Aeon 125 Urban

Quizá no te suene la marca. Y quizá hasta parezca, a primera vista, que es otra de esas marcas que emplean mecánicas «estándar chinas» o compradas a un proveedor externo y montadas con mayor o menor fortuna en un scooter de líneas originales. Pero no es así. Aeon es un fabricante taiwanés que desarrolla sus propias mecánicas y sus propios scooter de forma totalmente independiente y completa. De hecho, es más bien al contrario y son ellos los que se convierten en proveedores de motores para, por ejemplo, el Quadro 350.

A España llegan con una original gama, con motores 125 y 350 y dos carrocerías: Elite, un GT sport de líneas agresivas, y este Urban, un vehículo muy peculiar, con ruedas de 16″ y 15″ que le convierten en un rueda alta por derecho propio, con hechuras de scooter GT y espíritu de urbano. Consigue aunar de forma efectiva y acertada las ventajas de estos tres tipos de scooter, algo nada fácil.

A primera vista parece un scooter ligero y compacto, aunque musculoso. Falsa impresión; no tener pantalla aligera su silueta, pero realmente es un scooter grande. Tanto en peso como en distancias se asemeja más a un Kymco SuperDink que a un Daelim S3, por poner un ejemplo. Los mandos están bien distribuidos y en marcha no se nota pesado y se maneja bien, aunque tienes la sensación de mucho avance de la rueda delantera: está lejos de ti, tanto como en cualquier maxi, solo que al no tener cúpula, parece más.

Bien terminado, el cuadro dispone de la información precisa, aunque lleva en el mismo reloj (cambiando su función con un botón) la temperatura del agua y el nivel de combustible, algo poco práctico. Buen detalle, sin embargo, es el tapón de gasolina, en el suelo, con apertura desde el contacto. Y una de las mejores soluciones de este scooter: un hueco bajo el asiento que sobrepasa lo normal en los rueda alta, ya que te cabe un integral y un jet, uno detrás del otro. En cuanto a sus decoraciones, presenta tres colores, blanco, gris plata o negro, que ofrecen una elegancia muy adecuada.

Lo mejor

· Combina la estabilidad de un rueda alta con la capacidad casi de un GT.
· Concepto poco visto y muy práctico en ciudad.
· Estable y noble, con prestaciones suficientes en ciudad.

Mejoraría con…

· Motor de inyección
· El cuadro es un poco escueto.Debería separar los relojes de temperatura y gasolina.
· Los neumáticos de serie limitan sus posibilidades.

En marcha

Un scooter agradable, con todos los mandos en buena disposición y tal y como su planteamiento advierte, original hasta en su forma de andar. Nada más subirte llama la atención el lanzamiento de la rueda delantera, lo que sumado al empleo de un enorme balón de 120/70 delante da una cierta sensación de peso del tren delantero en parado.

Sin embargo, una vez en marcha ese peso desaparece, se muestra noble y puedes confiar plenamente en el chasis, soportado por unas suspensiones bien taradas, algo duras para poder conducir deprisa, pero no incómodas en sitios bacheados. Sólo los neumáticos (marca Duro) limitan las posibilidades de un scooter con el que por nobleza podrías exprimir unas buenas dotes deportivas en secciones de curvas.

El motor empuja bien, funciona redondo, sin ruidos ni vibraciones y sólo en carretera abierta echas en falta algo más de potencia: llegas a verle los 110 km/h en el marcador, pero tampoco es fácil pasarlo de ahí.

Cómodo para repostar, se abre automáticamente cuando accionas con la llave en la posición correspondiente en la cerradura de contacto.

Incorpora detalles de scooter de gama alta, como el piloto trasero con iluminación por leds. La zaga es muy afilada, de estilo muy sport.

El pasajero tiene sus propios reposapiés. Se abren presionando hacia dentro sobre ellos y para plegarlos también puedes darle con el pie.

Motor

Motor de desarrollo propio, es un propulsor de concepción actual, con culata de cuatro válvulas y distribución por un sólo árbol de levas en culata. Está refrigerado por agua y llama la atención que todavía recurra a un carburador en vez de a un sistema de inyección.

Equipamiento

Extraña mezcla de equipamiento, con detalles muy «GT» como el piloto de leds o la apertura del tapón de gasolina automática, con otros menos sofisticados como la guantera abierta o el cuadro, pequeño y con ausencias como el reloj horario.

Carga

Todo un lujo en un rueda alta: puedes meter bajo el asiento un casco jet y un integral. Hay una guantera abierta para vaciar los bolsillos mientras lo usas, pero ojo con los baches.

Confort

Cómodo, agradable, con buen sitio para los pies y un asiento amplio para dos personas, aunque no llega a los límites de los grandes «maxi», fundamentalmente por la ausencia de una cúpula. Sin embargo, en ciudad o en días calurosos, la falta de este componente se llega a convertir en una ventaja.

Parte ciclo

Una estructura de chasis típica de un scooter GT, lo que impide disfrutar del suelo plano aunque aporta buena rigidez. Unido a sus ruedas altas, le otorgan una gran nobleza de reacciones. Bien de frenos, ambos de disco, con buen tacto.

El cuadro muestra un diseño muy acertado. Sin embargo, el cuentavueltas, poco útil en un automático, es demasiado visible y utiliza  la misma escala para el nivel de gasolina y la temperatura del agua.

Tan grande como un verdadero GT, con asiento a dos niveles y un asa trasera en forma de alerón, el pasajero tiene un espacio reservado más que suficiente y bastante cómodo. Al ser un rueda alta y con suspensiones bastante firmes, tampoco sufre su estabilidad y es fácil de llevar con peso detrás. Pero el pequeño motor de 125, como es lógico, acusa ese sobrepeso y penaliza sus prestaciones.

Equipamiento

Así lo vemos

Prestaciones aceptables, con buena respuesta de motor y algo justo de velocidad punta, en carretera destaca por el buen comportamiento. Las ruedas de 16″ delante y 15″ detrás, a pesar de unos neumáticos mejorables, le dan un rodar muy sano y noble, lo que en ciudad también se agradece. Gira bien y, aunque grande, se mete bien entre coches. Un consumo normal para un 125 de carburador, no es especialmente «gastón». Cómodo, con detalles de equipamiento de buen nivel, aunque no de lujo, destaca por ser uno de los rueda alta con mayor capacidad de carga del mercado.