desde luego, pero es algo sobre lo que muchos departamentos de marketing tomaron debida nota. Así, en el Salón de Milán de este año vimos los resultados en forma de unos cuantos modelos de scooters que seguían dicha tendencia, recuperando aquella moda de los de rueda con tacos de los años 90. Eso sí, por aquel entonces abundaron en la cilindrada más pequeña, con motores 2T de 50 cc, mientras que ahora están llegando en los más populares 125 y 300/350 cc. Y cada uno lo ha interpretado un poco a su manera, como suele ocurrir con los segmentos nuevos y hasta que el mercado deje claro cuál funciona comercialmente y cuál no.
De las grandes marcas ya han llegado los Aprilia en 125 y 200 cc bajo el nombre de SR GT, con una decoración muy juvenil y sport en un enfoque de ruedas de tacos, sí, pero de escasa intención trail. En realidad, se trata de un GT ciudadano cuyas cotas y formas le dan un plus de facilidad en ciudad. KYMCO ya trae los DTX, en este caso en las dos cilindradas principales, con un 125 y un 350 cc y, si nos basamos en la presentación que se hizo de este último con unos cuantos kilómetros de pista durante su primera toma de contacto, la marca taiwanesa sí quiso convencernos (realmente lo hizo) de las posibilidades del scooter en off-road. Pero lo cierto es que el grueso de sus ventas se centrará también en aquél usuario que busque un scooter GT bien equipado y prestacional, independientemente de por donde vaya a rodar. No en vano sustituirá en la gama al «on road» Super Dink.
El Honda también ha llegado ya, al final en versión 350. Posiblemente acabará apareciendo en 125 cc aunque por ahora no hay noticias confirmadas al respecto. Y seguro que a lo largo de este año llegarán más ofertas en los diversos segmentos de scooters con este estilo «trail» o «fun» o «TT» o como lo quieras llamar. Desde luego, los tres que ya hemos probado sorprenden por lo que ofrecen, que no es precisamente sólo una estética nueva, de moda y muy atractiva. También han demostrado que tanto en cuidad como en carretera pueden ser hasta mejores que los scooters, digamos, clásicos.
CÓMO ES EL HONDA ADV 350
El ADV desde luego lo es. La base técnica es compartida con el Forza 350 pero no sólo es una nueva carrocería. Cuando los coges se notan muy diferentes. Desde luego, aparte de las líneas generales, coincide poco con el X-ADV grande: aquél, te recuerdo, tiene estructura de moto, con el motor en el centro y transmisión final por cadena, con caja de cambios de seis marchas aunque el embrague sea automático. En cambio, este es un scooter, en ese sentido, bastante estándar, con el motor basculante en la parte trasera inferior.
Incluso con ello, se nota un trabajo de puesta a punto muy exhaustivo, como cabe esperar en Honda. Emplea un chasis de tubo de acero bastante estándar pero muy bien diseñado, capaz de darle al scooter buen rodar sobre casi cualquier suelo. Delante llama la atención el uso de una horquilla «de moto», con doble tija. De hecho, presume de ello: el manillar visto deja también abierto el hueco inferior, al estilo moto, y ves desde arriba esa tija superior y los tapones superiores de las botellas de la unidad invertida, con la inscripción «Showa»; que quede bien claro la calidad de los componentes.
Detrás tampoco se ha escatimado, ya que los dos amortiguadores también van firmados muy a la vista por la misma marca, con botella separada. Las ruedas son de tipo mixto, con la delantera de 15″ y la trasera de 14″. Con todo esto, la altura libre al suelo ha ganado apenas 10 mm sobre un Forza 350. Para frenar encontramos un disco delantero de 256 mm y un trasero de 240 mm, con el obligatorio ABS y el interesante sistema de frenada de emergencia activa que enciende el sólo la intermitencia trasera cuando detecta esa situación.
