Aprilia Sport City One 50/125
El modelo más deportivo de los rueda alta de Aprilia tiene ahora dos versiones que, a su vez , muestran dos intenciones diametralmente diferentes. Por un lado está el nuevo Sportcity One que se ofrece en 50 (en principio con motor 4T, aunque a final de año llegará la versión 2T) y 125 cc.
Lo podemos considerar rueda alta porque, a pesar de que las llantas son de 14», monta neumáticos de perfil bajo, y eso en un scooter pequeño le da un aspecto muy de rueda alta; también se podría llamar rueda media. Es un scooter ligero y ciudadano, con reminiscencias al Sportcity en su estructura y, sobre todo, en la forma de las ópticas.
La novedad reside en su planteamiento de scooter económico en el que se ha prescindido de ciertos lujos como el disco trasero o una instrumentación digital para ajustar al máximo su precio. Por otro lado, está el Cube, un restyling del antiguo -y primer- Sportcity en tres cilindradas 125, 200 y 300 cc. Se mantiene el chasis, las geometrías, parte ciclo y las dos primeras motorizaciones con el Leader 125 y 200 cc, por lo que las novedades residen en la estética, la instrumentación y el motor del más potente, que no es otro que el que estrenaba el mes pasado la Vespa GTS Super, el nuevo Quasar 300.
Los cambios más visibles están en el frontal con una nueva parrilla y la carcasa superior remodelada; en los laterales, luce nuevo logo y diferentes tapas al igual que el portabultos trasero, que es nuevo. Las tulipas de las ópticas traseras ahora son blancas.
Tanto uno como otro llegan a España para hacerse hueco en un mercado no demasiado a favor de la rueda alta (excepto en Barcelona) e intentar triunfar como lo hacen en Italia. De hecho fue allí, concretamente en Milán, donde los probamos bajo una intensa lluvia. Vaya primavera…
ONE 50/125
Lo mejorManiobrabilidad. Es ligero y muy fácil de maniobrar en parado y entre coches.
Suelo plano. Cómodo para colocar los pies y transportar bolsas.
Precio. Aunque no tenemos el oficial, no superará los 1.600 euros el 50 y los 1.800 el 125.
Mejoraría con…Más potencia el 50. Tiene muy poca aceleración y escasa punta.
Instrumentación más completa. Por lo menos un parcial y un reloj horario.
Disco detrás. El tambor no va mal, pero no tiene el tacto de un disco.
Hueco más grande. Para guardar al menos un integral.
Sportcity One en marcha
Movilidad a pequeña escala
Escatimar en costes no sólo repercute en el bolsillo del comprador, también se deja notar en varios aspectos de la conducción. Empiezo con el 50. El motor tiene muy poca aceleración y una salida desde parado muy pobre. Además es difícil que pase de 50 km/hincluso cuesta abajo. La habitabilidad para el conductor es buena siempre que no midas más de 1’80.
De lo contrario, tus rodillas tocarán en el contraescudo. Lo bueno es que se trata de un scooter estrecho, ágil, muy manejable y ratonero, con un ángulo de giro que le permite callejear a sus anchas entre coches. Lo mismo ocurre con la versión de «octavo de litro«, ya que comparten el 100% de los componentes excepto el motor que, aunque no demasiado potente (10,8 CV declarados), sí es válido para moverte con más fluidez y a unas velocidades más razonables que con el 50.
Las ruedas de 14» ofrecen estabilidad y buen paso por curva, aunque posiblemente debido al lanzamiento de la horquilla la dirección en ocasiones provoca algún extraño. Un apunte más, el asiento es corto y no queda mucho espacio para llevar acompañante.
Sportcity One
Frontal. El doble faro con grandes ópticas se encaja en un pequeño escudo acabado en pico. El manillar está desprovisto de parabrisas, un elemento que tampoco se echa en falta puesto que no se alcanzan velocidades altas.
Tren delantero. Como se observa, la horquilla cuenta con un lanzamiento considerable. Sus barras tienen 32 mm y un recorrido de 85 mm. El disco tiene un diámetro de 220 mm con una pinza flotante de dos pistones.
Motor. El Sportcity One 50 monta un motor 4T, aunque se espera que a final de año salga la versión 2T. El One 125 monta un motor Piaggio de dos válvulas y refrigeración de aire que desarrolla una potencia de 10,84 CV a 8.000 rpm.
Frontal.
El doble faro con grandes ópticas se encaja en un pequeño escudo acabado en pico. El manillar está desprovisto de parabrisas, un elemento que tampoco se echa en falta puesto que no se alcanzan velocidades altas.
Tren delantero.
Como se observa, la horquilla cuenta con un lanzamiento considerable. Sus barras tienen 32 mm y un recorrido de 85 mm. El disco tiene un diámetro de 220 mm con una pinza flotante de dos pistones.
Motor.
El Sportcity One 50 monta un motor 4T, aunque se espera que a final de año salga la versión 2T. El One 125 monta un motor Piaggio de dos válvulas y refrigeración de aire que desarrolla una potencia de10,84 CV a 8.000 rpm.
Bajo el asiento. El hueco sólo acepta un casco jet. Al lado se encuentra la batería y el tapón de gasolina. El asiento se abre a través de una cerradura que tiene en el lateral izquierdo. Justo detrás, hay una estructura metálica que sirve de asidera para el acompañante.
Cuadro de mandos.
Muy austero y completamente analógico. Sólo cuenta con dos relojes de agujas, velocímetro y nivel de gasolina, un cuentakilómetros total y tres testigos luminosos. Se echa de menos un pequeño reloj horario digital.
Contraescudo. Tiene guantera, pequeña y sin cerradura, pero capaz de albergar pequeños objetos como los de la foto. Cuenta, además, con gancho para colgar bolsas.
Detrás. El monoamortiguador Ollé ha endurecido el hidráulico. En la foto se ve la cerradura para abrir el asiento y debajo hay un hueco para guardar la documentación.
Datos oficiales
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