El nuevo reglamento para motos clásicas podría llegar en primavera
Tendremos que esperar un poco más para el nuevo reglamento de motos clásicas. Pese a que diversas informaciones indicaban que se haría efectivo en 2023, finalmente se irá para 2024. Si embargo, aún no hay una fecha concreta. La Real Federación Motociclista Española (RFME) revela que la aprobación del documento se iría para la primavera de 2024 tras confirmar con la Unidad de Normativa de la DGT que el proyecto del Reglamento de Vehículos Históricos prosigue su tramitación, una vez conformado el nuevo Gobierno.
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Así las cosas, tras la conformación del nuevo Gobierno, ya han sido informados todos los ministerios que tienen que ver con este nuevo reglamento de motos clásicas, en cuyo caso, se han valorado 11 informes y se han incorporado algunas modificaciones al texto original. También se ha informado sobre las observaciones no aceptadas, en algunos casos en colaboración con el Ministerio de Industria.
Cuándo estará listo el nuevo reglamento para motos clásicas
No hay confirmación oficial como tal, pero todo apunta a que estará listo para la próxima primavera. Ahora, el siguiente paso es que la Secretaría General Técnica del Ministerio del Interior remita el documento al Consejo de Estado para que éste emita su informe, para lo cual tiene 2 meses de plazo. Si todo transcurre conforme a lo previsto, en unos meses el proyecto debería quedar aprobado.
Como ya te contamos, las motocicletas clásicas ya matriculadas con su ITV al día, podrán clasificarse como históricas tan solo mediante el pago de una pequeña tasa.
Por su parte, las motocicletas y ciclomotores no matriculados seguirán un procedimiento simplificado respecto al actualmente en vigor. Además, la ITV periódica de las motocicletas históricas pasa a ser cada cuatro años y se suprime la obligatoriedad para las de fabricación anterior al año 50, así como para los ciclomotores históricos.
En resumen, la labor de aquellas personas que dispongan de motocicletas clásicas para mantener sus vehículos al día y en perfecto orden legal para su uso, encontrarán un problema menos para, en definitiva, mantener vivo el legado de nuestra historia, siendo así más sencilla su divulgación mediante unos procesos administrativos claramente más laxos y asequibles.