La dignidad de la que habla mi reflexión se produce dentro del concepto moral de la convivencia en sociedad. En ocasiones se habla de la dignificación del colectivo motorista, y no es que seamos indignos, es más bien que unos cuantos se han empeñado en hacer creer a otros que los motoristas somos seres antisociales. Para colmo, cuatro usuarios de motocicleta algo descentrados, de los casi 3.000.000 que somos, les sirven de ejemplo.

¿Oposición a la dignificación del colectivo?

¿Oposición a la dignificación del colectivo?
Fórmula Moto
Fórmula Moto


Resulta que, hace unos días, en una reunión con la DGT me tocó oír a un -motorista- que no se creía y le extrañaba que los usuarios de motocicletas no sobrepasaran la velocidad máxima en horario diurno, como norma general, según el estudio sobre flujos de velocidad libre que la Universidad Complutense de Madrid realizó por encargo de la DGT (algo que sirvió a la propia DGT para decir que el estudio que había encargado, publicado y pagado tenía fallos).

El estudio demostraba que, como media, los coches cometían infracciones en tres de los cuatro escenarios (autopista, autovía y carreteras convencionales de 90 km/h) en conducción diurna, frente a  las motos que se mantenían limpias en todos.

Pues bien, soy de la opinión que los motoristas generalmente respetamos las normas y que el estudio en cuestión que se ha presentado también para el Observatorio Europeo de Seguridad Vial, es lo suficientemente válido como para dar un valor de aproximación que no hace más que ratificar otras pruebas.

¿Qué empeño hay en destruir la imagen del colectivo?

El Instituto Nacional de Toxicología en la -Memoria de análisis toxicológico de muertes en accidente de tráfico 2008-, publicada también durante este año en una de las sesiones técnicas de la DGT, dejaba claro que el 33,01% de los conductores fallecidos en accidente de coche daban positivo en alcoholemia con una tasa superior a 0,5 g/l., frente al 23,20 % de los conductores de motocicleta- Estamos en un 10% menos que los coches.

La última campaña intensiva de vigilancia y concienciación de motorista, de siete días de duración y que finalizó en junio de este año, dejaba claro que el 0,14% de los motoristas no hacía uso del casco de protección, frente al 1,25% de los usuarios de coche que no utilizan el cinturón de seguridad (datos de la última campaña de febrero del 2009).

Durante la operación de junio se controlaron más de 30.000 motoristas y tan sólo se denunciaron 167 infracciones relacionadas con la seguridad vial, esto es, el 0,54% de los motoristas. Dicho de otra forma, de cada 200 motoristas 1 o no se pone el casco, o realiza un adelantamiento inadecuado o circula a exceso de velocidad.

Tenemos deberes pendientes- cierto- pero indudablemente somos los mejores y entendemos de compañerismo- algo que en otros colectivos ya se ha perdido o se está perdiendo-

Sigamos adelante y no dejemos que el mito nos llene de mierda.