Yamaha Vity 125


Es el caso de la firma de los diapasones que, una vez completada la gama de scooters por arriba, es decir, los de 3.000 euros en adelante, refuerza su presencia en el segmento de los económicos del octavo de litro -hasta ahora sólo con el Cygnus como único integrante- con el nuevo Vity. En este pequeño scooter de corte asiático se ha tomado como premisa el ahorrar todos los costes posibles, sobre todo en cuanto a equipamiento, para poder ofrecerlo al precio estelar de 1.849 euros.
Para ello, se ha prescindido de ciertos lujos, tales como una instrumentación digital o un freno de disco trasero. Todo para convertirse en el scooter más barato que tiene Yamaha en su catálogo de 125 cc y hacer frente, entre muchos otros, al también recién estrenado Honda Lead 110, su más directo rival que en muy poco tiempo se ha colocado en los primeros puestos del ranking de ventas.
Y alguien podrá preguntarse: ¿puede ser que este scooter lo haya visto antes por la calle? Es posible, pero bajo el nombre de Yamaha Cygnus RS. Llegaron algunas unidades a España que se vendieron antes de que el Vity entrara en escena, que fue en el pasado mes de junio. La batalla de los económicos siempre ha sido encarnizada pero se pone aún más interesante con esta incoporación. Conozcamos en profundidad a esta nueva promesa.
Colores
![]() | ![]() |
Motor
Equipamiento
Carece de elementos impor-tantes como un cuadro de mandos con reloj, testigo de reserva o cuentakilómetros parcial o freno de disco en la rueda trasera. Pero sí incorpora detalles que se agradecen como el sistema antirrobo que impide que fuercen la toma de contacto, pata lateral y caballete o el gancho acompañado del suelo plano.
Carga
Al hueco bajo el asiento donde se puede guardar cualquier casco integral, por muy grande que sea, hay que sumar una enorme y profunda guantera que además se encuentra muy a mano. Como se puede ver en la imagen, cabe hasta una botella grande de agua. Lo malo es que no tiene tapa. Cuenta además gancho portabolsas -siempre más efectivo con suelo plano– y parrilla trasera.
Confort
El ser pequeño favorece la manejabilidad, además de la agilidad y soltura para callejear y meterse entre coches. Pero incide directamente en la habitabilidad, que en el Vity es reducida, sobre todo, porque el asiento es pequeño y dificulta que viajen dos personas. A pesar de ello la postura de conducción es cómoda.
Parte Ciclo
Freno de disco delante de 180 mm de diámetro, con potencia de frenada y buen tacto. Detrás monta un tambor, menos efectivo que un disco pero que cumple su función. Las suspensiones son algo «rebotonas» y con poco recorrido, no es difícil hacer tope con dos personas. Las ruedas de 10» aseguran en todo momento agilidad de movimientos.
Accesorios
De momento sólo se ofrecen dos accesorios opcionales:
Parabrisas con protegemanos. Incluye los soportes.
Precio: 75,01 – + IVA
Deflectores laterales. Despejan el aire y protegen las piernas. Van a ambos lados de la carrocería. Precio: 36,51 – + IVA
En marcha
El vity está concebido por y para la ciudad. Su reducido tamaño y peso, las ruedas de 10 pulgadas y una distancia entre ejes extremadamente corta, le hacen ser muy ágil y eficiente para moverse entre el tráfico. Además, su salida desde parado es rápida y el ángulo de giro generoso.
Es el perfecto scooter urbano. Esto contrasta con su uso por carretera, poco recomendable al no ser demasiado estable, no disponer de velocidad punta suficiente (91 km/h) ni de protección aerodinámica para circular fluidamente.
La postura de conducción es correcta, el asiento a 730 mm del suelo le hacen ser muy manejable -la maniobrabilidad en parado es un lujo- y es accesible a todos los públicos, aunque no hay mucho sitio para el conductor.
Los que midan más de 1’80 les tocará el manillar en las rodillas en los giros cerrados. El pasajero lo tiene aún peor al disponer de muy poco espacio en el asiento. La estabilidad en curva tampoco es uno de sus fuertes, algo que se arreglaría con alguna pulgada más en la rueda delantera. Las ruedas pequeñas también hacen que roce al tumbar en las curvas por los dos lados, aunque es especialmente exagerado en los virajes a izquierdas.
Equipamiento
![]() | ![]() |
Antirrobo. Al lado de la toma de contacto hay otra pequeña cerradura para poder tapar el clausor y evitar que lo fuercen. |
![]() | ![]() |
Bajo el asiento encontramos un hueco para guardar cualquier casco integral. También está el tapón del depósito de gasolina con su correspondiente tapa de plástico. | Sencillez. El cuadro de mandos consta únicamente de un velocímetro, el nivel de gasolina y un cuentakilómetros. Lo barato es lo que tiene. |
![]() | ![]() |
Vista trasera. Las ópticas traseras se agrupan en un único bloque, por encima una sencilla parrilla portabultos. El guarbagarros es prolongado, algo de agradecer en lluvia. | Plataformas para el pasajero integradas en la carrocería, una opción estéticamente resolutiva pero no demasiado cómoda para apoyar los pies. |
Datos oficiales
|
|
|
Así lo vemos
Sus cualidades urbanas son sólo comparables a las buenas cifras de consumo. En carretera adolece de motor, estabilidad en marcha y protección aerodinámica. En confort aprueba por los pelos ya que le falta habitabilidad. Muy en la línea está la capacidad de carga con un hueco aceptable y una amplia guantera aunque sin tapa. El equipamiento es escaso, aún así cuenta con un sistema antirrobo o con pata lateral y caballete central.
Como se ve en la foto el Vity acepta a dos personas aunque a duras penas, sobre todo cuando son «grandecitas». El asiento es pequeño y al pasajero le queda poco sitio aunque cuenta con plataformas reposapiés y asideras integradas en la parrilla trasera.
Rivales
Honda Lead 110 | Daelim S1 125 |
![]() |
Su más directo rival también acaba de lanzarse al mercado, tienen en común muchos aspectos. El Lead le gana en capacidad de carga. | En el S1 no se descuidado nada, ni siquiera su equipamiento. Tiene motor de inyección y un precio como para tenerlo muy en cuenta. |
|
|
Kymco Agility 125 | SYM Mio 100 |
![]() | ![]() |
El ya mítico Agility perdura un año más en el catálogo de Kymco al mismo precio. Tiene uno de los motores con más nervio del segmento. | El pequeño retro Mio se desenvuelve por la ciudad como pez en el agua gracias a sus ruedas de 10» y su potente salida desde parado. |
|
|