Prueba Orcal SK 01 125: ¡Música, maestro!

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Prueba Orcal SK 01 125: ¡Música, maestro!
Daniel Navarro
Daniel Navarro

Orcal va poco a poco entrando en España. La marca francesa empezó trayendo las retro Orcal Astor y ahora, tras un acuerdo con Keeway/Benelli España para su comercialización, llega ya la nueva gama naked sport SK. La primera de ellas es la SK 01.


Una 125 bien dibujada, con motor de prácticamente 15 CV, una parte ciclo muy sobrada, que comparte con la SK03 de 300, y un equipamiento «curioso», que incorpora un equipo de audio sobre el depósito. Sí, has leído bien y no es una errata al escribir: lleva equipo de audio. Luego hablaremos de él.

Primero será mejor colocar las cosas en su contexto. Orcal es una marca francesa propiedad del grupo DIP. Esta empresa es importadora en Francia de varias marcas y, además, propietaria de una enorme red de distribución en el país vecino. Al igual que otras marcas y grupos (Mash, en la propia Francia o KSR/Brixton en Austria) hace unos años decidieron pasar a diseñar sus propias motos. Estas fueron las Orcal Astor, un modelo de 125cc de estilo retro que se construían en China bajo las especificaciones de la marca. Ahora, con la gama retro desarrollada en tres modelos, han dado el salto y han entrado en este segmento de las naked sport con sus SK.

Es, además, la segunda época de la marca en España. Esas Orcal Astor empezaron a ser importadas por la empresa española Leonart, fabricante de esas originales custom 125 bicilíndricas bajo el mismo sistema que las Orcal o las Mash. Ahora la marca francesa será importada y comercializada por Keeway/Benelli en nuestro país y a través de su más extensa red de concesionarios. Con ellas el grupo Benelli refuerza su estrategia en 125 e incorpora esa original 300, para un catálogo de motos más extenso. Y sí, traen la gama retro y estas SK.

Orcal SK 01 125

 

La nueva gama SK es interesante: estilo roadster, un diseño moderno y actual y mecánicas de buen nivel. No son -no intentan serlo- motos baratas y ya está: son naked sport, cada una en su segmento de cilindrada de buen nivel de potencia y con una ergonomía acertada para ser motos polivalentes. Tienen también buen nivel de acabados y, en marcha (nosotros hicimos ya una pequeña toma de contacto con las dos), son motos agradables y acertadas.

En ambos casos llama la atención ese equipo de audio montado sobre el depósito: lleva radio, USB (lo enchufas debajo del asiento) y conexión Bluetooth para la música, lleva varios botones para selección de fuente de sonido, cambio de canción o emisora y volumen y los altavoces van camuflados a los lados del depósito, en esas entradas de aire (no tienen esa utilidad, solo la simulan). No sé si será muy útil llevar un equipo de audio en moto, pero desde luego, es una originalidad que no pasa desapercibida. Y menos cuando lo usas en la ciudad.

Cómo es la Orcal SK 01 125

Orcal SK 01 125

Partir de cero al desarrollar una moto debe tener muchos inconvenientes, claro, pero seguramente también algunas ventajas. Cuando además lo que diseñas es para encargar la fabricación a China, a una fábrica con experiencia, las cosas deben ser más fáciles. Ya hay muchas cosas probadas y solo queda hacer las líneas maestras y probar que todo funciona. Desde luego, en Orcal lo han hecho bien.

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Es una moto bastante compacta. Un chasis multitubular en acero, muy al estilo Ducati, pintado en negro para darle cierta discreción, El basculante, en tubo redondo de acero, también es original, y sobre el va un solo amortiguador central de anclaje directo. Delante, una horquilla invertida de 37mm de diámetro. Lleva discos en ambos trenes; el delantero, de 300mm, es lobulado y es hasta exagerado en una 125 así, pero es que la moto emplea la misma parte ciclo exactamente que la 300 que entrega casi el doble de potencia.

