AGV, Una pasión por el diseño, la ingeniería y la creación de cascos legendarios

Gino Amisano, fundador de la marca, dio origen a las siglas de AGV, las cuales proceden de sus iniciales (Amisano Gino) y de su ciudad (Valenza). Acompañando a éstas se encuentran los colores de la bandera italiana, hecho que anticipó el -Made in Italy- del que hoy en día es un orgullo.

En el año 1947, AGV, creó el primer casco de moto de cuero completamente a mano. Años más tarde, en 1954, vería la luz el primer casco moderno de origen italiano creado con fibra de vidrio, esta vez la producción sale de fábrica. Ésta no se dedicaría únicamente al ámbito del motor y a lo largo de esta década se lanza una colección limitada de cascos de equitación y polo. A este hecho se le suma, en 1956, la aparición del primer casco de aviación diseñado por la marca.

El mayor éxito de Amisano fue sin duda el lanzamiento en Italia de los cascos integrales, los cuales comenzaron a producirse masivamente a partir de 1971, causando sensación tanto técnica como publicitariamente para la empresa. Concretamente al desarrollar un modelo especial para el equipo de esquí italiano KL (Kilometro Lanciato).
 
Los mejores corredores del mundo han disfrutado de los cascos AGV y de sus innovaciones, tanto en materiales como en diseño, lo que han convertido a la marca en líder mundial indiscutible. En el mundo de las motos destacan figuras como Giacomo Agostini, Barry Sheene y Kenny Roberts; y junto a ellos, en Fórmula 1 se puede nombrar a Niki Lauda, Nelson Piquet o Emerson Fittipaldi. Gracias a estas figuras del deporte del motor, el nombre de AGV ha estado ligado al éxito, continuando en la actualidad de la mano de Valentino Rossi, el cual ha confiado en la marca desde sus inicios profesionales.
 
Desde entonces y hasta día de hoy la historia de AGV es una historia de triunfos y progresos, al mismo tiempo que ocupa un lugar privilegiado en la historia de la seguridad.