Capirossi dice adiós a las motos


Ha sido en el circuito de Misano, donde se encuentran todos los pilotos del Mundial para disputar una nueva carrera del mismo, donde el gran Loris Capirossi ha anunciado su retirada del mundo de las dos ruedas. El italiano, nacido en Bolonia, ha decidido decir adiós de una forma elegante y deportiva, rechazando varias ofertas de las Superbike y de un equipo menor en Moto GP en el que hubiese corrido con una CRT.
El piloto italiano se despide tras haber hecho una larga carrera en el mundo de la competición, nada menos que 22 años en los que ha conseguido dos títulos mundiales de 125 cc y uno de 250 cc. Además de estos tres mundiales, Loris se retira con 29 victorias y 99 podios en su haber, un gran palmarés que terminará con la finalización de esta temporada.
El ídolo para muchos de los amantes al motociclismo aseguró que está pasando dificultades esta temporada y que ya ha llegado la hora de anunciarlo:»Está siendo un año duro y voy a intentar dar lo mejor de mí para lograr un buen resultado este fin de semana, pero lo que quiero decir, y es difícil hacerlo, es que estas son mis últimas carreras porque dejo de correr. Es extraño oír a los otros pilotos hablar de las motos del año que viene, cuando sé que yo ya no haré ninguno de esos test»
El bondadoso piloto italiano, que tiene infinidad de amigos dentro del paddock, no pudo aguantar la emoción durante el anuncio y rompió a llorar mientras era ovacionado por todos los asistentes a la rueda de prensa.
En la rueda de prensa hizo un pequeño repaso a su vida deportiva y recordó aquel Mundial de 250 cc donde tras volver a la competición pudo ganar el campeonato con una maniobra con Harada que todo el mundo recordará y que fue motivo de muchos comentarios, la mayoría de ellos criticando la maniobra del piloto boloñés. «Sabía que podía pasar lo que pasó y que, en ese caso, el Mundial lo ganaba yo, pero también que si no intentaba pasarle me lo habría echado en cara el resto de mi vida. Lo haría 300.000 veces más«.
El italiano contó que ahora los dos pilotos tienen una buena relación: «Lo que es increíble es lo que puede cambiar la vida. Mi hijo y la hija de Harada van juntos a clase en el colegio y ahora nos llevamos muy bien»
A Loris Capirossi, que quiere retirarse intentando conseguir este año el podio número 100, se le echará de menos en las parrillas de las carreras de Moto GP y siempre será recordado como un gran piloto, tanto dentro como fuera de las pistas.