Hasta 12.000 euros de multa por falsificar la pegatina de la ITV

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Hasta 12.000 euros de multa por falsificar la pegatina de la ITV
Nicolás Merino
Nicolás Merino

Como se recoge en el Reglamento General de Circulación, no llevar la ITV en regla se salda con una multa que puede ir de los 100 a los 500 euros. Sin embargo, manipular la pegatina se considera falsedad documental y la sanción asciende a cuantías de entre 6.000 y 12.000 euros.


Ya te hemos hablado de la multa por no llevar en regla la Inspección Técnica de Vehículos (ITV). De acuerdo al Reglamento General de Circulación (RGC), la multa puede ser de 100 hasta 500 euros en función del tiempo que haya pasado desde que ha caducado. Pero en el caso que os vamos a contar se ha ido un paso más allá: manipulación de la pegatina de la ITV. ¿Qué sucede si hacemos esto?

Como seguramente ya sabrás, dicho distintivo es un documento oficial, de modo que cualquier tipo de manipulación y/o falsificación es considerado delito. Según recoge el Código Penal, la falsedad documental conlleva penas de prisión de entre tres y seis meses, y multas que van desde los 6.000 hasta los 12.000 euros. Asimismo, desde mediados de 2020, el Tribunal Supremo especificó que poner la pegatina de la ITV en un vehículo que no la hubiera superado o que la tuviera caducada se tipificaría como delito de uso de certificación falsa.

foto moto ITV

Esto sale a colación de una condena en la que un usuario, que llevaba una pegatina falsa con fecha de validez de septiembre de 2019, pero cuyo vehículo llevaba sin ITV desde mayo de 2016, fue multado con 720 euros. Como recoge la sentencia de un Juzgado de Jerez de la Frontera y que posteriormente fue ratificado por la Audiencia Provincial de Cádiz y el Supremo, «el acusado, con un fin falsario y con el objeto de no ser sancionado por tener la ITV caducada, haciendo uso de un documento auténtico sin ser su legítimo titular procedió a pegar en su vehículo la pegatina sin corresponder a su coche».

Para su defensa, el acusado recurrió al Supremo alegando que sus acciones no constituían delito, ya que la pegatina (falsa) no era un documento oficial ni una certificación que justificase la aplicación del Código Penal. Sin embargo, el Supremo se ampara en haber cometido un delito de falsedad documental por haber sustituido el sello oficial de la ITV por otro falso. De modo que el acusado se enfrenta a penas de entre tres y seis meses de prisión y multas que van desde los 6.000 hasta los 12.000 euros.