Presentación dinámica Gama Moto Guzzi 2017

Desde las V7 Stone, inicio de la gama de V2 italianas hasta la impresionante MGX-21 «Flying Fortress», ha sido una oportunidad ideal de comprobar las mejoras introducidas en estas motos en los últimos tiempos.

Una ruta de más de 200 kilómetros, desde Alcobendas a Navacerrada y, de ahí, a Torrecaballeros por Navafría y vuelta por las famosas curvas de «las siete revueltas», bajando otra vez desde Navacerrada a Colmenar Viejo; una ruta clásica para montar en moto por Madrid, con tramos con curvas y buen asfalto, otros tramos con bastante suciedad y algún pequeño tramo de autovía, por lo que hemos tenido oportunidad de probar toda la gama en diferentes condiciones.

Las motos disponibles eran las V7 Stone y Special, esta última con kit de limitación A2 a 47 CV y la espectacular V7 Racer. En la gama V9 había unidades de las dos versiones, Bobber y Roamer y de las grandes 1400, además de la espectacular MGX-21, una Audace y una California. Las V7 III presentadas en el salón de Milán son motos completamente nuevas. Tras su reaparición a principios de esta década las V7 se convirtieron en la opción «neo-retro» de la marca, siendo una de las motos de esta categoría más «auténticas» del mercado: su sonido, su comportamiento, su personalidad, desde luego, te llevaban mentalmente a motos de otras épocas. Las V7 III emplean un nuevo motor, con nuevo cigüeñal nuevos cilindros, pistones y culatas y retoques por toda la moto, esta tercera generación es, con seguridad la más «fina» de las Guzzi. Una moto de 52 CV, de tamaño medio, con buen par y respuesta, que mantiene gran parte de esa «personalidad Guzzi», pero con gran suavidad de marcha, mayor capacidad de subir de vueltas que antes (sin tener en ningún caso, ni en la Racer) demasiada intención deportiva.

Las V9 Bobber y Roamer fueron la última incorporación al catálogo, con permiso de las V7 III, derivadas de las anteriores V7. Partiendo del motor V7, con el que comparten algunos elementos, con 853 cc reales, 3 caballos más que las V7 y algo más de par, presentan una estética mucho más particular; diseñadas al gusto «custom», sin perder la esencia del motor V2 que caracteriza a las Guzzi, para este año se han retocado asientos y estriberas, de forma que solventan los problemas de toques de rodillas en el bloque que las primeras versiones presentaban, como te contábamos en las pruebas que en su día hicimos con ellas: V9 Bobber y V9 Roamer.

De las 1400 teníamos disponibles la custom Audace, que también probamos no hace mucho tiempo, una moto que sorprende por sus capacidades dinámicas a pesar de su tamaño y peso y la más «cruiser» California, una moto que también podría pertenece sin mayores problemas a esa parte neo-retro del catálogo. Dos motos que comparten mecánica, con el motor 1400, con un buen nivel tecnológico, con control de tracción y modos de conducción seleccionables. Y por supuesto, la espectacular MGX-21; una moto diseñada en el centro de diseño que la marca mantiene en California, al gusto americano y mas pensada para recorrer las grandes rectas norteamericanas que las «paellas» de la sierra de Madrid. Por supuesto, esta también la hemos probado aquí.