La Triumph Tiger 850 Sport te demuestra cómo poner el mundo patas arriba para conseguir una trail a tu medida

44 La Triumph Tiger 850 Sport te demuestra cómo poner el mundo patas arriba para conseguir una trail a tu medida
Fotos: Prueba Triumph Tiger 850 Sport
Luis López Lozano
Luis López Lozano
La Triumph Tiger 850 Sport da un giro en el ámbito del trail, entre otras cosas porque no lo es. Te lo explico en esta prueba con un argumento que nunca pasa de moda: la tortilla de patata con o sin cebolla…

Una vez más, Triumph nos sorprende con una moto que busca diferentes objetivos para converger en uno solo: ofrecerte una moto a tu medida. Y si son las trail las que más aceptación llevan teniendo durante los últimos años, el plan es evidente; hay que partir de esta base para colgarse la medalla.

Ahora bien, como quiera que las motos de este tipo son empleadas en un alto porcentaje para acabar rodando, sobre todo, por asfalto, y teniendo en cuenta que los modelos más capaces se presentan con unos precios francamente elevados, lo que toca es ajustarlo para no asustar sino más bien todo lo contrario, es decir, atraer a ese público que las mira deseoso pero con recelo… porque cuestan un ojo de la cara.

Es aquí cuando viene a la mesa la tortilla de patata, ¿con o sin cebolla? A los que nos gusta la redondez y el sabor de un plato como este lo cierto es que nos da un poco igual; una tortilla es una tortilla y la degustamos encantados. Con las motos sucede lo mismo, porque si te gustan todas es porque te llama de verdad este apasionante mundo, aunque nunca está de más rizar el rizo con esa moto que te llama más la atención que otras, incluso de un estilo parecido.

Triumph Tiger 850 Sport 2023

Pues bien, a las trail les sucede algo similar. Te pueden gustar todas o, al menos, la gran mayoría pero, en cambio, haces muchos (e incluso todos) los kilómetros a sus mandos por carretera, beneficiándote de las bondades de este tipo de motos. En ese caso, ¿por qué no afinar más el tiro con una moto que provenga del ámbito trail pero que sea especialista en el pilotaje asfáltico?

He aquí la Triumph Tiger 850 Sport, la moto que te lo da todo en conducción sobre asfalto, ruedes más o menos rápido, más o menos tranquilo, más o menos lejos. Es indiferente. Vale, te gusta la tortilla, como a mí, pero llegado el caso, ¿no degustarías una moto de este estilo adaptada a tus aventuras asfálticas con la que, además, te ahorras unos euros en su compra?  A fin de cuentas, la tortilla sin cebolla también está para chuparse los dedos, sobre todo cuando estética y textura acompañan, mostrándose muy deseable.

Triumph Tiger 850 Sport 2023

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Cómo es la Triumph Tiger 850 Sport

Recién salida de la cocina, la Triumph Tiger 850 Sport es así, tan apetecible como otras trail o más incluso si lo tuyo es rodar por lo duro cómodamente instalado a sus mandos. Por cierto, te explicaré más abajo que aunque la distancia al suelo del asiento sea en su posición más baja 820 mm, no es en absoluto preocupante.

La sencillez, sin llegar a lo espartano, domina en una moto acabada con el esmero que se espera de una Triumph. Por ejemplo, la altura de la pantalla se regula a mano mediante un sistema que consta de un práctico tirador, muelles para tensar y tres posiciones para elegir. Básico, poco pesado y tan fiable que no tendrás que preocuparte por si se queda enganchado o simplemente deja de funcionar. Olvídalo.

Triumph Tiger 850 Sport 2023

En la instrumentación encontramos la misma receta, con un display TFT compacto de brillo y fondo automático que huye de las grandes dimensiones que ocupan casi todo el espacio tras la cúpula. Incluso así, existen cuatro opciones de visualización donde queda dispuesta la información acumulada de diferente forma, presencia y tamaño.

