Nos conocimos hace unos meses en el Algarve portugués. No se puede decir que aquello fuera un amor a primera vista o un flechazo, fue más bien un primer contacto cauteloso manteniendo las distancias, así, como mirándonos de reojillo.

Una historia de amor

Una historia de amor
Fórmula Moto


Y es que la idea que yo tenía hasta ese momento de las bávaras -la susodicha en cuestión proviene exactamente de Munich- es que eran rudas, frías y testarudas. Pero debe ser que lo paradisiaco del entorno nos ayudo a darnos ese primer achuchón -ejem, ejem-, y desde el principio, fue como la seda. En vez de ruda y tosca, era suave y delicada. En lugar de fría e insulsa, era cálida y apasionada como la mejor latina. Y eso de testaruda, nada de nada; se dejaba manejar con entrega y satisfacción ante todas mis voluntades sin la más mínima oposición. Después de ese día, lo tuve claro. Tengo que conseguirla como sea.

Vale, voy a ser bueno y a hablar más claramente, no vaya a ser que se os ponga la -mirada sucia- y los calores no os dejen seguir leyendo. Pero nada de lo que he dicho es mentira, lo único -y los más avispados ya os lo imaginaréis- es que no estoy hablando de una mujer, sino de una moto. De LA MOTO, la BMW S1000RR. Y ese lugar paradisiaco del Algarve, fue el circuito de Portimao. He de admitir que -conocer- a esta alemana, ha causado en mí un conflicto interno. Hasta ahora, mi corazón (motero) estaba prácticamente ocupado en su totalidad por las Ducati -de mis amores-, que tanto me han hecho sufrir, pero también disfrutar. Vale, sí, he tenido mis -rollitos de verano- con algunas otras (Aprilia, Honda, Suzuki-), pero hasta la llegada de la S1000 RR, lo tenía todo más o menos claro y controlado. Pero ahora todo ha cambiado, tengo el -corazón partío-. Y para que nadie se piense que es un farol, al final he removido Roma con Santiago para hacerme con una, ¡y lo he conseguido! De momento para hacerme algunas carreritas y matar el gusanillo ( por cierto, con bastante éxito por el momento puesto que gané la primera carrera con ella), y luego, ya veremos.

Una cosa que me hace gracia, es que cuando escribí la prueba de la S1000RR para Fórmula Moto allá por diciembre de 2009, es cierto, hablé maravillas de ella; pero ni más ni menos que lo que el cuerpo me pedía escribir. Hubo personas (y no se cuentan con los dedos de una mano), que me preguntaban cosas como -¿cuánto te ha pagado BMW por escribir esa prueba?-. En nuestra revista no nos casamos con nadie, y quiero pensar que en otras revistas tampoco es así. Y tampoco me han pagado por el on-board en Portimao que verás debajo de estas líneas, pero oye, si algún jefecillo de BMW lee esto, me dejo que me regaléis alguna cazadora o similar.

Y a todo esto, ¿no es la S1000RR la moto elegida por el Team Motorrad para el CEV? Buena elección. ¡Y buena suerte!

Para conocer un poco más a fondo Ismael no te pierdas esta selección de sus mejores vídeos:

BMW S1000RRAprilia RSV-4 RAprilia RSV-4 FactoryKTM RC8Ducati DesmosediciDucati 1098 RDucati 1198 S

 

Salir de la versión móvil