Aparcar la moto en el destino: el conductor opina

El simple hecho de llegar al destino y aparcar la moto cerca, ha sido una de las actividades que más ha motivado al conductor para utilizar este medio de transporte. Según el estudio mencionado, el conductor de moto opina que hoy día es bastante más fácil encontrar una plaza de aparcamiento específica al llegar a su destino. Una afirmación respaldada por el 57% de los encuestados.

Resulta interesante comprobar que esta cifra ha experimentado una subida de nada menos que el 52% respecto al pasado año 2021, lo que indica que cada vez son más habituales las zonas habilitadas para aparcar la moto en nuestras ciudades. Una reivindicación que no ha caído en saco roto, aunque a tenor de las circunstancias que encontramos día a día en las principales capitales de provincia, se muestra a todas luces insuficiente.

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¿Dónde aparcamos los motoristas?

De hecho, el estudio recoge otras cifras interesantes en este sentido que evidencian la insuficiencia de las medidas tomadas, en este caso, por los respectivos consistorios. El 62% de los encuestados afirma aparcar en la acera en caso de no encontrar plaza, lo que efectivamente confirma la imagen que tenemos ante nosotros a diario, viendo multitud de motos y scooters estacionados en zonas colindantes a los atestados aparcamientos específicos de moto.

Si bien son mayoría los conductores de moto que deciden aparcar sobre la acera ante la imposibilidad de hacerlo en una zona específica, confesándose el 51% de ellos conocedores de las normativas que les permite hacerlo o restringirlo según las circunstancias, existe un 22% que decide aparcar en plazas destinadas para coche, siempre en caso de no encontrar lugar en los aparcamientos destinados a tal fin. Mientras tanto, el 16% no ceja en el empeño y busca plaza en otro parking de moto cercano.

El estudio revela que es un 30% de los encuestados a los que les resulta complicado encontrar estas plazas específicas, lo que muestra una reducción de dicho grupo en un 34% respecto al año precedente. A pesar de ello, continúa siendo una cifra elevada de conductores que, si bien contribuyen a facilitar la movilidad urbana, les resulta complicado o incluso imposible encontrar espacio en los aparcamientos habilitados. Apenas el 13% no lo requiere y evita el conflicto al contar con parking privado, lo que puede llegar a significar un incremento en los costes por el alquiler o adquisición de la plaza utilizada.

Conocimiento de la normativa

De las cifras obtenidas se deduce que dos de cada tres motoristas es conocedor de las normas que le permiten o impiden aparcar en la acera al llegar a su destino, si bien el 24% de los encuestados indica que desconoce las limitaciones para hacerlo. Un hecho que pone en evidencia, una vez más, las dificultades del conductor de moto o scooter para hacer uso de su vehículo de movilidad personal no solo para su propio beneficio, sino también para el bien de la movilidad urbana en general.

Del mismo modo que el incremento de las plazas de aparcamiento específicas para moto son un hecho plenamente consolidado, sin embargo a día de hoy todavía resultan insuficientes para el volumen de vehículos que se desplazan por las principales capitales de provincias de nuestro país. Todo un toque de atención para las autoridades que, enfrascadas en la potenciación del transporte público, también necesario e imprescindible, sin embargo no reciben de buen grado, o al menos no se reflexiona de manera suficiente, acerca de otras alternativas cuyo impulso ya existe por sí mismo y «rueda» por sí solo.

Todo ello demuestra que la moto ha sido, es y seguirá siendo, una de las soluciones más viables y plausibles en aras de mejorar, en la medida de lo posible, una ya de por sí complicada movilidad urbana en las ciudades del siglo XXI.