Honda CB 1100 2013: Un icono a la hora actual

Evoca intencionadamente la CB 750 Four de 1969, la pionera de las tetracilindricas y del freno de disco, una moto expresamente pensada por Soichiro Honda para hacerse con el mercado mundial de las superbike. Y lo consiguió en un abrir y cerrar de ojos. Aquella mitificada Four era moto obligada en la Europa libre de los 70. Barrió a las más clásicas marcas británicas e italianas, abrió nuevos horizontes al motociclismo y marcó pauta de futuro. Se convirtió en icono del motociclismo moderno y ahora revive el esplendor de antaño mediante la nueva Honda CB 1100 cosecha 2013. Una moto sorprendente por versatilidad, finura, agilidad, eficacia y elegante prestancia. Es una neoclásica de lo más conseguido, difícil de pasar desapercibida y difícil de no cautivar a quien la conduzca.

Su diseñador y jefe de proyecto, el ingeniero Hirofumi Fukunaga –autor de muchos otros tetracilindricos Honda- concibió una neoclásica puesta a la hora actual utilizando la tecnología disponible aplicada a su concepto de neoclásica de máxima eficacia. Más que prestaciones absolutas buscó sensaciones agradables y satisfactorias al alcance de todos, una moto divertida y fácil de manejar incluso en ciudad. El motor de 90 CV a solo 7.500 rpm y un par de 93 Nm a 5.000 rpm es gran responsable de dar satisfacción al usuario: prácticamente un tractor de dos ruedas para uso diario con visos deportivos y ruteros. Poco le importa que sea ciudad, autovía o carretera de montaña, siempre está presto a sacar su genio con suavidad y finura a cualquier régimen y marcha. En ciudad callejea en 5ª a 1.000 rpm sin el más mínimo traqueteo y con respuesta noble y decidida al roscar el acelerador sin recurrir al cambio. Pasa las rotondas en 5ª al ritmo del tráfico (denso) sin parpadear y acelera con rotundidad –siempre en 5ª- para driblar los coches que se interponen en su camino. Parece automática o mejor dicho: monomarcha. Además es ágil, muchísimo más de cuanto cabe esperar de sus 240 kg. (depósito lleno: 14,6 l.) y ofrece una posición de conducción muy confortable a la vez que adecuada para tomarse las curvas como un desafío. El manillar alto, las estriberas adecuadamente atrasadas y el asiento moderadamente bajo (795 mm) ofrecen una ergonomía de conducción plenamente satisfactoria para que cualquier talla la pueda manejar con soltura. También para alcanzar el suelo a pie plano con solo 1,60 m.

En carretera es un auténtico deleite, ya sea vía rápida o carretera comarcal revirada. Por posición de conducción y respuesta del motor a cualquier régimen es sumamente fácil de manejar con eficacia y soltura. Hasta 4.000 rpm es suave como un  motor eléctrico. A partir de ahí empieza a mostrar su potencial con decisión y a 5.000 rpm (régimen de par máximo) suelta su caballería con contundencia hasta la zona roja (8.500 rpm); aunque no es necesario pasar de 7.500 rpm (régimen de potencia máxima) para sacarle su mejor rendimiento en conducción deportiva y sumamente satisfactoria/eficaz para carretera de cualquier tipo, incluso esas olvidadas y reviradas de montaña con piso deficiente: las suspensiones se encargan de absorber irregularidades, grietas y agujeros con gran aplomo dando gran confianza al conductor, sobremanera si la lleva con marchas largas a pocas vueltas. Es motor de mucho empuje con suave pero decidida entrega y eficaz motricidad. Es noble y forzudo siempre presto para responder a las órdenes de su conductor con poco consumo (5,49 l/100 kms homologados). En vía rápida viaja en la linde del límite máximo autorizado (120 km/h) con el motor susurrando a 4.000 rpm. Casi imperceptible. Lástima de las finas vibraciones de alta frecuencia que transmite el manillar (no las estriberas con forro de goma) a pesar de equipar árbol contrarrotante y anclar el manillar sobre silentblocs. Posiblemente ese sea su único «pero».

El apartado frenos también ha sido muy cuidado y dimensionado. Equipa de serie ABS/C (Combinado), muy poco intrusivo, para gestionar la pareja de discos delanteros de 296 mm y el trasero de 256 m/m. Las palancas de freno y embrague son regulables en distancia al manillar.

Neoclásica refinada y elegante.
 

El cuidado diseño de líneas de la Honda CB 1100 evoca a la Four del 69 con elegancia. Depósito, asiento y faro redondo recuerdan a su ancestro. Los cromados, aplicados con mesura para conseguir el lujoso refinamiento de antaño sin caer en la sobrecarga chabacana, le confieren un toque de elegancia que la distingue de cualquier naked actual y también de otras retro de anterior aparición en el mercado. El panel de instrumentos evoca el de la Four con dos relojes independientes, de esfera verde, entre los que se interpone una discreta pantalla LCD con reloj horario, nivel de gasolina y kilometraje total y parcial.  La Honda CB 1100 entra por los ojos desde la primera mirada.

A pesar de su aspecto mesuradamente retro, dispone de una selección de accesorios para personalizarla con detalles que realzan el concepto de lujo discreto con el que ha sido diseñada. Además puede montar puños calefactables, transportín trasero adaptado para sujetar un Top Box con respaldo para el pasajero. No es una viajera, pero se puede viajar confortablemente con ella; al fin y al cabo, con la Four se hicieron innumerables viajes por el mundo.

Ficha técnica
 
Motor: 4T, 4 cil en línea; aire/aceite
Cilindrada: 1.140 cc
Potencia máx. decl: 90 CV a 7.500 rpm
Par máx. decl: 93 Nm a 5.000 rpm
Cambio/trans: 5 vel. Cadena
Chasis: Tubular doble cuna.
Suspensión del: horquilla convencional 41 mm
Suspensión tras: Doble amortiguador.
Freno del: 2D. 296 mm
Freno Tras: 1D 256 mm
Neumáticos del/tras: 110/80-18// 140/70-18
Entre ejes: 1.490 mm
Geometrias: 27º/114 mm
Peso declarado: 240 kg lleno.
Garantía: 2 años
Colores: Rojo, Blanco, Negro
Precio: 12.199 euros