Yamaha renueva su exitoso NMAX 125 que ahora es más atractivo y premium
En 2015 Yamaha presentaba su nuevo NMAX. Era un concepto nuevo o prácticamente nuevo: Honda, un tiempo antes, había revolucionado el mundillo de los 125 con aquél PCX que quería ser un scooter urbano, ágil y maniobrable pero que además a base de tecnología se empeñaba en ser más eficiente y más premium de lo que solían ser los scooters que llamábamos urbanos. Un adjetivo, que dicho en otras palabras quería decir barato, básico y de prestaciones justitas.
El PCX no era así. Sí, era urbano y ágil. Y sí, era económico en cuanto a consumos y demás pero no especialmente barato. Fue, y es, un gran éxito. Yamaha entonces, siempre atenta a los movimientos quiso hacer su propia interpretación de un scooter que ocupara un hueco parecido. Tenía que ser ágil y maniobrable, tenía que ofrecer tecnología y acabados de alto nivel. Y tenía que ser decididamente Yamaha.
Así nació el NMAX, un scooter con motor de radiador lateral, con una sofisticada culata con distribución variable, ligero y ágil. que llevaba el concepto del «scooter sport» que representaban con tanto éxito los XMAX y TMAX al segmento más ciudadano de estos vehículos.
Hace ya nueve años de aquello. Desde entonces más de 160.000 NMAX ruedan por Europa. A aquél primer NMAX le llegó compañía en 2017, con el NMAX 155 para otros países europeos y en 2021 le llegó su primera modificación importante, con un nuevo motor que ya incorporaba el sistema Start&Stop (algo que empezó su rival PCX y en lo que le ganaba) y otros detalles de equipamiento que lo hacían más atractivo.
Además, sus prestaciones, desde aquél primer modelo, han aumentado, algo que va contracorriente con lo que suele suceder cada vez que se aprietan las normas anticontaminación.
En 2025 llegará a las tiendas esta nueva generación que nosotros ya hemos podido probar. Y no defraudará: algo más de equipamiento, motor y parte ciclo revisadas para un mejor desempeño una nueva estética actualizada, para un scooter que ahora se siente mas cerca de sus hermanos de gama Max en cuanto a esa sensación de calidad premium que un Yamaha de esta familia «Sport Scooter» debe transmitir.
Cómo es el Yamaha NMAX: un referente, ahora más premium
¿Cómo competirías tú, si tuvieses que definir un scooter com este, en el mercado actual? Para una marca como Yamaha las cosas se están poniendo interesantes: han llegado las marcas chinas, con scooters que van realmente bien (ya no son lo que eran), muy equipados y a precios que a los comerciales de Yamaha les debe dar sarpullido cuando los ven.
¿Puedes bajar precios? Difícil: los costes no son los mismos y, además, se supone que tú vendes un nivel de calidad superior, lo cual suele implicar un precio mayor y así lo percibimos los compradores. ¿Aumentar equipamiento? Pues entonces te solapas con tus propios productos de un escalón superior y lo lógico es que además tengas que subir precios, por lo que tampoco es salida. Sólo te queda una forma de hacer las cosas: hacerlas mejor.
En Yamaha es lo que han hecho. Tenían un gran scooter, que todo el mundo alaba por su sabia combinación entre agilidad, prestaciones, economía y calidad. No hace falta, por tanto, cambiar mucho. Valdrá con algo tan simple (modo sarcasmo «on») como que cuando se suba el próximo usuario perciba mayor calidad. Es decir: suavidad de marcha, ajuste de componentes, estabilidad y frenada impecable, en un scooter suficientemente rápido, ágil y cómodo. ¡Ah!; y que además a primera vista sea un NMAX, que transmita esa pertenencia a una familia tan prestigiosa como los MAX de Yamaha, pero de forma más moderna y atractiva. Como te digo, simple y fácil.
Mecánica conocida y refinada
No hay grandes cambios en este nuevo NMAX: el motor es el de siempre, en el chasis de siempre. Pero eso no quiere decir, en este caso, que no hayan cambiado cosas: en el motor hay un cigüeñal revisado, con nuevas dimensiones del rotor. En la distribución se emplea un nuevo piñón y se ha actualizado el sistema de tensión de la cadena, ahora hidráulico, con nuevos pasos de aceite. En el cilindro también hay retoques y en el escape un sensor de oxigeno adicional que ayuda a superar la exigente Euro 5+.
