Miquel Silvestre en una BMW de 60 años por las secundarias españolas

¿Dónde puede ir de vacaciones un aventurero que ha recorrido todo el mundo en moto? Podríamos pensar que a buscar el destino más exótico posible. Probablemente, acertaríamos. Pero tal vez nos equivoquemos en lo que consideramos exotismo, pues pudiera suceder que quien ha cruzado África, Asia, Sudamérica u Oriente Medio pensara que lo realmente exótico es lo que tenemos más cerca y por eso mismo no siempre vemos. Y es el caso de Miquel Silvestre, que ha recorrido España por sus vías secundarias.

Pero no una España cualquiera ni en cualquier moto. El escritor se ha perdido por los caminos menos transitados, por las carreterassecundarias de las comarcas más perdidas, y lo ha hecho en una BMW de hace más de medio siglo, una R 50/2 diseñada en la década de los cincuenta.

Rutas sin asfaltar, pueblos medio abandonados, paisajes rurales, tradiciones olvidadas, personajes peculiares… una auténtica aventura a lomos de un vehículo clásico y romántico para recordar un país que está desapareciendo a toda velocidad y que quizá dentro de poco, cuando mueran los últimos ancianos que hoy mantienen la memoria de lo que fuimos, ya no quede prácticamente nada. Como nos recuerda el autor de Un millón de piedras, “solo el 20% de la población española vive en el campo y hay 3.000 pueblos abandonados.»

De este peculiar viaje sobre La Abuela, Miquel Silvestre ha rodado un documental lleno de nostalgia y exotismo. Sí, exotismo, porque lo exótico no es lo que está lejano, sino lo que conocemos poco. Y a veces parece que cada vez conocemos menos el rostro rural de nuestro propio país.