El motor es el eSP+ 330 cc de Honda que se monta en el Forza y en el SH, con culata de cuatro válvulas, un sólo árbol de levas y un montón de tecnología para aumentar su rendimiento como inyección de aceite en la espalda del pistón, cilindro descentrado, bomba de aceite de barrido, eje de equilibrado, etc. Entrega prácticamente 29 CV a 7.500 rpm, con un par de 31,5 Nm, arrojando un consumo oficial de 29,4 km/l, o lo que es lo mismo, 3,4 litros a los 100 km.
Dispone de un elevado nivel de equipamiento. Por supuesto, toda la iluminación es mediante LED. Lleva una llave de proximidad, la cual también abre el top case oficial accesorio y un enchufe USB-c en la guantera que se abre pulsando sobre ella. La cúpula se regula en cuatro posiciones de altura de forma manual, y bajo el asiento te encuentras el mismo enorme y bien organizado hueco para dos cascos integrales, con 48 litros de capacidad. Puedes dividirlo en dos zonas a tu gusto gracias al separador de carga de varias posiciones y tiene el hueco específico para las herramientas, donde tiene la oportunidad de dejar más cosas sin estorbar al resto del hueco.
Por último, el cuadro digital LCD está bien integrado en las líneas del scooter y tiene ese estilo “trail-adventure” que recorre toda la moto. En él encuentras mucha información, entre otra, la posición en la que llevas el control de tracción; conectado permite cierto nivel de deslizamiento, o desconectado para que te sientas libre de rodar como quieras. Se hace con una tecla dedicada a ello en la piña izquierda. El cuadro lleva el sistema de control de voz de Honda: conectas el móvil a través de la app RoadSync de Honda a unos cascos, y puedes dar órdenes de voz al móvil tocando nada más que los mandos de la piña.
Precios y rivales del ADV 350
Si te estás planteando un nuevo scooter de media cilindrada, desde luego tienes donde elegir hoy día. Si lo que estás es dudando pero tienes clara la marca, dispones de tres opciones “tres y medio” en Honda, más el Forza y el X-ADV grandes, cuyo precio está en «otra esfera». Si lo que tienes claro es que quieres un nuevo scooter de este estilo en cilindradas medias, sólo tienes como rival el nuevo KYMCO DTX 350… y alguna opción más, pero saliéndote un poco del segmento.
Así, Aprilia ofrece una versión 200 cc del nuevo SR GT. Salen desde 4.199 € en la opción más barata (hay un sport, diferenciado nada más que en colores) que con 18 CV es realmente un 125 muy urbano, ágil y divertido de llevar pero que, obviamente, se queda lejos en prestaciones. Otra variante curiosa es el BMW C 400X: no lleva ruedas de tacos ni tiene una verdadera intención trail, aunque sus líneas sí recuerden a los scooters de este estilo. Se llama 400, cuesta como uno de ellos (6.990€ sin opciones) pero es un 350; eso sí, con 34 CV sería el más rápido de los 300/350, con prestaciones similares a los 400 menos rápidos.
El KYMCO es su rival más directo ahora mismo. Es un 321 cc con un motor también muy moderno de 29 CV. Su estilo es claramente «adventure» con neumáticos de tacos, aunque en este caso más pequeños (14″ y 13″) y suspensiones más estándar. Alto nivel de equipamiento, buen hueco bajo el asiento y, sobre todo, un precio más contenido que el del Honda, 5.599 € contra los 6.450 € del ADV.
Pero si lo que te interesa es el motor Honda tienes las otras dos opciones que lo emplean: un Forza 350 lleva cúpula regulable electrónicamente y el resto del equipamiento similar al ADV, con suspensiones más estándar por 6.225 €. Y por supuesto el SH, el rey de los rueda alta, ahora con este mismo motor y también elevado nivel de equipamiento por 6.150 €.
