Prueba Piaggio MP3 300 HPE: Los tres pies del gato
Hace ya más de 15 años de la llegada de los primeros Piaggio MP3, el scooter que inventó esto de los vehículos del segmento con tres ruedas. Si recuerdas, aquellos primeros MP3 no se hicieron para que pudieran ser llevados con carnet de coche; eso es algo que se descubrió tiempo después. Aquellos primeros MP3 que se hicieron en 125, 250 y 400 cc, incluido un Gilera Fuoco 500, simplemente apostaban por el plus de seguridad que un tren delantero de dos ruedas aportaba.
Fue el invento de un joven ingeniero. Una idea para un proyecto de fin de carrera que se materializó en un scooter prototipo para un salón que preparó Aprilia con el nombre de Los Ángeles. Algunos años después, en Francia, en un lugar como París, suficientemente al norte como para que las lluvias y el frío otorgasen a ese tren delantero el valor que tenía, fue cuando alguien se fijó que con pocas modificaciones (pedal de freno, intermitentes a cierta distancia el uno del otro y un tren delantero unos milímetros más separado) valdrían para homologarlo como «triciclo a motor» y, por tanto, se pudiese conducir con el carnet de coche en Europa.
Esa historia hizo posible que ahora puedas llevar este scooter que hoy probamos sin tener carnet de moto. También causó que otras marcas entrasen en un segmento que de repente había crecido en posibles clientes y, por tanto, en interés para las marcas, haciendo que la propia Piaggio se replantease qué cilindradas y tipos de MP3 había que hacer.
Ahora, ya unos años después de todo aquello, los MP3 se dividen en dos carrocerías: una más pequeña y ágil, para un scooter de corte eminentemente urbano que sustituyese a aquel poco exitoso Yourban de hace unos años, y la carrocería grande, heredera de los MP3 «de siempre».
En esa segunda opción de tamaño sigues teniendo dos cilindradas a elegir: un gran 530 cc repleto de equipamiento, marcha atrás incluida, y un lógico 400 cc, la cilindrada que siempre le ha venido bien al MP3. Entre los de carrocería pequeña solo tienes disponible el motor 300 de última generación, pero en dos acabados, el estándar y el sport, sólo diferenciados en detalles estéticos como los muelles de amortiguadores rojos, tapicería del asiento y poco más.
Nosotros probamos hoy este 300 HPE en su última versión, Euro 5. Un scooter que intenta mantener un precio más reducido en busca del usuario que necesita un scooter para moverse por la ciudad sin necesidad de grandes prestaciones, pero con mínimas garantías para autovía que permite (y esa es su gran ventaja) mayores prestaciones que un 125 sin necesidad de carnet de coche. Un scooter bien pensado, que demuestra la experiencia de Piaggio con este nuevo tipo de vehículo, simple, fácil de llevar, sin complicaciones, con tres ruedas… pero que no le busca tres pies al gato.
Cómo es el Piaggio MP3 300 HPE
El Piaggio Mp3 300 se presentó en 2019 suponiendo, como ya hemos comentado, una renovación del anterior Yourban, que, sin ser exactamente un fracaso, tampoco obtuvo grandes éxitos; de hecho, para su desarrollo se partió del mismo chasis que se empleaba en el Yourban: una plataforma más corta que la de sus hermanos mayores, con el tren delantero de paralelogramo deformable similar al del resto de los MP3, capaz de bloquearse de forma eléctrica para quedarse de pie.
Es, como siempre ha sido, un mecanismo electrohidráulico por el que cuando tú pulsas el botón en la piña derecha por debajo de cierta velocidad, se bloquea la inclinación. Mientras que esté desbloqueado (y esto sigue siendo una de las grandes dudas de los que se acercan a este tipo de vehículos por primera vez), el scooter se cae si no lo sujetas, como haría cualquier moto de dos ruedas.