El motor es un monocilíndrico con culata de cuatro válvulas y refrigeración líquida. El equipo de inyección está firmado por Marelli y emplea un cambio de seis velocidades con un desarrollo bien calculado: es capaz de estirar bien la 6ª llaneando y la 5ª es suficiente en cualquier subida ligera. mientras que bajando es fácil meterla en corte de encendido en directa. Entrega 14,5 CV a 9.500 rpm con un par motor de 11Nm a 7.750. Se trata de un «viejo conocido» renovado, el antiguo motor Piaggio que se montaba en las Derbi Senda o GPR y que ahora, fabricado en China, encuentras en las FB Mondial o en las Malaguti, por ejemplo.

Orcal SK 01 125

Con todo esto, la moto pesa en seco 149 kg. Equipa un cuadro digital LCD bastante completo, con cuentakilómetros total y parcial. Sí se echa de menos un reloj horario, algo importante en una moto que tendrá en muchos casos un uso ciudadano. Pero siempre podrás escuchar la hora en una emisora de radio…

Cómo va la Orcal SK 01 125

Orcal SK 01 125

La moto es agradable en todo: la estética es moderna y acertada, es compacta pero no pequeña, apta para cualquier piloto. Bien acabada, con detalles como el acabado de la carrocería, imitando aluminio cepillado o la pata de cabra, digna de una moto de una categoría superior. La terminación en general es buena, pero vamos a probarla.

Desde mi 1,65 llego bien al suelo a pesar de esos 810 mm de altura de asiento. El mullido es cómodo; no es muy ancho y es fácil inclinarla un poco para apoyar el pie por completo en el suelo. No se siente pesada. La pones en marcha y el sonido del escape es ronco, fino, sin ruidos mecánicos y sin vibraciones. Es un motor conocido ya y muy afinado en su funcionamiento. Si quieres otro sonido, no tienes más que pulsar el botón del equipo de audio sobre el depósito y tienes música: empieza leyendo el USB que llevas debajo del asiento y puedes cambiar a Bluetooth o a la radio. Pero lo cierto es que funciona bien hasta unos 50/60 km/h: por encima solo «intuyes» que algo suena. Y la radio le falta algo de antena: en el centro de la ciudad sonaba razonablemente. A 15 km ya no. Bueno, es un «gadget» divertido y no tiene mayor trascendencia. Y si tienes 16 años y te llevas la moto al botellón, pues ya tiene una utilidad.

Orcal SK 01 125

En la ciudad, música aparte, es una moto agradable. Tiene buena respuesta en bajos y medios, la posición de conducción es razonable y cómoda, y la moto no es muy ancha. La horquilla invertida limita un tanto el radio de giro, pero es suficiente en cualquier situación.

En la carretera la moto anda muy bien. Frena bien, se tiene bien y se deja tumbar con naturalidad hasta grados importantes. Monta unos neumáticos de marca Timsun que ya conocimos de otras motos del mismo origen que, a pesar de su marca poco conocida, tienen un comportamiento en seco encomiable. Admite bien una conducción sport decidida. Las suspensiones también trabajan bien: no son especialmente duras, pero sí sujetan la moto al asfalto y transmiten al piloto con claridad el agarre disponible. El motor sube de vueltas bien y pasa de hecho con facilidad del régimen de potencia máxima. En 6ª es fácil en llano verle en el cuentakilómetros los 115 km/h. No es de récord de la categoría pero, desde luego, entre motos Euro 5 está muy bien.

Lo mejor:

-Moto polivalente
-Estética original
-¿Música de serie?

Mejoraría con:

-Reloj horario en el cuadro
-Precio elevado

Así vemos la Orcal SK 01 125

En carretera: 4
En ciudad: 4
Pasajero: 3
Confort: 4
Equipamiento: 4
Autovía: 3

(Puntuación de 1 a 5)

La Orcal es una moto interesante, con buenos acabados, que anda bien, que se sujeta en carretera y con una estética original y diferente. Lleva un equipamiento suficiente y destaca en él ese equipo de música que, si bien no es necesario, para mucha gente sí es un detalle gracioso. Dentro de las cosas que menos convencen está un precio algo elevado que se justifica por prestaciones o acabados, pero que parece elevado para una marca poco conocida. Eso y la falta de un reloj horario en un cuadro, por lo demás, de buen diseño y completo.

Orcal SK 01 125

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