El motociclismo femenino vive una auténtica edad de oro

Las instalaciones offroad de La Clua fueron el escenario perfecto para la realización de este Campus en el que se dieron cita 33 chicas de Motocross, Enduro y Trial. La gran fotografía con todas ellas es una muestra clara de que el motociclismo femenino está en auge y son muchas las chicas que han escogido este deporte tan apasionante. Tras el recibimiento del viernes, las inscritas descansaron para dos días intensos de entrenamiento tanto encima como debajo de la moto.

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Como siempre y gracias al trabajo de la Comisión Femenina, los monitores del Campus fueron experimentados y, sobre todo, con muchas ganas de transmitir a las chicas todo lo que saben sobre el motociclismo y sus propias experiencias. Adrià Sánchez Botella, que perteneció al equipo nacional de Enduro de la RFME, fue el de Enduro; Gabriela Seisdedos y Daniela Guillén las de Motocross y Berta Abellán y María Giró las de Trial.

Además, Míriam Cribillés no dudó en aceptar la propuesta de nuevo y fue la encargada de la preparación física. Martín Muñoz, mecánico de Daniela y Gabriela tanto en el nacional como en el Mundial de MXGP, aportó su experiencia en la materia y las ayudó en todo lo que necesitaron.

Los responsables de La Clua tuvieron el terreno en perfectas condiciones. Tanto el Circuito de MX como las cronos de Enduro estuvieron de diez. Algunas hasta cambiaron las motos y se atrevieron a probar otra disciplina que no era la suya. Y todo ello para certificar que el motociclismo femenino vive una auténtica edad de oro.