Ideas frescas y seguras

En verano el casco estrella es el jet o abierto porque es más cómodo en todos los sentidos. Hay cascos abiertos de muy diferente signo por lo que es una tipología que conviene estudiar a fondo antes de decidirse por uno de ellos. Y es que cuando hablamos de jet, se pueden hacer distintas interpretaciones:

– El típico «quitamultas» del que hay muchas variantes y que al no estar homologado desaconsejamos de forma tajante. Tampoco lleva pantalla protectora.

– Semi-jet: Casco largo que cubre hasta la nuca y con pantalla. El más recomendable de los cascos abiertos.

– Jet: Casco más bien corto que no cubre totalmente la nuca y dispone de pantalla.

Estas son las alternativas tradicionales pero hay otras dos opciones válidas pero cuyo precio suele ser bastante más alto, ya que también son más seguros y por lo tanto más costosos de fabricar:

– La primera es el casco convertible, abatible o modular. Permite utilizarlo como un integral pero se abate la mentonera hacia arriba para dejarlo como un casco abierto. Es muy recomendable sobre todo si se circula mayoritariamente por carreteras o autovías, donde utilizaremos la estructura integral. En las incursiones urbanas lo abriremos para dejar entrar el aire.

– La segunda alternativa es una nueva generación de cascos que permiten modificar su estructura. Podríamos llamarlos híbridos porque posibilitan transformarlos de integrales a jet.

Homologación

Para que estéis seguros de que han pasado las pruebas de homologación, el casco tiene que llevar cosido en alguna parte la etiqueta rectangular con una numeración. Como la normativa que lo rige es la ECE 22.05, los dos primeros dígitos tienen que ser 05, en referencia a esto. Al final de la primera serie de número aparece la letra J que lo identifica como casco jet homologado. En grande tiene que estar presente la letra E -de normativa europea- seguida de un número que es el 9 en el caso de haberse realizado las pruebas en España pero puede ser 3 si las ha pasado en Italia. Ej: 051221/J-9861868. E9

Características principales

Ventajas: Son frescos, ligeros, pequeños -fáciles de guardar en cualquier scooter- y más económicos al mismo nivel de calidad que los integrales. Se quitan y ponen con rapidez y facilidad gracias a que normalmente recurren a cierres micrométricos o de «clic» como los cinturones de seguridad. Al ser abiertos permiten un campo de visión más amplio.

Desventajas: No protegen la cara ni el mentón que es un punto vital. Casi obligan a llevar gafas para proteger los ojos en la medida de lo posible. Normalmente prescinden del cierre con anillas

-el más seguro-. Son inestables y ruidosos a altas velocidades. Las calotas no suelen estar hechas con tricomposite (mezcla de fibra de vidrio, carbono,

kevlar) sino que generalmente son de policarbonato, o en el mejor de los casos, de resinas termoplásticas. Estos materiales no reparten los impactos para facilitar su absorción, tal y como lo hacen las fibras que hemos nombrado.

Híbridos

E s lo último por la polivalencia que propone. La primera impresión es de ser un casco integral, pero con un estilo diferente al habitual. Las mentoneras se pueden desencajar para proponer un casco mucho más fresco -y con menos protección, por supuesto- que podremos aprovechar para los días más calurosos y de cortos desplazamientos en núcleos rurales o urbanos.

Givi X.01

Es la última novedad de la marca italiana. Aunque la idea ya ha sido explorada con anterioridad, Givi ofrece algo más, y son las tres posibilidades de uso, pues a la de integral o jet se suma una con mentonera pero de verano, es decir, que permite la entrada del aire conservando la mentonera. La doble pantalla hace que los ojos se preserven en buena parte de la corriente de aire frontal.

LEM Progeny

En principio, es un casco modular o abatible, pero unas ligeras diferencias lo desmarcan de esta tipología de cascos. La primera es que al plegar la mentonera, no lo hace solidariamente la pantalla como en los modulares, así que podemos utilizarla como si de un jet se tratase. Tampoco la mentonera es como la de un casco integral sino que permite el paso de una fresca corriente de aire, por lo que su uso está destinado a la climatología benigna.

Airoh TR1

Un look futurista esconde un casco con dos posibilidades; integral o jet, debido a que se puede desencajar la mentonera. La peculiaridad es que la pieza no se desmonta totalmente sino que se pliega hacia atrás con unos anclajes específicos. Cuando lo utilizamos en «modo abierto» contamos con una gafa o doble pantalla para facilitar la visión.

Cascos que no se deben llevar nunca

La razón principal para no llevar estos cascos es que no están homologados porque no cuentan con materiales de construcción y cierre apropiados. Comenzamos por el bautizado como «calimero». Sí ése blanco con aspecto de cáscara de huevo.

También se ven otros esperpentos como cascos de montar a caballo utilizados para moto o algunos de origen militar. La gente que prima el no gastarse un solo euro o ir a cara descubierta por cuestiones de estilismo, sin protección real alguna, debería ser multada por el policía de turno de acuerdo a la ley. ¿O es que en los coches se puede utilizar un cinturón de seguridad casero?

Semijet

Jet