Kawasaki viste la nueva Z900 2022 con nuevos colores

La primera Kawasaki Z900 quiso parecerse a su hermana mayor, la Kawasaki Z1000, compartiendo su carácter Sugomi para apropiárselo y mostrar esa faceta oscura y potente de la idiosincrasia nipona. Hoy, tras dos versiones principales, nos encontramos con una superventas claramente abierta a todo tipo de público, ya sea experimentado o no tanto al disponer de la versión limitada para el carnet A2 a 95 CV.

Al igual que sucedía con la “zeta” de litro, la Kawasaki Z900 ofrecía una imagen tan potente como la de su compañera de catálogo, quedando respaldado una vez en marcha por un motor que tampoco dejaba indiferente a nadie. Apenas necesitaba una revisión en cuanto a la aplicación de nuevas tecnologías para mantenerse en el mercado como lo que es, una diva dentro del sector de las maxinaked. La iluminación LED o la intervención de la electrónica en el rendimiento del motor fueron decisivas para conservar su posición de privilegio en el mercado. Todo ello sin renunciar, en ningún momento, de una agresividad trasladada a la posición de conducción, con un manillar ancho y, al tiempo, bastante plano y un asiento de altura reducida que situaba al piloto “dentro” de la moto, más que sobre ella. Unas peculiaridades que, pasados los años, han servido para imprimirle carácter a un modelo de innegable calado en su segmento.

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Opciones inteligentes

Pronto Kawasaki observó que el hecho de no disponer de una versión apta para el carnet A2 era una forma absurda de perder clientela potencial. Así, la actual versión limitada a 70 kW (95 CV) permite abrir la puerta a los pilotos más noveles que, una vez superada la obligada fase de aprendizaje, dispondrán de todo el despliegue del tetracilindrico en línea. Un propulsor suave cuando se le requiere, “desmelenado” en el momento de disfrutar en aceleraciones o tramos virados, momento en el que su parte ciclo, de apariencia sencilla pero eficiente, consigue reportar al piloto sensaciones de naked deportiva directa y contundentemente.

Tanto la versión limitada como la “fuerza libre” disponen de elementos tan requeridos y valorados hoy día como el control de tracción seleccionable KTRC, tres modos de motor al que se le añade uno configurable o un amplio display TFT en cuya ventana encontramos información de todo tipo convenientemente presentada, entre la que se incluye la conexión vía Bluetooth con tu teléfono inteligente. Todo ello aderezado con tres combinaciones de colores, dos de ellas al más puro estilo oscuro Sugomi y una tercera más clara y luminosa.