Benelli Leoncino: El león impone su ley
Las Benelli Leoncino son motos que persiguen eludir lo convencional. El diseño de sus líneas marca las diferencias. Todas y cada una de ellas muestran al pequeño león situado en el frontal de la aleta anterior, como signo inequívoco no solo de su fuerza, sino también de la astucia desarrollada en sus capacidades para enfrentarse a todo.
Ese es el verdadero carácter de la familia Leoncino, donde encontramos a la pequeña Benelli Leoncino 125 equipada con un pequeño y aguerrido motor monocilíndrico, apta para ser conducida con carnet de coche. Un peldaño por encima se sitúa la Benelli Leoncino 250, con capacidad para desarrollar mayor potencia a pleno pulmón mediante sus 26 CV.
Mientras tanto, las más potentes Benelli Leoncino 500 y Benelli Leoncino 800 muestran orgullosas sus motores bicilíndricos de 48 CV y 82 CV respectivamente, disponiendo además de versiones limitables para el carnet A2.
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Benelli Leoncino: por asfalto y tierra
Como buena scrambler, la Benelli Leoncino se atreve a rodar tanto por carretera como por campo, pero si además buscas una especialización con detalles específicos que marquen su carácter “on” y “off”, lo encontrarás en la división entre la Benelli Leoncino 800 y Benelli Leoncino 800 Trail, una división que también se ofrece en las versiones twin de 500 cc.
Así, Benelli adapta las capacidades del león al terreno por el que pisa. La Leoncino 800 dispone de un juego de llantas preparadas para una conducción tanto asfáltica como campera, con múltiples radios cruzados y 17” de diámetro. Las gruesas barras de 50 mm que componen la horquilla invertida se muestran en un atractivo color dorado, mientras que en la trail encontramos el mismo equipo de suspensiones, pero con mayor recorrido y asistiendo a llantas de diferentes medidas, siendo en su caso la delantera de 19 pulgadas, más acorde con un pilotaje de aventura.
Ya sea por asfalto o rodando por caminos de tierra, la frenada se encuentra garantizada por una pareja de discos de gran diámetro, mordidos por pizas de anclaje radial que comparten ambas versiones, mientras que la disposición elevada con salida por el lateral derecho del silenciador de la Trail nos da pistas de no querer arrugarse ante anda, acompañado además por un manillar también más elevado respecto a la Leoncino 800.
La instrumentación mediante display TFT con llave de contacto abatible tipo “navaja” y la iluminación completa mediante LED, inspira a los amantes de la corriente scrambler, ya sea asfáltica o dual “on-off” para aquellos que se sienten atraídos por la aventura, allá donde pueda desarrollarse.
