Las Ducati Streetfighter V2 y V4 muestran su irreverencia en esta prueba, ahora incluso con carnet A2 desde 2025
Ducati Streetfighter ha sido, desde su primera aparición, sinónimo de moto naked irreverente, sin compromisos, dedicada a encandilar a aquellos que persiguen una conducción deportiva a los mandos de un manillar alto.
Como bien sabes, Ducati está siguiendo un patrón de conducta que parece estar escrito por un futurólogo, no solo en competición donde sabe en todo momento qué hacer para anular a la competencia, sino también en los mercados comerciales de medio planeta.
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Motos como la Ducati Panigale V2, en su revisada versión 2025, demuestran que el nexo de unión entre carreras y tiendas siempre funciona, como diría D. Paco Bultó en su momento al dar vida a la inolvidable marca patria Bultaco.
Bien saben en Borgo Panigalque hay que saber escuchar las demandas del usuario. ¿Y cuál es el resultado una vez metemos todo en una coctelera? Motos para todos, pasionales siempre, pero incidiendo en un arco de público más amplio que demanda soluciones… y las encuentra en las Ducati de última hornada.
Dos Ducati Streetfighter para repartir…
No es que esté hablando de un par de Ducati «matonas»… Lo que reparten, y de manera muy inteligente, es el público al que van dirigidas ambas motos; un aspecto que años anteriores quedaba estigmatizado bajo el yugo del carnet A.
Ahora y como te digo, el acceso a una Streetfighter con carnet A2 no es tan posible como recomendable desde diferentes ángulos, lo que en realidad antes no sucedía con las más bien radicales versiones V2 y V4 de la saga italiana.
Mientras la poderosa Ducati Streetfighter V4S que hemos probado se deja llevar por un precio más allá de los 30.000 euros, sin embargo ahora sigue la receta establecida con todo el rigor por su hermana pequeña Ducati Streetfighter V2S.
El objetivo de ambas, más allá de embelesar a los amantes del diseño transalpino y la raigambre italiana, es acercar el producto al usuario. ¿Cómo? Convirtiendo dos verdaderas fieras en motos no solo para pilotar, sino también para conducir y disfrutar en ambientes dispares.
Mientras la V4 lo hace con todavía más potencia que la 2024, recorte de peso incluido, la V2 da un giro más directo y tal vez atrevido con el empleo del nuevo motor 890 cc de válvulas y admisión variable, presentándose como la Speedfighter más ligera de la historia.
Sí, y también menos potente que la versión 2024. Pero atención, porque como bien deberías saber, en la vida no todo es caballos desbocados, sino el equilibrio entre parte ciclo y propulsor, peso y potencia. La nueva V2S probaba nos ha dejado boquiabiertos en este sentido…
Trabajo en busca de resultados
No te voy a bombardear con cifras de peso, potencia, cambios de geometrías y demás detalles que puedes encontrar perfectamente detallados en la previa de ambas motos desarrollada por Nicolás Merino, tan pronto como fueron desveladas ambas novedades 2025.
Y lo digo por dos motivos fundamentales: porque dos motos dan para mucho (más todavía con el listado interminable de soluciones aplicadas para su evolución), pero también porque he de comentarte las impresiones obtenidas a los mandos de las Streetfighter mediante una toma de contacto breve, pero muy reveladora.
Eso sí, al menos vamos a quedarnos con lo fundamental tanto de la V2 como de la V4, dominando en la primera un nuevo motor que ya te hemos desvelado en la prueba de la Ducati Panigale V2S y, en su momento, con la presentación de la Ducati Multistrada V2S.
Mientras el nuevo 890 cc Euro5+ y un ciclo muy revisado son protagonistas en la «peque», la V4 se caracteriza por acercarse todavía más a la Panigale V4, pero insisto, sin asustar gracias a una electrónica profundamente implantada en una moto de referencia en este ámbito.
