Kawasaki Z H2: La primera de una nueva saga
Sin referencia de cilindrada, como es norma en la saga propulsada con turbocompresor H2, nace la Kawasaki Z H2, la primera naked con esta tecnología de la marca "verde".
La presentación de la serie H2 en 2015 con la primera Ninja H2 (y su versión para circuitos H2 R) sirvió de lanzadera de los modelos más exclusivos en el futuro de la marca japonesa. El desarrollo de propulsores sobrealimentados es una solución que todavía no ha sido seguida por ninguno de sus contendientes hasta 2019. Ahora se profundiza en esta gama con el lanzamiento de la primera edición naked denominada Kawasaki Z H2.
El empleo de esta tecnología no hace referencia solo a unas cifras de potencia extraordinarias (que lo son, con 200 CV de potencia máxima declaradas ¡para una moto naked!), sino que incrementa la respuesta en medios y bajos, además de contener el consumo medio. No obstante, es paradójico que Kawasaki siga apostando por las cilindradas superiores para esta tecnología, cuando parecía estar destinada a versiones medias en las que optimizar su rendimiento sin incrementos de peso y volúmenes.
La nueva Kawasaki Z H2 se presenta así como la nueva estrella del firmamento Z de la marca, abriendo un nuevo capítulo en una serie que nació con la Z1 en 1972. Para demostrar su privilegio como modelo especial en la gama Kawasaki, incluye el emblema River Mask que la KHI (Kawasaki Heavy Industries) reserva a sus productos de superior excelencia. A la edición estándar se añade una variante SE dotada de suspensiones electrónicas como es norma en las Kawasaki con este apellido.
El diseño es pura agresividad, en órbita con lo presente en las gamas Z y H2 de última generación, lo que en Kawasaki denominan Sugomi, pero elevado al máximo exponente. Esta imagen va plenamente acorde con sus prestaciones exorbitantes. Debido a la posición lateral del sistema de sobrealimentación, el conducto de aire es asimétrico hacia este lado izquierdo.
La primera Kawasaki Z con motor turbo H2
Junto con la adaptación del motor turbo desarrollado en el resto de la gama H2, la nueva Kawasaki Z H2 equipa un embrague asistido y antibloqueo. El escape pierde su cámara interior, espacio que permite un catalizador de mayor tamaño que optimiza la respuesta a medio y bajo régimen y permite superar ya la normativa Euro 5. No obstante, el máximo protagonismo lo recibe su turbina de 69 mm de diámetro. Consta de 12 filos y está fabricado a partir de un bloque de aluminio forjado mediante un mecanismo de cinco ejes.
El sistema de admisión está preparado para soportar hasta 2 bares de presión y, como en los otros modelos Kawasaki H2, no requiere la presencia de un «intercooler», compartiendo el circuito de aceite todo el sistema, lo que se traduce en una reducción de peso y espacio. Para canalizar aire, un conducto Ram-Air se diseña con un tamaño tres veces superior al de la cámara de admisión del motor. Además, en su interior se encuentra el filtro de aire. Hay que destacar que para el diseño del conducto de admisión se ha tenido en cuenta el sonido emitido por el efecto de succión de aire característico en un modelo turbo.
Su acelerador electrónico permite al adecuación de todo el arsenal electrónico presente en los modelos Kawasaki más sobresalientes. No se deja nada en el tintero, con control de tracción KTRC (Kawasaki Traction Control), tres «mapping» de motor (Full, Middle -75% del total- y Low -50%-), cuatro modos de respuesta (Sport, Road, Rain y uno personalizable Rider para controlar el control de tracción y la respuesta del motor, además de las suspensiones en la edición SE), sistema KCMF (Kawasaki Cornering Management Function) para gestionar tanto la tracción y como el ABS KIBS (Kawasaki Intelligent Anti-Lock Brake System), válido en curvas gracias a una centralita inercial IMU firmada por Bosch (de 40 gr de peso), cambio semiautomático bidireccional KQS (Kawasaki Quick Shifter), control de salidas LKCM (Kawasaki Launch Control Mode) que se desactiva en tercera o cuando se alcanzan los 150 km/h, y control de crucero.
Parte ciclo de última generación en la Kawasaki Z H2
También para el chasis se recurre a la solución presente en la serie H2 y que se ha extendido por otras gamas del catálogo Kawasaki, como la familia Z 900-650-400 o sus variantes Ninja. Este esquema multitubular de acero contrasta con el doble viga de aluminio de la Z 1000 anterior, un cambio radical en la historia reciente de la marca.
El basculante de doble brazo de aluminio hereda la tecnología presente en la Kawasaki ZX-10 R campeona del mundo de SBK. Queda anclado a la parte trasera del motor mediante una placa en la que se inserta su pivote, con lo que se obtiene el mismo efecto que un basculante anclado directamente al motor. Esta placa hace a la vez la función de parte trasversal del chasis, lo que contribuye a aumentar la rigidez y a reducir su peso. En cuanto a la posición del motor, se sitúa con un ángulo de inclinación especialmente diseñado para optimizar el centro de gravedad y aportar una mejor manejabilidad.
El apartado suspensiones es obra de Showa, con una horquilla invertida SFF-BP multirregulable, al igual que el monoamortiguador, dotado de progresividad con bieletas Uni-Track. Los frenos delanteros son obra de Brembo, con pinzas frontales monobloque M4.32, mientras que detrás se echa mano de unidades Nissin.
Kawasaki Z H2: equipamiento de vanguardia
En cuanto a su equipamiento, todo el conjunto de ópticas está formado por LED, mientras que su instrumentación se beneficia de una pantalla TFT LCD en color. Ofrece información de velocímetro, indicador de marcha engranda, indicador para subir marchas, odómetro, doble parcial, totalizador, nivel de combustible, consumo instantáneo y medio, temperatura exterior, del agua, reloj, indicador de conducción ECO, indicador IMU, indicador KIBS y presión más temperatura del turbo. Además, gracias a la app «Rideology«, permite utilizar el teléfono móvil como soporte de multitud de información, incluyendo GPS.
