ARAGÓN STORY by Marc & Dani

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ARAGÓN STORY by Marc & Dani
Carlos Domínguez
Carlos Domínguez


Es un asunto delicado. Lleno de matices, consideraciones y criterios. Las deliberaciones llevadas a cabo por la Dirección de Carrera habrán tenido distintos colores. Depende del cristal con que se mira. Han sido, cuanto menos, largas, muy largas reflexiones. Se desconoce el asunto sometido a examen, análisis y juicio. Se ignora si en el proceso solo se tomó en cuenta el hecho puntual de Motorland o si, además, se hizo antología en la trayectoria de Márquez. Así, sería cuestión de revisar actitud y comportamiento para enmendar riesgos futuros. Trabajar en pro de la seguridad. Es un pensamiento.

¿Infortunio técnico?

El percance Márquez-Pedrosa hubiese pasado totalmente desapercibido de no mediar la caída de Dani. No habría debate en torno a otro error de Marc en persecución de no existir consecuencias. Salvó el error con su pericia habitual, pero partió/arrancó el precioso cable de un sensor de rueda que da señal a la ECU  para la gestión del Control de Tracción. Un cable grueso, con malla textil, bien enfundado y con alma de varios cables transmisores. Una pieza muy sólida y resistente, difícil de cortar. Debió recibir severo impacto, más que roce. Se dice que lo partió la palanca de embrague. O quizás lo arrancó de sus conexiones. Menudo golpe.

cable 1

El cable de marras queda a la vista. Es de fácil acceso. Igual que los sensores y demás adminículos digitales fijados a un brazo del basculante. Todo montado sin protección alguna. Bastaría una mini-carcasa de fibra de carbono o de aluminio. Trabajo de taller, sencillo y económico. Ese pequeño detalle –ahora deberá ser catalogado de vital importancia- se escapó al equipo de diseño de HRC responsable del proyecto RC213V. Alguien se llevará las culpas.

Además, el sistema en cuestión solo tiene un circuito. Escasa seguridad para tan determinante componente de una MotoGP. Ducati lo equipa doble, en paralelo. Son celosos. En HRC deben esmerar la realización-aplicación del proyecto. Se ahorrarán decepciones deportivas, como la de Alcañiz.

 

Los debates habidos quizás sirvan para trazar líneas de futuro disciplinario con mayor definición. Pero no acarrean sanción alguna. Ni falta que hace. Así lo ha dado a entender un comunicado de Dorna en el que escuetamente anuncia Márquez y Pedrosa, convocados por Dirección de Carrera en Sepang para analizar el incidente del domingo en Aragón. Entendemos con ello que el percance se quedarà en un aviso verbal que, como máximo, merece la acción de Marc. Tirón de orejas

Marc es agresivo, decidido y temperamental. Es su ADN. Será muy difícil aplacar sus impulsos, por no decir imposible. Su carrera deportiva ya documenta diversos hitos de ese calado. Aportar el detalle, tirando de archivo, ocuparía cuantioso espacio que no viene al caso. Basta con remitirse a la última en Jerez apartando de su camino a Lorenzo en la última curva antes de meta. Fue un calco del affaire Rossi/Sete. También calcó el adelantamiento, de muy dudosa legalidad, en Laguna Seca atajando el Sacacorchos. Se refleja en quien fue su ídolo y ahora compadre, Valentino.

Se salió airoso de esas agresivas actuaciones. Complacen a los gestores del Mundial. Dan espectáculo y crean ídolos. Como en su día fue Rossi y, ahora, Márquez. Forma parte del espectáculo a vender. Crear íconos para atraer masas, antiguo aforismo. 

Marc es un chico simpático, alegre, extrovertido, cercano y sincero en su expresión. Además, superpiloto ganador de rompe y rasga. Un talismán para el certamen. El recambio de Vale. No se puede pedir más.

En el otro extremo está Pedrosa. El último perjudicado. Piloto admirado y respetado por la elegancia que arropa sus gestas deportivas. Persona prudente, seria, cautelosa, introvertido de expresión  y respetuoso de comportamiento en pista. Sus adelantamientos son limpios y seguros. Actúa dejando siempre ese «espacio de cortesía» -debiera ser exigible- en previsión de males mayores. Pero con eso se nace. Quizás ese talante le ha costado muchos resultados victoriosos. Él lo sabrá mejor que nadie.