El motor es la última versión del 300 que ahora se «apellida» HPE, High Power Engine. Es un motor que efectivamente empuja bien aunque no puede presumir de ser de los más potentes entre los 300. A cambio, eso sí, es muy suave y agradable de llevar. En este encontramos una culata de cuatro válvulas movidas mediante un sólo árbol de levas, que entrega 25,8 CV a 7.750 rpm y 26 Nm a 6.500 rpm. Incorpora el sistema ASR, bastante básico pero eficaz, que combate las derrapadas al acelerar. Lee las velocidades de las ruedas y si detecta que la trasera está acelerando más porque hay deslizamiento, corta el encendido ayudándote a recuperar el control.
Para frenar emplea dos discos delanteros de 258 mm y un trasero de 240 mm con mando a las manetas o al pie. Si quieres usar las manos, la maneta izquierda es combinada: actúa sobre las tres ruedas con buen tacto, pero con la potencia justa. Debes tirar de la derecha, que actúa sobre las ruedas delanteras, para obtener buena potencia de frenado.
El pedal actúa sobre las tres ruedas y tiene mejor tacto y posición que en cualquiera de los MP3 anteriores, usándose con comodidad. En cuanto a las ruedas, lleva unas bonitas llantas de aleación con 13” delante y 14” atrás, por supuesto con el obligatorio ABS actuando sobre las tres.
En el equipamiento destaca por parecerse más en el concepto a un MP3 normal, a pesar de partir de la estructura del Yourban. El escudo es grande, con una cúpula corta, dos faros enormes, con la parte inferior reservada a la iluminación de día que conectas con un interruptor de corredera sobre el lado izquierdo del escudo, Lleva también un asiento del estilo de cualquier scooter GT, con dos alturas bien diferenciadas y con apertura desde el contacto.
Bajo él hay un hueco alargado y con buena capacidad, pero poco profundo: puedes dejar un casco integral pero no dos, ni siquiera un jet. Eso sí, deja espacio para otros objetos. El cuadro es del mismo estilo que en los MP3 grandes, pero con alguna función menos. Lleva una pantalla digital central donde te da datos de consumo entre otras cosas. Y para dejar cosas a mano, en un scooter donde no puede haber una guantera normal (los mecanismos del tren delantero ocupan bastante), hay una guantera pequeña por encima del cuadro con conexión USB.
Además, en el detrás del escudo hay un gancho portabolsas escamoteable y la palanca del freno de aparcamiento, básico en un scooter que puedes dejar bloqueado con las tres ruedas en el suelo.
Cómo va
Todos los scooter de tres ruedas son diferentes de llevar. Sí, se comportan como una moto normal y, a pesar de lo que todavía piensan algunos, si no está bloqueado o no lo sujetas tú con las piernas, cuando te paras se cae. Una vez rodando se mantiene de pie por las mismas fuerzas físicas que una moto normal pero tienes el doble de goma en contacto con el suelo en el tren delantero, tres puntos de apoyo y dos discos de freno delanteros, cada uno a una rueda, que hacen que frene muy bien y sientas mucho agarre siempre.
Pero también hace que no lo sientas igual que un scooter de dos ruedas. El tren delantero pesa más y a baja velocidad ofrece más resistencia. Es, por construcción, un scooter más pesado que uno normal y también se nota. Pero, ¿todo esto lo hace difícil? En absoluto, solo diferente si estás acostumbrado a las dos ruedas. Además, no todos los tres ruedas son iguales. Cada marca ha empleado un sistema distinto de tren delantero y eso afecta a su comportamiento.
En nuestra opinión, el de comportamiento más natural, y entiéndase como más parecido a una moto, sigue siendo el de Piaggio. Y dentro de los Piaggio de tres ruedas, como ya hemos comentado, este es el más ligero y compacto de la gama.
Aun así reconozco que requiere un tiempo de adaptación. Sigue siendo sorprendente. Desde 2006 que se presentaron los primeros Piaggio MP3, creo que he probado todos los tres ruedas que se han fabricado, prácticamente, en todas sus versiones. Insisto en que siendo el Piaggio el más fácil de llevar cuando aprietas el ritmo, el que más se parece al comportamiento de un scooter convencional, con algunas mejoras que ahora comentaremos.
