El circuito de Jerez estrena nuevos pianos: ¿solución contra los ‘offtrack’de MotoGP?

Durante el mes de agosto, el circuito de Jerez-Ángel Nieto ha aprovechado el parón de competiciones para comenzar con ciertas remodelaciones que exige la Federación Internacional de Motociclismo (FIM) para seguir albergando carreras internacionales. Más concretamente, se han iniciado las obras para dejar los pianos del trazado conforme indican el reglamento de la FIM en esta materia.

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Así las cosas, muchos de los pianos externos del circuito de Jerez han tenido que ser modificados, aunque no todos. Las nuevas unidades, denominadas Misano 200, se han introducido en las curvas 1, 3, 4, 5, 6, 7, 9, 10, 11 y 12. Haciendo cuentas, los únicos que han permanecido intactos han sido los de las curvas 2, 8 y 13.

Estos nuevos pianos quieren acabar con uno de los grandes males en MotoGP: los offtrack. Como puedes ver en las imágenes, su parte más cercana a la pista es bastante plana, por lo que no conforma un riesgo para la seguridad de los pilotos. Sin embargo, si el piloto decide apurar el límite hasta la ‘zona verde’ la forma del piano se vuelve más dentada. Esto provoca que la moto experimente ciertos movimientos que obliguen al piloto a cortar gas.

La polémica se ha desatado por la forma final del piano. Según se extrae del reglamento FIM, el bordillo exterior tiene que tener una altura de 50 mm. Y a esto se suma un peralte negativo antes de llegar a la zona verde o ‘astroturf’. Esta misma inclinación negativa puede provocar pérdida de agarre y, unido a la altura de la parte final del piano, puede suponer un riesgo para el piloto.

Mucha gente está cargando contra estos pianos por su posible presunto peligro de cara a los pilotos. Se trata de la primera medida contundente contra las salida de pista intencionadas para ganar tiempo. Sólo el tiempo dirá si esta medida es efectiva, o por el contrario, supone un peligro. Este mismo año, el circuito de Losail, en Qatar, también estrenará alguno de estos pianos, por lo que podremos ver su efecto en los monoplazas de F1 a finales de año. Para MotoGP, todavía queda algo de tiempo.