Por ejemplo, es fácil encontrar la manera de seleccionar las dos curvas que, de serie, ofrece la británica, reduciendo la potencia en Rain y aportando todo lo que tiene en Road, mostrando los gráficos habituales para saber, en todo momento, en cuál de ellas estás rodando; sencillo en este caso al disponer de dos fácilmente seleccionables desde el mando multidireccional de la piña izquierda. Por supuesto, no falta ni TCS ni ABS.

Triumph Tiger 850 Sport 2023

Como ya viene siendo habitual, las ópticas son LED, aunque existen otros detalles que no son siempre comunes, por sencillos que parezcan, como el ajuste de las manetas de embrague y freno; también podrás actuar sobre la altura del asiento del piloto con una diferencia de 20 mm, además de otros aspectos más estandarizados como la distancia de la palanca del cambio o el propio manillar.

El motor es “marca de la casa”. El tricilíndrico tiene gran parte de culpa en el carácter de esta moto, supongo que como en todas pero en este caso marca la pauta en un rodar relajado y sereno cuando lo buscas, placentero a tope, mientras que apretarlo significa aprovechar los 85 CV en modo “full”. Los 47 CV para el A2 te dan la opción de aprender a sus mandos para, después, no necesitar un cambio de montura si de verdad te ha enamorado.

Triumph Tiger 850 Sport 2023

Aunque se ofrece como opción, la unidad de Pruebas venía equipada con el cambio semiautomático en subida y bajada, lo que permite aprovechar e incluso incrementar la suavidad de tacto del cambio de 6 relaciones hasta el infinito. Extraordinario.

Triumph Tiger 850 Sport 2023

Cómo va

En la explicación inicial se encuentra la clave para entender a la Triumph Tiger 850 Sport o, al menos, para situarla en el mercado. Sí, deriva de una trail pero no lo es y, si algo tiene de una de ellas es la ergonomía y ese aspecto esbelto que ofrece su figura con manillar alto, asiento doble amplísimo, asas más que generosas para el pasajero, llanta delantera de 19 pulgadas con neumáticos mixtos, etc.

Te hablaba precisamente de la ergonomía haciendo referencia a la altura del asiento para que no te preocupases por la cifra que figura en la ficha técnica. De hecho, a la vista no parece una moto especialmente inaccesible para pilotos de talla baja porque su diseño, en concreto en esta zona, es tan idóneo que se ha moldeado para que puedas subirte, bajarte y pilotar con el mayor confort posible.

Triumph Tiger 850 Sport 2023

En mi caso, soy más bien referencia para pilotos de cierta altura, pero incluso con ello notas que la británica es muy compacta en esta zona, lo que la convierte en casi perfecta para todo tipo de usuarios. Una vez situado en la moto notas cómo el asiento es amplio y muy confortable, con espacio más que de sobra para colocarte más atrasado o adelantado, lo que prefieras.

Como de costumbre, el chequeo de la electrónica y la bomba de gasolina tardan en actuar una vez giras la llave de contacto, lo que nos recuerda que las prisas no son buenas para nada. Una vez puesto en marcha, el motor nos ofrece ese ronroneo característico de la nueva generación, gracias a un orden de encendido que le otorga otro carácter distinto al de las Triumph de generaciones anteriores.

Con ello lo que se ha conseguido es un motor francamente elástico y con ganas de empujar en toda la curva de potencia, pero también algo más “presente” sobre todo en la zona alta donde las vibraciones aparecen con mayor relevancia. En realidad, nada preocupante que forma parte de su carácter, sin más.

Triumph Tiger 850 Sport 2023

Cuando hablamos de un rodar dulce y sencillo lo hacemos de cualquier Triumph. Es, como el tricilíndrico, un sello propio que se presupone, como el valor en la mili. El tacto de todos los mandos es exquisito y el shifter, recuerda, opcional, no hace más que incidir en ello incluso pasando de primera a segunda a velocidad casi de ralentí. Una delicia.

El giro que ofrece la moto es suficiente como para moverte por ciudad con mucha soltura. Por supuesto en una moto de estas dimensiones es mejor llegar bien con al menos un pie al suelo, pero ya te digo que pronto te haces a ella incluso si no mides 1,80 metros como es mi caso. En general se muestra fácil de pilotar, agradable e inmediata de reacciones, como por ejemplo la frenada, de tacto y mordiente estupendos en este ambiente.