Pero haces unos kilómetros con ellos, los sueltas, vuelves a las dos ruedas y unos meses después vuelves a coger otro tres ruedas… ¿Y qué sucede? Los primeros kilómetros son siempre extraños. Hay peso delante. No acaba de transmitir el agarre como una buena horquilla estándar. Al final, le coges el aire y te das cuenta de que hay todo el agarre del mundo, casi siempre (pocas veces he visto que deslizara un MP3 de delante), y cuando lo pierde lo hace de una forma mucho más noble y controlable que cualquier moto.
¿Por qué? Entre otras cosas porque desliza, no tiende a «cerrar» la dirección como es habitual. En cuanto llegas a ese punto en el que tienes confianza, se puede llevar muy deprisa. Si además te mueves con el 300 se convierte hasta en un vehículo ágil, hablando de un scooter que, sin peso declarado, debe pasar con facilidad de los 220 kg.
El Mp3 es cómodo. Te puedes subir a él con la dirección bloqueada, ya que es la forma más natural de aparcarlo, a pesar de que cuenta con un caballete central que no siempre es necesario usar. No es alto de asiento (780 mm) y puedes emplear la plataforma como escalón: aunque pises no se va a tumbar.
En marcha simplemente abres gas, se desbloquea y sales. Acelera bien, no hay vibraciones y es suave. Lógicamente hay que ser consciente de que llevas un motor de poco mas de 25 CV en un vehículo que pesa, lo que limita las prestaciones. Aun así, en autovía y en vías rápidas circula bien sobre los 120 km/h reglamentarios. Con algo de bajada o llaneando es capaz de pasar sin problemas de esa velocidad, pero no es un scooter rápido entre los 300, como es normal.
Entrando en curvas, como te decía, es estable, noble y divertido de llevar. Si pisas un bache con una de las ruedas tampoco hace extraños graves y rápidamente te acostumbras a él. Frena bien, aunque como te decía antes tienes que decidir si quieres emplear el pedal o las manetas y, en este segundo caso, necesitarás las dos para tener suficiente potencia. De suspensiones está bien definido: es algo duro y, como ha pasado siempre con los MP3, si entras deprisa en un bache se nota algo seco de detrás, aunque muy noble de delante.
En la ciudad es un scooter agradable. Dentro de los tres ruedas es seguramente el más compacto y se nota, sin perder de vista que estamos hablando de un scooter que por tamaño y peso es incluso más que cualquier GT de 300/350. Pero el tren delantero ayuda a tener buen tacto y gira bastante; pasa bien entre coches, siempre que te acuerdes que llevas lo intermitentes por fuera de la carrocería y teniendo cuidado de no tocar con una de las ruedas delanteras en un bordillo.
Esto último es algo que te puede complicar el día, porque se girará la dirección y puede acabar mal. Sigue siendo divertido «jugar» a llegar al semáforo y bloquear la dirección sin llegar a bajar los pies, pero ya te digo que no es así como debe hacerse: si paras con el scooter algo tumbado, así se quedará bloqueado y luego al salir tenderá a girar hacia ese lado. Haciéndolo como lo hagas, poder estar sentado del todo, con los pies en la plataforma esperando a que se abra el semáforo, es cómodo.
Lo mejor:
-Es el tres ruedas más compacto y ciudadano
-No requiere carnet de moto
-Tacto tren delantero
Mejoraría con:
-Más equipamiento
-Prestaciones algo superiores
Así lo vemos:
En carretera: 3
En ciudad: 4
Pasajero: 4
Confort: 4
Equipamiento: 3
Autovía: 3
(Puntuaciones de 1 a 5)
El Piaggio MP3 más ligero y compacto es un scooter agradable y fácil de llevar. Un scooter que en ciudad se mueve bien y que, en carretera o autovía, ofrece prestaciones suficientes como para entrar o salir de la ciudad con comodidad, pero tampoco mucho más.
Cómodo tanto para uno como para dos personas, no es un scooter lujoso en cuanto a su equipamiento y menos considerando un precio de más de 7.000 euros. Técnicamente eficaz, frena bien y es noble de comportamiento hasta el punto de resultar divertido de llevar.
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