Maurizio Vitali, ángel de la guarda de Valentino Rossi

Si seguías el Mundial de Velocidad en su época como «Continental Circus» en la década de los ´80, es más que probable que recuerdes el nombre de Maurizio Vitali. Participó en las categorías de 125 y 250 cc, con más éxito en la inferior. Obtuvo dos victorias, en los GP de San Marino de 1983 (Misano) y 1984 (Mugello), aunque para el aficionado español se le recuerda como uno de los pilotos que más obligó a Ángel Nieto a esforzarse en sus últimos años en el Mundial.

Como ejemplo, en los tres primeros GP de 1984 Vitali consiguió la «pole position», pero las victorias fueron a manos del «12+1». Antológico fue el pique de ambos en la primera carrera del año, el GP de las Naciones disputado en Misano, cuando Nieto aflojó en la entrada en meta haciendo gestos al italiano como «a ver si eres capaz de acercarte». Rivalidades del pasado.

En el presente, Maurizio Vitali sigue siendo un integrante más del paddock, además, muy activo. De los 70 años de existencia de AGV, Vitali ha vivido los últimos 20. «No está nada mal, casi un tercio«, comenta con una sonrisa. Durante su carrera deportiva empleó cascos Caberg, Yes, pero, sobre todo, AGV. Actualmente, es uno de los responsables del AGV Racing Service integrado dentro de la estructura de la que Dainese dispone para investigación y desarrollo en MotoGP.

Es más que habitual verle al lado de Valentino Rossi en cada una de las sesiones de entrenamiento y momentos previos o posteriores de cada carrera, ya que supervisa personalmente, hasta el más mínimo detalle, todo lo relativo al casco del as italiano, formando parte de su entorno más cercano. Pero no solo está al cargo de él, sino del resto de pilotos AGV de la parrilla, como Joan Mir, Franco Morbidelli, Jack Miller, Andrea Iannone… No le falta trabajo.

Hemos tenido ocasión de departir con Maurizio Vitali en el camión de asistencia que AGV-Dainese traslada a cada GP. De carácter afable y amistoso, accede de buen grado a esta entrevista en la que nos descubre detalles que solo un actor de primera línea del Mundial es capaz de transmitir.

«Estuve en el Mundial entre 1979 y 1993, año en el que sufrí un accidente que me impidió seguir mi carrera como piloto. Durante los dos años siguientes permanecí fuera del ambiente de las motos. Entonces tuve la oportunidad de ayudar a otros corredores como asistente para AGV, ya que querían un piloto que fuera capaz de hablar sobre sus necesidades al mismo nivel. Comencé con Max Biaggi, solo los sábados y los domingos, y ahora me dedico plenamente a este trabajo. En cada GP asisto a dieciséis pilotos, todos los que portan cascos AGV en cualquier categoría del Mundial«.

«En un casco, todos sus elementos son esenciales. No se puede decir que la pantalla, las tomas de aire o la aerodinámica es más o menos importante que el resto de apartados. Un casco debe ser ligero, aerodinámico, debe tener una aireación interna óptima para evitar el vaho cuando llueve, y también está el aspecto del confort, porque el piloto debe encontrarse cómodo durante una carrera que dura unos 40 minutos. Sin olvidar, evidentemente, que sea, sobre todo, seguro«.

«Valentino Rossi es el piloto que siempre ha utilizado en primer lugar todos nuestros desarrollos de casco. Cuando hacemos un prototipo, lo empieza a probar Valentino, porque es un piloto muy preciso en sus explicaciones y muy inteligente sobre lo que se necesita. Todos sus datos son los que utilizamos para evolucionar cada casco. Esto conlleva mucho tiempo de trabajo, porque no todo siempre funciona a la primera, pero para nosotros es muy importante que él colabore con nosotros en este sentido«.

«Cada piloto emplea cada año un mínimo de cinco o seis cascos. Un piloto como Valentino, que es muy valiente, utiliza solo este mínimo de cascos. Lo que ocurre en su caso es que suele equipar versiones con decoraciones especiales para determinados GP, normalmente en Italia, en Mugello y en Misano, con unos tres cascos exclusivos en cada caso. Por eso, el total asciende por eso a unos catorce o quince cascos para Valentino«.

«Es difícil saber cómo serán los cascos del futuro, pero el último modelo AGV Pista GP R ha supuesto un paso adelante tan grande en diseño, tecnología, etc, que te diría que éste es el camino a seguir. Se trata de un casco pensado exclusivamente para las carreras, para los pilotos. En cualquier caso, dentro de dos o tres años veremos un nuevo desarrollo, un nuevo casco en el que el protagonista será la electrónica. Como te puedes imaginar, no te puedo contar más…«.

Después de la extensión generalizada de la electrónica en las motos y en el equipamiento, como demuestra el sistema Dainese D-Air, llega el momento de que también se introduzca en los cascos. Y la marca italiana será pionera.