Prueba Honda CB 500 X 2016: Aventura asequible
Esta temporada 2016 nos hemos encontrado con la evolución de toda la saga CB, con la versión deportiva CBR 500 R y la naked CB 500 F a la que ahora se suma la trail CB 500 X. Todas comparten el anterior motor de dos cilindros en línea de 471 cc con el mismo chasis que las precedentes, una fórmula de éxito en toda Europa, también en España. Estas versiones se fabrican fuera de Japón, en concreto en la factoría de Tailandia en las afueras de Bangkok. En este país tienen su origen el 90% de sus componentes.
La edición Honda CB 500 X se define como la trail o «crossover» con mejor relación calidad/precio del mercado actual. La prueba de esta nueva versión 2016 ha tenido lugar en Cerdeña (Italia), con un ramillete de carreteras revirada que parecen diseñadas en especial para ella. Su objetivo sigue siendo el de auténtica «moto-escuela», ya que eleva al límite su propuesta como moto idónea para el carnet A2 con su potencia máxima de 35 kW (48 CV).
Honda CB 500 X 2016: todo a la vez
Su nuevo diseño refuerza su imagen muchos enteros, consiguiendo una sensación más dinámica. A destacar que incluye una versión con ópticas frontales de LED. El resultado es una moto con una apariencia digna de su hermana Africa Twin, por ejemplo, aunque haya un mundo de diferencias en sus cifras, tanto de prestaciones como de costes. Sin embargo, esta lejanía no es tal en disfrute a sus mandos. Resulta muy versátil, con una propuesta eficaz en uso dual on-off road. Además, sus Dunlop D609 Trailmax de serie (también está homologada con Pirelli Scorpions) están a gran altura en ambos ámbitos.
Si arrancas la Honda CB 500 X rodeado de tráfico, te costará escuchar el sonido de su motor. El embrague es muy suave y la caja de cambios dispone de relaciones relativamente cerradas. Su mecanismo interno se ha rediseñado, facilitando su uso en ciudad y en tráfico denso. Una vez superas las 6.000 rpm, te sorprende el empuje con el que te obsequia. El ritmo se aviva, aunque las prestaciones máximas quedan limitadas a unos 180 km/h. ¿Realmente necesitas más?
Adecuada, nunca excesiva
El chasis de tubos de acero de 35 mm de diámetro recibe el motor montado de forma rígida en cuatro puntos y ofrece una encomiable manejabilidad. La protección de la cadena se asemeja a una pieza de refuerzo de su basculante, pero no es así. Éste hace actuar un amortiguador Showa regulable en nueve posiciones de precarga, sin más reglajes. Delante, la horquilla, de la misma marca, también recibe esta posibilidad y ofrece 140 mm de recorrido, con un lanzamiento de 26,5º y un avance de 108 mm para una moto de 1.420 mm entre ejes. Se ha diseñado para conseguir una óptima estabilidad a la vez que una gran agilidad. Tan solo el rediseño de la parte delantera, desde las estriberas hasta el faro, hacen que parezca una moto más grande que antes y con más espacio para piloto y pasajero, aunque la altura del asiento se mantiene en los 810 mm.
Te llega a entusiasmar
La palanca que ofrece su ancho manillar es ideal para llevar la Honda CB 500 X de un lado a otro en secciones reviradas de carreteras secundarias. Te llega a entusiasmar porque su dirección es excelente. Para un piloto de 84 kg como yo, situar la precarga trasera en el tercer click de los nueve disponibles permite una elevada calidad de conducción, más allá de lo que esperas en una moto de su coste. Supera con comodidad incluso los peores baches que han aparecido en carreteras de montaña tras las heladas del invierno. Lástima que no disponga de un mando remoto para ir cambiando sus opciones más rápido y fácilmente para un piloto novel que vaya acompañado de forma esporádica.
El diseñador Kiyoshi Katagiri ha extraído una imagen de más carácter con la Honda CB 500 X que con el resto de sus hermanas CB 500, muy próxima a la referencia Honda Crosstourer. El asiento resulta más confortable de lo que en principio podía parecer tras una jornada de 230 km a sus mandos y sus retrovisores están bien situados. Además, se ha modificado la toma de gasolina, siendo ahora de más calidad. Por otro lado, resulta un poco complicado accionar la pata de cabra cuando estás sentado sobre ella, porque queda escondida bajo la estribera izquierda. Y lo mejor de todo es que su pantalla ahora es 100 mm más alta, con una posición superior 40 mm más elevada que la más baja, lo que ofrece una gran protección a alta velocidad sin crear excesivas turbulencias. Puños calefactables, antirrobo en U, antinieblas, protector de depósito… son algunos de los 15 componentes accesorios que componen el catálogo oficial de la Honda CB 500 X.
A un precio de 6.249 €, tienes una trail con mayúsculas que resulta válida para todo tipo de pilotos, jóvenes o más máduros, para excursiones y para ciudad, para ir solo o acompañado, pero, sobre todo, para divertirte. Práctica, racional, económica… una moto muy Honda.