Suzuki GSX-R 600/750: Guerra al peso

La 600 reduce su peso en 9 kg, logrando con 189 kg de peso declarado una de las mejores relaciones peso/potencia de su categoría. Por su lado, la 750 también se pone a dieta y baja 8 kg.
En su diseño técnico destaca la reducción de la distancia entre ejes de 15 mm, quedando en 1.385 mm la 600 y 1.390 mm la 750. Esto se ha logrado mediante el giro de 3º del motor entorno al piñón del eje de balance, reduciéndose la distancia entre el eje frontal y el punto de pivote del basculante. El chasis reduce su peso en 1.350 g y recibe un nuevo diseño en sus cinco puntos de soldadura. También el basculante baja otros 900 g.
En cuanto a su motor, mantiene el diseño básico anterior y recibe una nueva caja de cambios con una primera más larga y relaciones más cortas para la segunda, tercera, cuarta y sexta. El sistema de escape, con silenciador de titanio, reduce 1.100 g el peso en la 750 y 1.700 g en la 600. Por otra parte, la primera recibe válvulas de admisión y asientos más ligeros y la segunda nuevos pistones, 78 g más ligeros, desarrollados con el método de análisis (elementos finitos) utilizado para MotoGP, al igual que se ha hecho con los nuevos perfiles de árboles de levas o con la inyección.
Volviendo a la parte ciclo, las GSX-R600/750 incorporan la horquilla Showa BPF de pistón simple desarrollada en competición y que ya incorpora la GSX-R1000. Además, añade pinzas frontales monobloque Brembo de anclaje radial, otro detalle derivado de los circuitos. Y como en las ediciones anteriores, se mantienen el amortiguador de dirección electrónico y la selección de dos mapas de motor.
La instrumentación añade cronómetro e indicador mediante leds del régimen de giro del motor programable para conducción en circuito. También son novedad sus fibras, con menos piezas y más ligeras y nuevas formas para optimizar la aerodinámica y el flujo de entrada y salida de aire en su interior. El ahorro en este caso es de casi 3,5 kg.