Prueba Peugeot Pulsion GT 125: Lo bueno por conocer
Es curioso que un scooter así no haya tenido mayor éxito todavía en nuestro mercado. Peugeot es una de las marcas grandes, desde luego. Pero a lo largo de su historia reciente ha tenido algunos sube y baja en sus ventas. El anterior GT de 125 de la marca, el Satelis, fue bastante popular. Se vendió bien en casi todas sus cilindradas, pero su sucesor -que, como es habitual, es mejor en casi todo- no lo ha conseguido.
Pero lo cierto es que el Pulsion es un gran scooter. Cada vez que lo pruebas convence más y está claro que es uno de los mejores GT de la actualidad. Está disponible con tres niveles de equipamiento (Active, GT y Allure) y posee uno de los motores más rápidos de la categoría, en una carrocería bien pensada. No es la más grande, aunque sí muy acertada, capaz de conjugar suficiente espacio de carga con un tamaño exterior compacto, que le da mejor sensación de manejabilidad, con una parte ciclo de gran comportamiento.
Se ha dicho en ocasiones que quizá el problema viene de un precio elevado, pero lo cierto es que no: si lo comparas con otros scooter equivalentes por prestaciones, la gama Pulsion arranca en 4.660 €; un Yamaha XMax, un Honda Forza o un SYM de este segmento pasan de los 5.000 € y no todos ellos andan como este Peugeot. Parte del problema es ese ‘boca a boca’ que en este mundillo suele ser básico: si las ventas no acaban de arrancar, no hay scooters en la calle. Entonces no lo ves, no lo conoces y, por tanto, no vas a interesarte por él.
En cualquier caso, es un scooter que, como te decía, merece la pena conocer. Es divertido de llevar, cómodo y efectivo. Tiene un nivel de equipamiento realmente llamativo, con algunas soluciones únicas y muy válidas. Y viene respaldado, insisto, por una de las grandes marcas europeas especialistas en este tipo de scooters: Peugeot Motocycles (sin la «r» central; en francés, no en inglés) ha vuelto a su nombre original después de varios años de haber utilizado el de Peugeot Scooters.
Cómo es el Peugeot Pulsion
El Pulsion fue presentado hace seis meses. No es, como puede parecer, un relanzamiento y poco más: Peugeot ha aprovechado para hacer un rediseño completo del vehículo, aprovechando la necesidad de convertirlo en Euro 5. Quizá es demasiado parecido, en su carrocería al anterior, pero lo cierto es que ni era ni es un scooter poco atractivo: unas líneas acertadas, con cierto estilo sport, que se acentúan en esta versión GT que probamos, con manillar sin tapar y esos mínimos gráficos en amarillo sobre una carrocería oscura.
Como siempre en la marca, se ha buscado la familiaridad estética con los coches de la marca, en este caso con los famosos «colmillos» que tanto promocionan en la publicidad de los coches en los lados de los faros.
El chasis es nuevo: se ha trabajado en una estructura más rígida, con nueva unión al motor. Sigue siendo un chasis en tubo de acero bastante estándar, en el que se ha matado una horquilla de 37 mm de diámetro y dos amortiguadores traseros regulables en precarga. Equipa llantas de 14″ detrás y 13″ delante, una acertada combinación que proporciona gran estabilidad a alta velocidad a la vez que aumenta la agilidad.
Los frenos, algo siempre especial en Peugeot (les encanta experimentar con sistemas diferentes) son dos discos, de 260 mm delante y 210 mm detrás, con ABS de serie y un sistema combinado (que aquí se llama SBC) muy bien equilibrado: puedes frenar sólo con la maneta izquierda y tienes buen tacto y potencia, puedes utilizar las dos manetas y no pierdes tacto.
El motor es nuevo por completo (salvo en el nombre, Powermotion), en sustitución del anterior que venía de los derivados del Rotax y que se montó en infinidad de scooters de varias marcas. Para su diseño se ha partido del dos válvulas que se montó en el Bellville. El resultado es un motor moderno, refrigerado por agua con el tan de moda radiador lateral -que consigue menor peso y rozamientos-, cilindro de carrera larga y nueva culata de cuatro válvulas. Es más compacto y ligero, con 4 kilos menos, y alcanza 14,4 CV a 8.800 rpm y 12,4 Nm a 6.900 rpm.
El Pulsion, como es también norma en los scooters GT de la casa, tiene un elevado nivel de equipamiento: iluminación LED, llave de proximidad, apertura eléctrica del asiento, y una pantalla central TFT, verdadera estrella de este capítulo. Conectas el móvil y con la app de la marca pues incluso mandar datos de navegación giro a giro al centro de la pantalla. A nivel de carga, destacar una guantera lateral, y el hueco bajo el asiento donde cabe un integral y un casco semi-jet.