Y es que esta naked sport top se desmarca con 6 CV más y 4 kilos menos respecto a la versión 2024, aportando un sistema de escape revisado para no ser tan escandalosa, suspensiones electrónicas Ohlins apoyadas en la plataforma DVO (Ducati Vehicle Observer) donde los algoritmos propios de la marca adaptan las prestaciones a tu nivel de pilotaje, adelantándose a tus movimientos…
Una vez en marcha y como te comentaré después, queda claro abordo de motos como la Streetfighter V4S que el futuro ya está aquí al servicio del motorista con plataformas que ni en nuestros mejores sueños, dos décadas atrás, se encontraban presentes.
La nueva doble pareja de aletas se suma al reto de mantener pegada al suelo una moto que dispone de 214 CV en su V-twin desmodrómico, con interesantes modificaciones en geometrías respecto a la Panigale V4 (mayor ángulo de dirección y avance, +0,5º y +1 mm respectivamente), frenada combinada, pinzas Brembo Hypure, shifter 2.0… compartido en este caso con la V2.
Una Streetfighter V2 que también se acerca a la nueva versión de la Panigale V2, pronto en las pistas del WSBK, pero que después de haber probado ambas, con idéntico motor y ciclo, estreno de basculante doble brazo incluido, me quedaría con la interpretación de lo deportivo aportada por la naked, frente a lo sport no tan extremo, pero evidente, de la «Pani new generation».
En realidad y como extra interesante, toda la gama Ducati 2025 ha trabajado para obtener como resultado una mejor evacuación del calor producido por sus propulsores, y lo cierto es que bajo el calor almeriense de inicios de la primavera esto se ha dejado sentir… en mayor o menor medida. Vamos a ello.
Cómo van las Ducati Panigale V2S y V4S
Nos ponemos en marcha y lo hacemos en primer lugar con la «piccola» Ducati Streetfighter V2S, cuyo motor le sienta como un guante pese a que alguno se queje del recorte en potencia; cuidado con esto porque a cambio, como ya te he comentado, tenemos ante nosotros a la Streetfighter más ligera jamás producida.
¿En qué lo notas? Por ejemplo, en una extraordinaria maniobrabilidad que aparece nada más iniciar la marcha. Con un embrague tal vez algo duro para «los muy cafeteros», sin embargo solo tendrás que usarlo para salir en primera velocidad, porque el resto, subir y bajar marchas, ya lo hace bastante bien el nuevo shifter 2.0 que desplaza el interruptor de la varilla para actuar de manera más directa en el interior del motor.
Esto se traduce en un tacto efectivamente con sensaciones más estandarizadas, lejos de lo esponjoso que resultaba en la versión inicial. ¿Y es infalible? No del todo: fallé un par de cambios quedándome abriendo gas con el vacío por respuesta; no fue obra del control de tracción, pero sucedió.
Más allá de esto, todo, incluido el tacto de gas seleccionable (Hi, Medium, Low) en su nueva instrumentación TFT (un pelo justa de tamaño, justo al contrario que el de la V4), es tan directo o relajado como tú quieras, lo que se agradece mientras ruedas entre tráfico urbano, pero también cuando te liberas en tramos de montaña.
Aquí la Streetfighter V2S es todo un juguete digno de ser aprovechado a la mínima oportunidad. Toda la agilidad y buenas maneras que demuestra una deportiva naked como esta dentro de la ciudad, se convierte en un torrente de sensaciones que pasan a enorme velocidad por tus manos y por tu cabeza.
Tracciona de manera increíble gracias a un TC que aprovecha el 180 de Pirelli como si fuera goma reciente. El tacto y sonido del nuevo V-twin resulta espectacular, con un extraordinario cambio de tono a unas 4.000 vueltas del final (por cierto, este muy dulce) francamente adictivo. El nuevo escape «Pani réplica» le sienta de maravilla, evitando calor y consiguiendo, junto al motor de manera fundamental, un recorte de nada menos que 18 kg respecto a la 2024.
