Menos accidentes mortales no sólo en España

Durante 2012, en España se registró un descenso del 20% en los accidentes mortales sufridos por motociclistas, con las mejores cifras desde hace 27 años. Esta tendencia también la encontramos en otros países de inmensa tradición motorista, como Gran Bretaña. En 2012, los británicos han visto reducir un 9% el número de accidentes mortales, el menor registro de toda su serie histórica.
 
Entre las causas que podemos añadir para esta conclusión estarían la mayor concienciación del colectivo motorista en todos los temas relativos a la seguridad (comportamiento durante la conducción, uso de equipamiento, etc) o la mejora en la red de carreteras, la evolución en los sistemas de seguridad de las motos, pero también el descenso en el uso de motos debido a la crisis, a pesar de que el parque de dos ruedas en nuestro país no cesa de incrementarse, con casi tres millones de unidades. No existen datos concretos de este menor uso. Por ejemplo, en Gran Bretaña se cifra en un 2% la reducción de kilometraje para las motos respecto a 2011 (a pesar de sufrir uno de los inviernos más crudos de los últimos tiempos), un dato que no podemos reflejar en el caso español. En general, en nuestro país se habla de un descenso del 4,5% en los desplazamientos totales de todo tipo de vehículos respecto al año anterior.
 
¿Es entonces la crisis el principal motivo de la reducción de accidentes de moto en España? Que la venta de motos nuevas haya disminuido drásticamente en los últimos años no ha implicado un descenso del parque total, mientras que el mayor uso de scooter en nuestras ciudades como alternativa más económica al empleo del coche suma desplazamientos precisamente como consecuencia de la actual coyuntura.
 
En el caso británico, la fotografía estándar del accidente mortal en moto nos muestra un varón entre 35 y 55 años con un modelo de más de 125 cc en carretera secundaria. Esta elevada edad media es una realidad que se está consolidando también en nuestro país, donde las mayores dificultades para acceder a los sucesivos carnés de moto A2 y A, junto con la difícil situación económica, están componiendo una realidad muy distinta a la de hace pocos años, cuando siempre se ha asociado motocicleta con juventud.