Pero el motor, además de estos cambios, sigue siendo el mismo monocilíndrico de un sólo árbol de levas con sistema VVA (valvulares de admisión variable), con un sistema de generador de corriente que invierte la polaridad para convertirse en motor de arranque que permite ese sistema Start&Stop. Ahora declara 12 CV, con un par motor de 11,2 Nm y un consumo WMTC de sólo 2,2 litros a los 100 kilómetros.
En la parte ciclo sucede algo parecido: discos de 230 mm delante y detrás, una horquilla estándar y dos amortiguadores traseros con regulación de precarga.
Pero se han modificado detalles como los muelles delanteros y el aceite de horquilla mientras que atrás hay nuevos muelles, 5 mm más de recorrido y un nuevo sistema de reglaje de precarga que prescinde de herramientas, haciéndolo más fácil de modificar sobre la marcha.
¿Y para que sirve todo esto? Bien, se nota en mayor suavidad de marcha, mejor estabilidad tanto rodando como frenando y sobre todo, en una calidad de funcionamiento en general muy por encima de la media entre este tipo de scooters.
Una carrocería más moderna y un estilo más MAX
La nueva carrocería envuelve ese novedades y acierta a la hora de ayudarte a verlo: el nuevo estilo está en el punto justo en el que consigue que a simple vista veas que estás ante un NMAX pero a la vez te hace entender que este nuevo NMAX es más MAX que nunca, y valga el juego de palabras.
Es más MAX que nunca por que se parece más a sus hermanos mayores tanto en su look como en la calidad percibida. Es un scooter más premium, sin haber perdido su tamaño y agilidad. El frontal es más recto y alto, más agresivo y deportivo, con una cúpula más grande que antes. Las cachas traseras pintadas en el color de la carrocería son más pequeñas y estilizadas. Y el «boomerang» lateral que siempre ha caracterizado a la familia ahora está más presente.
Delante, una nueva luz guía en LED y los intermitentes de la misma tecnología van unidos en un sólo grupo frontal a los proyectores de largas y cortas en el centro. Detrás, todo el grupo luminoso es también de LED, con los intermitentes en una posición muy baja, ya donde la zaga entra hacia el paso de rueda. El asiento, de formas muy acertadas, lleva grabadas las siglas NMAX en su parte superior. Y el motor también lleva tapa de transmisión de nuevo diseño.
Con todo ello el NMAX sigue siendo compacto y ágil, muy funcional en la ciudad. El asiento, 5 mm más alto que antes, está a 770 mm, lo que sigue siendo muy accesible para casi cualquiera. Mide entre ejes sólo 1.340 mm para una longitud total de 1.935 mm, en un scooter que gira muy bien. Y pesa, en orden de marcha, 132 kg: un peso muy contenido para un scooter así.
El equipamiento: nuevo Tech MAX
Quizá en el equipamiento es donde el nuevo NMAX llama menos la atención, ya que no hay grandes novedades, en un scooter que en el fondo tiene espíritu de utilitario: lujoso, pero utilitario. Sigue llevando un cuadro LCD. Está bien organizado y se lee bien. Se ha rediseñado y es suficiente en todos los sentidos y además puede conectárselos al móvil para darte información sobre llamadas perdidas, mensajes y algunas cosas más.
Lleva dos guanteras, una abierta (con USB), profunda, donde cabe una botella de agua, a la izquierda y una con tapa aunque sin cerradura a la derecha. Y pata lateral con desconexión del motor y caballete central, bien equilibrado y fácil de usar. Lleva una llave de proximidad, que ya llevaba, con un pomo desde el que abres el asiento, donde cabe un casco integral y poco más (23,3Lts). Pero eso si; lo más importante: lleva un control de tracción y ABS de serie en ambas ruedas. ¿Querías más?
Bueno, si te parece poco Yamaha ha presentado en este acto, aunque no hemos podido probarlo, el nuevo Tech MAX. La verdad; no importa mucho: es el mismo scooter con algunos aditamentos interesantes. El principal, un cuadro dividido en dos partes, con una pantalla TFT abajo en color, de 4,2″ con navegación y otras funciones de conectividad. La navegación va a través de la app de Yamaha MyRide y es de Garmin. Se controla desde un joystick en el lado izquierdo, que también controla las otras funciones de la pantalla. Además, los colores de carroceria, el asiento y algunos otros detalles de terminación son superiores en este nuevo NMAX Tech MAX.
Cómo va: no te extrañe que sea un referente
¿Qué le pides a un scooter de 125? Bueno, pues básicamente que sea fácil, agilizar y cómodo en su uso. Aquí ya habrá diferencias: hay quien hace más kilómetros por carretera y otros que no saldrán de la ciudad. Pero en cualquier caso eso marcará diferencias en cuanto a comodidad, protección aerodinámica y capacidad de carga. Bien, pues en casi cada uno de esos capítulos, el NMAX puede considerarse al mejor nivel.
