La Benda Napoleon Bob 500 reinterpreta el segmento de la moto custom para el carnet A2
La Benda Napoleon Bob 500 no solo ha sorprendido a los usuarios pertrechos del carnet A2, sino que al tiempo ha traído una brizna de aire fresco a un segmento donde custom y criser parecen querer dar una imagen convergente en el ideario “long&low”.
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Pero esta creación china va más allá de clásicos identitarios, ofreciendo una estética que se desmarca de lo convencional a través de líneas atrevidas y propuestas que no dejan indiferente, incluso a aquellos cuyo interés motociclista se concentra en otros segmentos.
Esta “quinientos” es capaz de todo ello sin ofrecerse a un precio prohibitivo, lo que redunda todavía más en su carácter de moto diferente, muy personal, pero también cercana a cualquier tipo de usuario por múltiples razones.
Benda Napoleon Bob 500: el poder del atrevimiento
Podría decirse que esta moto custom para el carnet A2 se ha adueñado del atrevimiento para comercializar un producto que llame la atención de entrada… ¡Y a buena fe que lo consigue!
Parte de la suerte de una moto custom, siempre que pretenda seguir los cánones que han conseguido de ellas ser modelos transgresores y muy peculiares, pasa por ser animada por un motor V-twin. En su caso, encontramos una unidad motriz que cumple con dicha arquitectura para situarse en el límite de lo permitido por ley para usuarios con carnet limitado a 35 kW.
Y enraizado con un V-twin queda la transmisión final que, al ser por correa dentada, nos recuerda a las motos más míticas del clásico imaginario norteamericano, lo que aporta un extra a la vitola de moto custom de eternas raíces, pero con intención de desmoronar los muros que le impidan continuar hacia delante para ofrecer nuevas y cada vez más atractivas propuestas.
Un ejemplo de los muchos que encontramos sobre ello queda localizado en la horquilla invertida, que simula una estructura rígida de paralelogramos cubriendo las barras, para dar el beneficio de la duda a todo aquel que se quede mirando a su estructura frontal… ante su asombro. El conjunto de ópticas LED y un manillar elevado y ligeramente cerrado de puntas, aporta su grano de arena en la apuesta por una estética claramente singular.
En línea hacia atrás encontramos un depósito de formas redondeadas y 16 litros de capacidad, lo que otorga una autonomía más que suficiente incluso para salir a carretera sin necesidad de repostar con frecuencia. Por su parte, el asiento, libre en su zona inferior, parece querer situar al piloto “en volandas”, ofreciendo un aspecto limpio y libre de anclajes o cualquier tipo de nexo de unión a la moto.
Un dibujo de trazos libres que dan como resultado, en la zaga, con un final slim desprovisto de espacio para el pasajero, donde el piloto es el protagonista junto con el V-twin y los neumáticos de enorme grosor, montados sobre atractivas llantas de aluminio doradas en 16 pulgadas, lo que acrecienta la sensación de “minimalismo explosivo”.
Divertida, diferente… y cercana
Benda ha pretendido irrumpir en el mercado de la moto custom no solo con un producto muy singular, sino también con un precio que no esté acorde con la exclusividad, sino con la cercanía para que llegue a cualquier tipo de usuario que se sienta atraído, en un inicio, por su mera presencia.
Así nos encontramos a la Benda Napoleon Bob 500 por un precio de venta al público de 6.490 euros, donde se incluye una garantía oficial de nada menos que 5 años. De este modo, diseño, espectacularidad y confianza pretenden ir de la mano en un producto de nueva factura que, de entrada, busca capar al usuario a través de iniciativas como esta.
¿Lo conseguirá? Motivos no le faltan precisamente a esta peculiar custom de nueva generación, recordemos, apta para el carnet A2.