Elvis encontró en Triumph el mejor regalo para sus amigos… de la Mafia

La afición por las dos ruedas y la relación de Elvis Presley con Triumph Motorcycles es sobradamente conocida. De hecho, apareció en moto en muchas de sus películas, como es el caso de la Triumph Bonneville 650 Desert Sled roja y plateada que puede verse en ‘Stay Away Joe’, comedia musical de 1968.

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Pero el gran nexo entre ambas leyendas tiene que ver con un mito que, recientemente, se ha confirmado como una realidad. Una increíble historia que nos lleva a 1965, cuando Elvis rodaba ‘Frankie and Johnny’ en los estudios Samuel Goldwyn de Hollywood y disfrutaba de su tiempo libre en su lujosa casa de Bel Air, junto a la conocida como Mafia de Memphis, formada por sus mejores amigos. Fue entonces cuando Jerry Shilling, uno de estos amigos cercanos, se compró una Triumph 650 Bonneville T120 en Robertson & Sons, en Santa Mónica Boulevard. Nada más llegar a la casa de Bel Air, Elvis vio la moto y le pidió probarla, dando una vuelta por el vecindario. 

Una experiencia que le impresionó tanto que, nada más bajar de la Triumph, le dijo al transportista, Alan Fortis, que encargase “una para cada uno de los muchachos, pero… ¡Tiene que ser esta noche!”. Nueve motos de la marca británica, de las cuales, transcurridas tan solo unas horas, recibieron las primeras siete, entre TR6 de 650 y T120 de 650 con doble carburador de alto rendimiento.

Amor a primera vista

La Mafia de Memphis pasó así la noche recorriendo Bel Air sobre las motos Triumph y sólo se detuvieron cuando los vecinos, motivados por el jolgorio formado, llamaron a la policía. Unas salidas en moto que se siguieron sucediendo en cuanto recibieron las dos monturas que faltaban, dos días después, y que repetían cada domingo, recorriendo la Pacific Coast High entre amigos. “A Elvis le encantaba andar en moto y yo sabía que cuando viera mi nueva Bonneville querría probarla… y cuando lo hizo, quería que todos los muchachos tuvieran una para que pudiéramos montar juntos”, contaba Jerry Shilling.

Ahora, la historia se ha confirmado gracias a la aparición entre los archivos de Graceland de los cheques de la transacción firmados por Elvis, en los que se puede observar que, efectivamente, el Rey del Rock adquirió nueve motocicletas Triumph para regalar a sus mejores amigos.

Actualmente, se desconoce la ubicación de cada una de estas nueve motos, por lo que Triumph Motorcycles realiza un llamamiento a todos los aficionados del planeta, a quienes plantea una emocionante misión: encontrar las motos originales que Elvis compró y de las que disfrutó durante el verano del 65. Cualquier pista fiable sobre lo que ocurrió con ellas después de ese año o las diferentes ubicaciones en las que han sido vistas desde entonces suponen una importante información que los investigadores de la fábrica de Hinckley recibirán con los brazos abiertos.

El objetivo de esta búsqueda no es otro que poder recuperar esas nueve Triumph 650 TR6 y Triumph 650 Bonneville T120 para exponerlas junto a otras motos históricas de la marca. Si dispones de alguna información relacionada con la ubicación o el destino de las mismas, por favor, contacta con Triumph a través del correo electrónico [email protected].

Dos modelos históricos

Según los documentos encontrados recientemente y el propio testimonio de Jerry Shilling, las 9 motos que compró Elvis para la Mafia de Memphis fueron una mezcla de 650 TR6 y 650 Bonneville T120, ambas del 64, dos modelos que revolucionaron el mercado en aquel momento, por su alto rendimiento. Lo que las diferenciaba entre sí, además de los esquemas de color (la primera estaba disponible en los colores Gold y Alaskan White y la segunda en el característico esquema Hifi Scarlet con Silver Sheen y rayas doradas, además del chasis y la horquilla en negro), era el número de carburadores (uno o dos) y la puesta a punto del motor.

Ambas son motos históricas, especialmente la Bonneville T120, cuyo nombre surge de los incontables récords de velocidad obtenidos por Triumph en las salinas de Bonneville, que fue la responsable de elevar a la marca al número uno en rendimiento, manejo y estilo durante la década de los 60, y que se ha mantenido hasta hoy en día como todo un icono en lo que a diseño se refiere.

Homenaje al mundo de la música

El primer fruto de los contactos iniciados entre Elvis Presley Enterprises y Triumph Motorcycles a raíz del descubrimiento de los cheques en Graceland y del inicio de las primeras investigaciones al respecto se expuso el fin de semana pasado en el Barber Vintage Motorcycle Festival en Birmingham (Alabama, Estados Unidos), donde se presentó una espectacular Bonneville ‘Elvis Presley’ personalizada, en homenaje al Rey del Rock y a su relación con la marca británica.

Tomando como base el modelo T120 actual, el conocido y admirado artista custom J. Daar se ha encargado de diseñar el esquema de pintura, inspirado en el look del cantante y la escenografía de su mítico concierto ‘Comeback Special’ del 68, que supuso su regreso a los escenarios. Esta moto única presenta un diseño marcado por una serie de siluetas negras, que representan la escenografía de este concierto, y por unas letras mayúsculas doradas, con las que se dibuja el nombre de Elvis escrito con luces.

Asimismo, en este festival, además de exponerse otras motos históricas de la fábrica de Hinckley, como una Bonneville original de 1965, los visitantes también han podido contemplar una imponente guitarra Gibson Les Paul especial, personalizada a juego con la Bonneville T120 customizada. Una pieza que está inspirada en otra emocionante historia, la de cómo Elvis regaló a su chef una réplica de Les Paul con la que ensayó para el ‘Comeback’, y que presenta un diseño dominado por el rojo, el plateado y el dorado que también aparecen en la moto, así como por las siluetas de Elvis en uno de sus míticos bailes.

Tanto la guitarra, donada por Gibson, como la propia moto se han destinado, a través de la Elvis Presley Charitable Foundations, a la recaudación de fondos mediante una subasta en beneficio de una de las organizaciones benéficas favoritas de Elvis, Goodwill Homes, un centro de Memphis, ciudad en la que vivió del Rey del Rock, que ofrece asesoramiento y servicios a niños víctimas de malos tratos y a sus familias.