El motor BlueCore (asi se llama) es fácil y muy agradable: abres gas y sale con decisión, sin brusquedades, sin vibraciones, sin ninguna mala respuesta. Tiene además control de tracción que vas a usar poco pero si un dia te despistas y abres gas a tope donde no debías te ayudará a lio perder el control. Y ABS de serie; ya puedes frenar como quieras.
Pero además es muy rápido: 12 CV en un scooter de sólo 132 kg. No son los 15 CV tope del carnet pero no lo necesita: declara 99 km/h de máxima pero lo cierto es que le vimos pasar de 120 km/h en autovía, sin grandes bajadas, lo que supondrá unos 110 km/h reales. Esa cifra, hoy día, tiempos ya de Euro 5+, no es de récord pero sí lo sitúa entre los 125 más rápidos sin duda.
Cuando lo arrancas ya ves que estás ante un scooter diferente: el Start&Stop emplea el alternador como es habitual en todas las 125 que emplean estos sistemas. En este caso está muy bien implementado, en un motor que además es una delicia en cuanto a suavidad; me ha pasado: le das al botón de arranque y te quedas con la duda de si ha funcionado: no oyes ni el propio arranque ni el motor en marcha.
Es suave, fácil y gira mucho. En la ciudad pocos scooters se notan más ágiles y maniobrables que este. Acelera además con ganas y se agarra bien. Es divertido de llevar si quieres ir deprisa y da confianza a la hora de hacerlo. Equipa neumáticos Dunlop ScootSmart sobre llantas de 13″ tanto delante como detrás; las suspensiones, más bien bandas y cómodas, consiguen sin embargo que el neumático trabaje como debe y que se transmitan sensaciones de las ruedas. Eso permite una conducción tan deportiva y divertida como quieras, lo que unido a un motor que empuja bien en todos los regímenes hace que sea un scooter muy divertido de llevar en cualquier carretera.
El asiento, la posición de conducción, los mandos… todo está en su sitio y sólo si vas a estar muchas horas sobre el asiento notarás que es más duro de lo que creías. En cuanto a la protección aerodinámica, es más que suficiente con la nueva cúpula: sigue sin ser una cúpula alta (la tienes como opción entre los más de 40 accesorios oficiales y dentro de los «packs» a precio especial que la marca ofrece) pero es suficiente para las prestaciones de un 125 que además está pensado muy especialmente para la ciudad.
Los frenos también están a muy buen nivel: detienen al NMAX en cuanto lo pides y en las manetas el tacto es perfecto. Caballete lateral y central actúan con toda comodidad y son seguros a la hora de aparcar. Todo en este scooter se ve probado, bien pensado y de calidad.
Y sólo el hueco para el casco sería mejorable: cabe un casco integral, lo que en principio es suficiente, pero no todos: el que yo llevaba, con un pequeño alerón, tocaba en el asiento y obligaba a forzar un poco. Pero alrededor del casco si puedes dejar otras cosas. Y en cualquier caso: no es difícil ponerle un top case trasero y ampliar esa capacidad de carga.
Lo mejor:
-Prestaciones y sensación premium de calidad
-Comportamiento sano y divertido
-Radio de giro y agilidad
Mejoraría con:
-Cuadro TFT
-Capacidad de carga
Así lo vemos:
-En carretera: 4
-En ciudad: 5
-Pasajero: 4
-Confort: 4
-Equipamiento: 3
-Autovía: 4
(De 1 a 5 puntos)
El NMAX es uno de los scooters mejor vendidos de nuestro país, luchando por llevarse el primer puesto en la lista de motos más vendidas de este año con su máximo rival, el PCX. Y tiene buenos motivos para serlo, pues es uno de los 125 más inteligentes y con mejor relación calidad-precio-prestaciones del mercado.
Un scooter agradable de llevar, muy divertido cuando le buscas las cosquillas, ya con una buena reputación en cuanto a fiabilidad y consumos y cada día mejor hecho y con mejores sensaciones de calidad. Es rápido y divertido en la carretera, ágil ratonero y cómodo en la ciudad, siempre económico y útil, en el que además puedes llevar pasajero sin molestias.
Un equipamiento que si bien no es lujoso si es suficiente y, sobre todo, con un ABS y un control de tracción de serie que hacen de él un scooter seguro y fácil. No ha llegado todavía a nuestro mercado y por tanto no hay precios pero lo hará en las primeras semanas del año que viene y se publicará entonces su precio que debería estar más o menos como el actual, según confirman en Yamaha España.