Llama la atención el sistema empleado para no arrancar con la pata de cabra extendida: el motor arranca y la pata no se pliega sola, que son las dos soluciones más típicas. El Peugeot -y esto ya lo hacían los anteriores- se queda al ralentí y no permite acelerar: cuando lo intentas ratea y no se mueve, permitiéndote así mantenerlo al ralentí, en marcha, calentándose, sin riesgo de que se caiga. La mejor solución de las tres.
Cómo va el Peugeot Pulsion
Me gusta este nuevo Pulsion. Me gustaba el anterior y está claro que el nuevo motor está muy bien hecho y vuelve a demostrar que Peugeot es uno de los grandes. Me gusta especialmente ese juego de tamaños que han encontrado en su diseño: es un GT sin duda alguna, pero no es enorme. En la parte negativa, no caben dos cascos integrales bajo el asiento, algo que para algunos será básico. Pero yo cambio esa capacidad enorme por la posibilidad de sentir mayor agilidad en la ciudad.
No es alto de asiento, aunque sí es algo ancho, y con 1,65 metros llego justo al suelo. Una vez acoplado es muy cómodo, con una plataforma amplia y un manillar cómodo, de buenas dimensiones y posición. Llama la atención el cuadro: la pantalla digital tiene buena visibilidad y su conectividad es todo un plus. Los dos relojes principales, una vez más, quieren recordar, en sus formas y gráficos a los Peugeot de cuatro ruedas y tienen una curiosidad: el velocímetro, a tu izquierda, gira a derechas, mientras el cuentavueltas lo hace en el sentido contrario.
En marcha se aprecia esa ventaja de una mayor agilidad. El nuevo motor es rápido y de buena respuesta, además de ser muy suave en cuanto a sonido o vibraciones de funcionamiento. Y acelera muy bien. Viene equipado con neumáticos Michelin City Grip y las suspensiones, sin perder el calificativo de cómodas, son firmes, lo que permite una conducción tan decidida como quieras: transmite muy bien el agarre a tus manos. Los frenos también trabajan bien: el sistema SBC (Synchro Braking Concept) hace que con sólo la maneta izquierda actúes sobre los dos frenos.
Si quieres frenar ‘como se debe’ (primero maneta izquierda, luego derecha) no tienes esas molestas variaciones en el tacto que presentan otros sistemas combinados. Vale, es cierto que acabas con sensación de que da igual: sólo tirando muy fuerte de la maneta derecha notas mayor presión de freno delante. Además, equipa un sistema de frenada de emergencia: si detecta una frenada muy fuerte enciende los cuatro intermitentes para avisar a los que vienen detrás.
En carretera el Pulsion demuestra sus posibilidades. Es divertido de llevar como cualquier scooter que sea rápido, que se agarra y frena bien. Es muy ágil cambiando deprisa de dirección y te permite conducir echado hacia delante o sentado hacia atrás cómodamente. En prestaciones llegas a ver los 120 km/h en el marcador llaneando justo en el momento que alcanza el corte de encendido, lo que significa que aprovecha hasta la última gota de los 14,4 CV gracias a un desarrollo de transmisión muy bien calculado.
Por supuesto, en autovía también aprovecha esa posibilidad para ser uno de los 125 que mejor se desenvuelve. Además, la cúpula delantera, por si no te lo había dicho, puedes colocarla en dos posiciones, eso sí, con herramientas.
Lo mejor:
-Prestaciones destacadas
-Comportamiento sano en cualquier conducción
-Equipamiento destacado
Mejoraría con:
-Forma del asiento
-Hueco bajo el asiento algo justo
ASÍ LA VEMOS (De 1 a 5 puntos)
En carretera: 5
En ciudad: 4
Pasajero: 3
Confort: 4
Equipamiento: 4
Autovía: 4
Peugeot sabe lo que se hace cuando plantea un nuevo scooter. Hay experiencia y medios para ello, además de un conocimiento «de primera» de lo que el conductor europeo de scooters busca en un 125. Y se nota. Un scooter que sigue las últimas tendencias reduciendo su tamaño exterior, manteniendo la comodidad, aumentando el equipamiento con las últimas novedades, para ofrecer un 125 rápido y divertido en la carretera, ágil y útil en la ciudad y suficiente en cuanto a motor, a la vez que cómodo en la autovía. Un scooter agradable en todos los aspectos, para disfrutar también a duo: suficiente sitio y con estriberas y asas en su sitio.
Más información del Peugeot Pulsion 125 GT
