Nueva Honda CB 1000 R 2018: marcando estilo

La nueva Honda CB 1000 R es, según la marca, una moto que no solo es visualmente diferente a lo habitual en el segmento, sino, textualmente, «una motocicleta que se ve, se siente y funciona de forma muy diferente a todo lo visto hasta ahora». Su imagen se basa en la concept «Neo Sport Café» presentada en el Salón de Tokio 2017, inspirada por el «minimalismo retroindustrial». No hay apenas plástico a la vista mas allá del guardabarros delantero y poco más (seis piezas son de este material) y se ha dado preeminencia al metal. Así, protector del radiador y tapa del airbox son realizados en aluminio cepillado, y tapas del motor, culata y buje de corona son mecanizados, por poner un ejemplo de la cuidada terminación de la moto.

El motor se basa en el cuatro cilindros de la Honda CBR 1000 RR. Con respecto al anterior empleado en la CB 100 R se ha ganado un 16% de potencia a 10.000 rpm (143 CV a 10.500 rpm) y un 5% más de par a medio régimen, para un total de 104 Nm a 8.000 rpm. Se ha montado un desarrollo de transmisión un 4% más corto. Y con estos datos, la Honda CB1000 R 2018 dispone de la linea roja a 11.500 rpm y el corte de encendido en 12.000 rpm, siendo capaz de acelerar, entre 1ª y 3ª, más deprisa incluso que la CBR 1000 RR. No en vano emplea, por ejemplo, los pis-tones forjados en lugar de fundidos, al igual que la Honda CBR 1000 RR SP. Por supuesto, para transmitir esta potencia se emplea un embrague asistido y antirrebote.

Se recurre a un sistema de acelerador electrónico que Honda denomina TBW por sus iniciales en inglés (Throttle By Wire). Ello permite implementar tres modos de conducción que operan sobre el mapa de potencia en tres niveles, el mapa de freno motor y el control de tracción denominado Honda Selectable Torque Control (HSTC). Los tres modos son Rain, Standar y Sport, pero se incluye un cuarto modo bajo la denominación User que permite que diseñes tu estrategia de funcionamiento de esos tres parámetros (potencia, freno motor y control de tracción) y que queda registrada. Esta información será visible desde el nuevo cuadro, que también incorpora un visualizado de marcha engranada que destella con frecuencia creciente cuando se alcanzan las rpm programadas y cambia de color para indicarte que cambies de marcha. Este cuadro muestra una original forma de T y exhibe el mismo acabado en metálico que el bisel del faro delantero. La moto añade toda la iluminación en LED. Atrás se enciende en una barra de LED la luz de posición con forma semicircular, y cuando pisas el freno este semicírculo se convierte en sólido. Por otro lado, el interruptor de encendido de la moto está integrado en la parte delantera del depósito de gasolina.

El chasis es un monoviga de acero, 2,5 kg más ligero que el anterior. Emplea placas de aluminio para anclar el basculante monobrazo, más corto que el anterior, lo que convierte a esta Honda CB 1000 R en una moto más ágil. Ofrece el mismo ángulo de lanzamiento y es 7 mm más larga entre ejes en total para un peso de 212,7 kilos en orden de marcha (12 kg menos que la anterior). A destacar que se ha colocado el centro del cigüeñal 5 mm más alta para aumentar aún más la agilidad de la moto.

En las suspensiones se emplean elementos Showa, con una horquilla invertida, la conocida SFF-BPF, con todas las funciones de amortiguación en una de las patas. Atrás, el monoamortiguador es regulable en precarga, compresión y extensión. Para frenar incorpora pinzas radiales frontales sobre discos de 310 mm. Y para agarrarse al suelo, la rueda trasera pasa a ser una 190/55-17 en lugar de la anterior 180 más estándar.

Vídeo de la nueva Honda CB 1000 R 2018