Cambio de bujía


Localización.
La bujía se encuentra en la culata, que es la parte superior del cilindro. Normalmente está en una zona de fácil acceso ya que es lo primero que se mira cuando el motor no arranca. Para acceder a ella hay que retirar primero la pipa, es una goma que se pone encima y sólo hay que tirar de ella. Hay sólo una llave universal para quitar la bujía que vale para cualquier tipo (cuello largo o corto). La bujía va enroscada a la culata, únicamente hay que girarla como si fuera un tornillo.
Verificación.
Para saber el estado de la bujía hay que mirar el electrodo, que es la parte de abajo, donde acaba la rosca. Hay tres casos posibles. Color negro: puede ser por una mala carburación, con exceso de gasolina o por culpa de la suciedad en el filtro de aire. Color blanco: es evidente que trabaja con un exceso de temperatura, algo peligroso para el motor y puede incluso ser causa de gripaje. Puede solucionarse tocando el ralentí, cerrando el tornillo media vuelta. Color café: es el ideal.
Sustitición y limpieza.
El precio de una bujía para scooter oscila entre 2 y 5 euros, por lo que en caso de duda lo mejor es sustituirla por una nueva. Para evitar confusiones, lo mejor es llevar a la tienda la bujía usada y pedir una igual. Si se decide reutilizarla se pueden limpiar los electrodos con un cepillo de alambres. Hay que hacerlo con mucho cuidado para no variar la distancia de los electrodos, porque podría influir en el funcionamiento del motor.