Ahora bien, como buena moto de casi 900 cc lo suyo es expresarse con libertad en carretera abierta, algo que deberías buscar a menudo aunque tengas que usarla de lunes a viernes para ir al trabajo. Como ves, la Triumph Tiger 850 Sport es una buena ciudadana, pero le gusta presumir de par y dinamismo en carreteras de extrarradio y más allá, donde por posición de conducción y prestaciones no establece límite alguno… incluido el depósito de nada menos que 20 litros de capacidad, con un consumo francamente ridículo si ruedas a ritmos contemplativos.

Triumph Tiger 850 Sport 2023

Aquí el tacto de las suspensiones y la respuesta del motor resultan excepcionales. Podrás hacer tantos kilómetros como te propongas cómodamente instalado a sus mandos, sin preocuparte por nada más que contemplar todo aquello que te rodea. Las primeras filtran de manera extraordinaria todo tipo de asfalto con el ajuste de serie, y lo cierto es que no se echa en falta nada en el tren delantero, mientras que atrás dispones de una precarga remota para ajustar la altura al peso total que soportes en cada trayecto.

Eso sí, el apellido Sport no se encuentra en los laterales de la moto de manera gratuita. Su desparpajo en zonas viradas aprovechando el motor es sorprendente, sobre todo si te esperas una trail convencional cuando te subes a esta moto. Sin duda los ajustes realizados sobre la base de la que procede, la Triumph Tiger 900 GT, han sido providenciales para encontrarte en la mesa con una jugosa tortilla de patata a tu gusto, ni más ni menos.

Triumph Tiger 850 Sport 2023

¿Y esto qué significa? Que te ahorras nada menos que 2.000 euros en una moto que cumple con la práctica totalidad de usos que puedas darle sobre asfalto, siendo una rutera confortable e incansable, una “commuter” para el día a día excepcional pero también una deportiva para quemar adrenalina, gracias a unas suspensiones suaves pero firmes para apretar, pero también con un motor que responde con linealidad a las solicitudes del puño derecho.

Bien es cierto que no se trata de una “erre” en el pleno sentido de la letra dentro de nuestro mundillo, ya que si así fuera debería aportar más mordiente a alta velocidad, y ajustes hidráulicos para frenar o soltar el recorrido de las suspensiones en función del estilo de pilotaje… Pero es aquí donde encontramos el acierto de Triumph con esta moto: es capaz de ofrecerlo todo, y con muy buena presencia y maneras, sin necesidad de dejarte el sueldo al comprártela.

Triumph Tiger 850 Sport 2023

Lo mejor:

-Nobleza de comportamiento general

-Cómoda en cualquier situación

Mejoraría:

-Con menos vibraciones

-Montando un caballete central

Así la vemos:

En carretera: 5

En ciudad: 4

Pasajero: 5

Confort: 5

Equipamiento: 3

Autovía: 5

(puntuación de 1 a 5 puntos)

Tal vez pienses que he pecado de excesivamente generoso con las puntuaciones que acabas de ver justo aquí arriba. Bueno, dependería de la moto con la que la compares. En este caso, me he ceñido a ella misma, sin ponerla ante el espejo ninguna otra, para decir que en carretera es una moto muy divertida, en ciudad se mueve con un desparpajo que no esperaba, el pasajero te acompaña como si estuviera sentado en una butaca de cine como modelo confortable que es, algo justa de equipamiento justificado por un precio también apretado y, en autovía, haces kilómetros sin darte cuenta beneficiándote además de un enorme depósito de 20 litros.

En pocas palabras, la Triumph Tiger 850 Sport sorprende en muchos ámbitos gracias a lo acertado de su concepción y diseño. Acéptame el símil: es una tortilla de patata bien hecha, con huevos de aves en libertad y con la textura que a ti te gusta, es decir, asfáltica y fácil de digerir… de pilotar. Un manjar deseable y atractivo, tenga o no cebolla.

Triumph Tiger 850 Sport 2023

FOTOS: Miguel Méndez

 

Triumph Tiger 850 Sport