Hemos probado la Moto Guzzi Stelvio 2024 varios días y estos tres detalles nos han encantado
La prueba de la Moto Guzzi Stelvio en su edición 2024 nos ha revelado sus intenciones que, como maxitrail, trae consigo para pelear en un sector duro y muy competido.
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Tanto es así que se desmarca de las más caras y poderosas «maxis» para mostrarse a un precio contenido, eso sí, con unas calidades que también lo avalan.
El resultado es una moto, como no podía ser de otro modo dentro de la marca del águila de Mandello, muy personal y característica que vuelve a marcar las diferencias con el resto de integrantes que ocupan el mercado.
Cómo es la Moto Guzzi Stelvio
La Moto Guzzi Stelvio es, como decimos, una moto que mantiene la línea del catálogo al que pertenece, aunque en este caso se han tomado iniciativas para cambiar, en cierto modo, el tercio.
Si ya vimos el año pasado en la Moto Guzzi V100 Mandello potentes aires de cambio y renovación, mezclando el clásico motor muy actualizado con una estética contemporánea, la nueva trail sigue sus pasos.
Además, lo hace en muchos sentidos, comenzando por el hecho de compartir su motor y siguiendo por la estética aportada, donde lo clásico apenas aporta pequeños guiños, muy acertados por otra parte.
Queda caro que esta ha sido la intención de la marca italiana, es decir, la de mostrarse al futuro con unas formas que evoquen al pasado (nunca pueden faltar en una marca como esta), pero sin olvidar el presente con una imagen que le proyecte al futuro.
Con el motor de nueva generación estrenado en la V100 y soluciones en la parte ciclo también inspiradas en la preciosa sport-turismo adaptadas al entorno trail, la Moto Guzzi Stelvio afronta su propio camino dentro del sector de moda.
Un camino que pasa por rodar sobre asfalto, como suele hacer la gran mayoría de usuarios de estas motos, para pisar tierra llegado el caso con la debida solvencia, pero sin ser ni mucho menos su principal objetivo.
Las tres cosas que más nos han gustado de la Moto Guzzi Stelvio
La estética
Se trata de algo muy personal pero que, si de verdad te gustan las Moto Guzzi, seguro que para ti es importante la estética de tu moto.
Si en fotos ya gustaba, en directo antes de subirte a ella emociona todavía más. Como decimos, hay cierto aire clásico que combina a la perfección con las ópticas LED, por ejemplo.
El origen italiano del diseño vuelve una vez más a ser definitivo para acertar a la primera, pero sin duda el énfasis en la modernidad como proyecto de futuro de este modelo y su marca ha sido todo un acierto.
El motor V100
Si ya nos encantó por un funcionamiento agradable y plenamente identificado con su clásico carácter, en esta trail no lo es menos.
Con el efecto rebote en golpes de gas muy contenido respecto a las mecánicas precedentes, la dulzura y progresividad en su rendimiento se tornan como la tónica dominante.
Cómo no, llama también la atención el giro de los cilindros hacia abajo, encontrando ahora los colectores de escape por debajo y no hacia delante como era costumbre.
Interfaz electrónica
Si bien es cierto que la Moto Guzzi Stelvio no ofrece tanta electrónica como las grandes pesos pesados maxitrail puntales del sector, la italiana se siente satisfecha con lo aportado.
Algo que, como decimos, no solo se ve en el precio, sino también en una interfaz sencilla a la que puedes acceder de manera muy directa a través de los controles establecidos.
No tendrás que volverte loco para navegar entre las opciones disponibles porque es tan fácil como pulsar cualquiera de los cuatro indicadores para entrar, seleccionar, confirmar y salir.
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