Cómo va el ADV 350
Hace ya unos años que Honda replanteó toda su estrategia con los scooters. Los SH Scoopy siempre han funcionado bien pero el resto de la gama tuvo altibajos. Hasta el PCX y el motor eSP. Después llegó el Forza 125 y sorprendió casi más que el, aparentemente “extraño”, PCX. Se añadió, no hace mucho, el motor 350. El Forza y el SH de esta cilindrada ocupan desde entonces, por méritos propios, el puesto de referencia en sus segmentos. Con todo ello, el ADV reforzará la posición de la marca en ese segmento de scooters medios con una imagen muy fuerte y llamativa, en una variante que va francamente bien.
A la vista está que es un scooter que ha sabido adaptar la imagen trail del X-ADV. Es atractivo y, por supuesto, no decepciona en sus acabados. Te subes a él y no resulta muy alto y es fácil moverte sobre el asiento. El manillar parece ancho y alto para lo estándar en un scooter. Los pies tienen mucho espacio para ir más delante o detrás y al final puedes adoptar una posición muy natural y cómoda, o echar los pies hacia detrás y el cuerpo hacia delante, más «racing». De hecho, con el manillar alto y mi 1.65 m de altura, es hasta posible llevarlo de pie sin dificultad.
En marcha el motor es todo suavidad y potencia. En la información de Honda se habla de un nuevo ajuste de la transmisión especialmente pensado para potenciar agilidad y aceleraciones… y efectivamente se nota que acelera muy bien, aunque en velocidad punta no es tan brillante como su hermano Forza. Aún así, en carretera abierta corre lo suficiente para reducir los puntos de tu carnet a poco que te dejes llevar por sus prestaciones. Yo creo que el enfoque, en este sentido, del ADV es más ciudadano. No te engañes: en Honda no han diseñado un desarrollo más corto para las trialeras en el campo, sino que se ha buscado un scooter más ágil y maniobrable que el Forza, que queda como una opción más GT… más de carretera. Así, el ADV destaca especialmente en ciudad. Esa posición de conducción, que invita a un rodar hasta un tanto «gamberro» con un motor que acelera brillantemente y una agilidad que no tienen siquiera muchos 125. A eso súmale unos frenos con buen tacto y un ABS que entra cuando debe, unos neumáticos con buen agarre y unas suspensiones bien planteadas, capaces de pasar sobre los badenes de velocidad sin cortar gas (aunque salte un poco de atrás) y, al tiempo, sujetar bien al scooter en curvas.
El control de tracción actúa con suavidad. En su posición media sí deja que deslice algo, más bien poco, por si te da por hacer algo de off-road (no tracciona mal sobre suelo seco de tierra con estas ruedas). Pero es en carretera donde resulta divertido de llevar. La cúpula está muy bien diseñada: en la posición baja quita bastante, pero si no eres alto y si te molesta algo de aire puedes subirla bastante. Anda muy bien en autovía e incluso llevándolo a tope no se mueve ni le notas que vaya forzado de ningún punto. Y al final, todas esas cosas que en la ciudad le convierten en uno de los mejores 350, salen a relucir también en las curvas: frena, se tiene, puede tumbar a placer y te da sensación de control, con ese manillar ancho y con mucha palanca, más el tren delantero de doble tija.
LO MEJOR
- Estética conseguida
- Equipamiento completo
- Comportamiento
MEJORARÍA CON
- Pantalla LCD: un scooter así merece un TFT
- Precio algo elevado
ASÍ VEMOS EL HONDA ADV 350
- En carretera: 4
- En ciudad: 5
- Pasajero: 4
- Confort: 4
- Equipamiento: 4
- Autovía: 4
(Puntuación entre 1 y 5)
El ADV es un gran scooter que viene a completar una de las gamas ahora más interesantes del mercado, la de los scooters medios. Aprovecha la imagen aventurera y exitosa del X-ADV con el potente y suave motor de 330 cc de la marca, convirtiéndose en un scooter muy atractivo, divertido de llevar, versátil y muy capaz. Es suficientemente rápido en autovía y en carretera, es muy ágil en ciudad y siempre muy cómodo, con un buen nivel de equipamiento que, al final, acaba notándose en el día a día.
FOTOS: Miguel Méndez
Más información del Honda ADV 350
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