Con un tacto de freno incluso tal vez demasiado directo para neófitos, pero siempre de aplaudir cuando las cosas en marcha pasan muy deprisa, un manillar alto y plano así como un motor siempre con ganas de subir de vueltas, la Speedfighter V2S asistida por la horquilla Öhlins NIX30 con gruesas barras de 43 mm y el «mono» trasero es un verdadero espectáculo de sensaciones… y perfectamente utilizable en el día a día para mi sorpresa.
Esta es otra de las variantes que se han potenciado, para mayor alegría del que esto escribe, en la todopoderosa V4S que he tenido el placer de probar por las mismas carreteras del interior de Almería. Nunca imaginé que los doscientos y pico caballos de una moto naked sport como esta gran Panigale fueran tan accesibles con la nueva configuración.
Ahora bien, mientras el calor no agobia tanto en otras Ducati con el nuevo 890 cc, el Desmosedici V4 sigue siendo un calefactor andante incluso a temperaturas que no llegan a 20 grados; este es un objetivo logrado solo a medias.
Pero si te subes a la V2S y, a continuación, lo haces a la V4S y te parece igual de divertida, no tan crítica como esperabas y llegas a la conclusión que si la pequeña no se aleja tanto en sensaciones respecto a la gran Streetfighter, algo se ha hecho bien… no, muy bien. Y la respuesta no es precisamente que la grande sea una moto que no corre lo suficiente, sino que lo convierte en accesible para todos los públicos. Es la clave.
La electrónica lo ha hecho posible y, sin duda, el trabajo aquí ha sido simplemente espectacular. Con una ergonomía donde no sientes cansancio tras abordar diferentes tramos de montaña y una sensación total de entrega inmediata de par disponible, tanto en una como en otra, queda claro que los motivos que impedían a ambas llegar al usuario de manera tan directa han sido eliminados prácticamente de un plumazo en sus versiones 2025.
Desde luego, la V4S es lo máximo en moto deportiva sin carenado y manillar alto y si en Ducati nos dicen que se ha acercado más a la Panigale que nunca, por algo será, pero lo que considero realmente interesante después de esta primera toma de contacto es la capacidad de hacerte vibrar por parte de la V2S… Una moto extraordinaria incluso para pilotos noveles con el carnet A2. Quién lo hubiera dicho años atrás.
ASÍ VEMOS LAS DUCATI PANIGALE V2S Y V4S
En ciudad: 3
En carretera: 5
En autovía: 4
Confort: 3
Equipamiento: 5
(Puntuación de 0 a 5)
LO MEJOR:
-Máximas facilidades para cualquier tipo de conducción
-Motores perfectamente útiles para cada cometido
-Ergonomía y evacuación de calor mejorados
MEJORARÍA CON:
-Un tacto de embrague que requiera menos fuerza sobre la maneta
-Una pantalla más parecida en la V2 a la de la V4
Hacía tiempo que la prueba de dos motos no me sorprendía tanto por diferentes motivos: por el corto tiempo que he tenido oportunidad de disfrutarlas y, precisamente por eso, su capacidad para convencerme en tan pocos kilómetros.
Las Ducati, por norma general y más enfatizado en las deportivas de pro, suelen ser motos de conducción especial pero muy satisfactoria a medida que exprimes su potencial; que lo sean incluso desde la primera vez que sales del garaje ya no era tan habitual y ahora, a tenor de esta prueba doble, parece que las tornas cambian.
Con la V4S volando por encima de los 30.000 euros y la V2S sin llegar a los 20.000 € con posibilidad de ser pilotada con carnet A2, tengo muy claro que la segunda tendrá que encontrarse destinada a triunfar entre el público deportivo, con la primera desempeñando el título de moto Premium en el más puro sentido del término. Y creo que no echarás de menos el basculante monobrazo… o más CV, ni en la V4S, lógico, ni en la V2S, también por razones propias.
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