Dani estaba visiblemente enojado y en Tele5 mostró abiertamente su enfado tras la carrera: «Marc siempre pilota muy al límite cuando tiene pilotos delante y esta vez casi me da por detrás. Se ve que cuando me ha tocado me ha roto el control de tracción, por lo que en cuanto he tocado el gas se ha acabado mi carrera. Es evidente que da igual lo que diga ahora ya, pues me he caído por culpa de eso, pero el caso es que estos días así, como casi siempre, sólo se escucha al que gana pero me gustaría decir que por parte de la Dirección de Carrera llevan ya algunos años pasando muchas cosas y algunos pilotos hemos intentado calmar a los que tienen menos experiencia, pero en este caso han hecho la vista gorda, como casi siempre. Jorge y yo también sabemos correr pasados de vuelta, pero no todo vale».   arg13mgp 030081

Abunda en ello y pide legislación concreta en previsión de peores lances: «Todos podríamos ser más agresivos si quisiéramos, pero hay muchos pilotos que conducen teniendo en consideración que no están solos en la pista y otros no lo hacen. Marc ha sido demasiado agresivo. Muchas veces se habla de estas cosas cuando es demasiado tarde, cuando ya han sucedido. Tiene que haber un límite que para mí es cuando por las propias acciones se perjudica a otro piloto. Es necesario poner un límite igual para todos. Si no hay reglas es más fácil ser agresivo que contenerse». 

marc marquez fp3 catalunya 2013

A Marc le costará muchísimo cambiar de actitud si se lo imponen. Él es de otra pasta y no lo esconde. Lo manifiesta abiertamente en sus declaraciones referidas a los severos comentarios de Pedrosa: «Si él cree que he ido despendolado, he ido despendolado todo el año, pero al final es mi estilo de pilotaje y me siento seguro así». No parece dispuesto a cambiar.

Livio Suppo –Team principal de HRC- deja entrever su preocupación por las actuaciones de su joven piloto: «Marc tiene que cambiar un poco su actitud, a veces arriesga un poco demasiado». A saber qué le habrá dicho entre bastidores tras haber apartado a Pedrosa de la lucha por el título.

Andrea Dovizioso es de la misma opinión, aunque no cree en el cambio de carácter y profundiza en el detalle: «Sabemos que Marc pilota de forma agresiva, no es la primera vez que sucede alguna cosa similar, pero tiene una gran habilidad porque siempre consigue recuperar sus errores. Simplemente, tiene una percepción del límite diferente, no cree arriesgar, no le asusta probar. Probablemente, esta conducta es natural para él, por ese motivo no creo que cambie nunca».

Jorge Lorenzo prefiere no emitir juicio, pero aporta opinión: «Lo que yo diga no va a afectar a lo que suceda. Cada piloto es como es. Marc es un piloto agresivo que toma más riesgos que los demás, y cuando haces eso suceden estas cosas». Recuerda su experiencia reciente y abunda en el asunto: «No he visto la acción, pero yo ya di mi opinión en Jerez cuando lo viví en primera persona. Ahora no puedo opinar. Marc es un piloto agresivo que toma muchos riesgos, para él y hacia los demás».

El domingo de Aragón fue el 28º aniversario de Dani. Por la tarde sopló velas en el hospitality de Honda con su familia y amigos, pero la tarta no logró endulzar su amargura: «Esta carrera habría podido ganarla, en cambio me voy a casa con cero puntos y sin poder haber hecho nada para evitarlo ¿Aceptar las excusas de Marc? Ciertamente, pero son inútiles. Siempre funciona así, uno lo prueba y luego pide excusas. Son palabras que llegan demasiado tarde».

A todo ese revuelo, Márquez reconoce su error, minimizándolo: «Tengo la culpa, pero ha sido solo un pequeño error y un contacto ligero. Me sabe mal lo que le ha sucedido a Dani. Es mi compañero de equipo, hablaré con él porque la relación es buena y la quiero seguir teniendo buena, al final es importante que los compañeros de equipo se lleven bien».

Marc esperó a que Dani ultimase el festejo familiar para presentarle sus excusas y darle su detalle de los hechos. Pedrosa aceptó cortésmente las explicaciones. Se dieron la mano. Por su mente debieron pasar sentimientos de amargura, decepción y desánimo al desvanecer cualquier opción a título. 

Márquez ha creado un problema en HRC. También en Dorna, en la FIM y en el propio campeonato.