Se acabó el ácido para baterías de moto: un peligro menos

La razón no es debida a un avance técnico (que los ha habido, y muchos), sino por un problema legal. Ese acido puede ser lo que se denomina un precursor en la fabricación de ciertos explosivos y, por tanto, pasa a ser una sustancia que requiere ser controlada. Parece ser que bombas con ese componente se han empleado en recientes atentados terroristas en Londres, donde se prohibió ya la venta de este tipo de material hace tiempo tras esos sucesos.

Dicha prohibición llega ahora a España. Desde el 1 de febrero está prohibida la venta del clásico ácido empleado para rellenar baterías. Las que compres ahora de este tipo, las de plomo – ácido, deben entregártelas ya cargadas y cerradas, de forma que no necesitarás (ni podrás) realizar tú ese proceso.

Su manipulación tenía claros inconvenientes e incluso riesgo: simplemente una gota en la ropa suponía un agujero en la misma, pero en contacto con ojos, boca e incluso con la piel, en cantidad suficiente, posibilidad de problemas serios. No era difícil que ocurriese alguna contrariedad si no estabas acostumbrado a realizar el proceso de carga. No obstante también tenía la ventaja de poner en marcha tú mismo la batería, no comenzándose a gastar hasta que la instalabas en la moto.

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Esta novedad plantea problemas para los vendedores de recambios. Si necesitas una batería puedes elegir otros tipos. Las de gel o litio no necesitan esa carga y ya vienen con ella, de forma que, además de llevarte una batería mejor (más cara, eso sí), no cambiará nada. Si es de las de plomo sí te la darán ahora cargada y, lógicamente, su vida útil habrá empezado en el momento de la carga. Si es poco antes de comprarla no pasa nada, pero ¿quién te asegura que no lleva un año en la estantería con carga?

(Punto de recarga de baterías Larsson)

Ante este problema se están implementando varias soluciones. Hay tiendas que han optado por rellenar la batería cuando se la pides. Eso sí, depende del tamaño deberías esperar desde media hora a un par de horas hasta que coja la carga que debe antes de sellarla y, por tanto, de llevártela. En otros casos, en tiendas con alta rotación de estos productos, se están montado cargadores-mantenedores en estanterías, de forma que las baterías puedan mantenerse con la carga controlada y entregártela en plena forma. En cualquier caso, asegúrate de saber cuándo se ha cargado y cómo se ha mantenido esa batería. Y ante la duda, ya sabes, las de gel o litio siempre estarán previamente cargadas.

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