Yugo: Scooter-Sharing en Barcelona
Me imagino que sabes lo que es el «car sharing», nueva «moda» de coches compartidos y alquilados por cortos espacios, básicamente en ciudad, del tipo Car2Go en Madrid o Bluemove en varias ciudades más. Que esta tendencia tenía que llegar a la moto, estaba claro. Cómo y cuándo ya no era tan fácil… hasta ahora. Yugo, en Barcelona, ya ha empezado su servicio.
Es lógico. Las nuevas tecnologías en comunicaciones permiten este tipo de nueva movilidad: puedo identificarme ante el coche que voy a coger, utilizarlo, soltarlo donde me venga bien y pagar solo por ese uso. En las masificadas ciudades actuales, donde tener tu propio coche supone numerosos costes, es una solución muy adecuada. Pero lo cierto es que el coche, a pesar de tratarse de uno pequeño (como los que usa Car2Go), no es el vehículo ideal en la ciudad. En otras palabras, no es la solución a los problemas de movilidad.
El scooter sí lo es. Un scooter pequeño es un vehículo diseñado específicamente para moverte por la ciudad. Por tanto, un servicio de «scooter sharing» tiene, de por sí, ventajas sobre el de «car sharing». Pero también inconvenientes: robos, vandalismo o siniestralidad parecen los problemas que planearán sobre empresas que se embarquen en un servicio así.
Yugo: pioneros del scooter sharing en Barcelona
Yugo ha sido la primera iniciativa en España de este tipo. Comenzaron sus actividad hace unos meses en Barcelona, por lo que es posible que hayas visto ya sus scooter eléctricos, de estilo retro, pintados de verde y con una decoración llamativa por la Ciudad Condal. Y es tal y como lo puedes imaginar si te pones a pensar cómo hacerlo fácil. Con los scooter aparacados en la calle, con el móvil reservas el que te pilla más cerca. Entonces te identificas cuando llegas hasta él, coges el casco guardado en el cofre, sales andando y lo dejas donde te venga bien.
Los scooter son específicos. Su carrocería es la misma que, por ejemplo, un Colibrí Carolina, de estilo retro, pero en lugar de una mecánica de gasolina disponen de motor eléctrico y con homologación de ciclomotor. Yugo los adapta para que se enciendan desde el móvil, cuando te identificas y así puedas usarlo. Lógicamente, requiere que te des de alta en su sistema, algo que haces en internet o con la app que emplearás después para reservar, coger y dejar los scooter. Una característica esencial de estos modelos es que tiene baterías extraíbles, de forma que la gente de Yugo, cuando detecta desde su central que uno de ellos está bajo de carga, puede acercarse y cambiar la batería al instante.
Además de útil, es barato. Solo cuesta registrarse 29,90 €. Después, cuando lo coges, pagas 0,19 € el minuto de uso. Al final, con utilizaciones medias de poco más de 10 minutos (1,9 €) sale más barato que otros medios de transporte, considerando además la comodidad de dejarlo donde quieras.
En un futuro, Yugo quiere exportar su sistema a otras ciudades españolas, ya que está funcionando hasta mejor de lo que esperaban. Incluso esos miedos a robos y demás están quedando en un segundo plano. En estos meses, solo un intento y un accidente menor hacen que sea una experiencia más positiva de lo imaginado. Otro plan de futuro es ofrecer mayor gama de vehículos, incluso algún scooter de mayor capacidad, 125cc o similar, para que puedes elegir, en función de tu carné o del uso que le quieras dar.