La Royal Enfield Classic 650 2025 sigue de manera fiel la línea retro que caracteriza a la marca británica, ahora con un concepto todavía más puro y potente

Royal Enfield acaba de mostrar en el Salón de Milan EICMA 2024 una de sus obras retro más puras en su esencia, la Royal Enfield Classic 650.

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La Classic representa el ADN más directo de Royal Enfield, transmitido en cada evolución. No solo ha sido la base de varios modelos de la marca, sino que también es una moto que conserva su elegancia atemporal y encanto tradicional.

Se trata de un modelo que no revoluciona el segmento al que representa, sino que lo enriquece para encontrar una opción de aspecto elegante para los amantes de lo retro, de fácil conducción y líneas características.

Royal Enfield Classic 650: la impronta de su motor

El motor de esta Royal Enfield es el más que conocido motor bicilíndrico paralelo de 648 cc, el cual hace su entrada en la gama Classic del fabricante indio.

Se ha trabajado en esta ocasión incidiendo en modificaciones realizadas sobre el cambio, ahora más refinado refinado, incidiendo en un comportamiento todavía más suave a cualquier régimen, santo y seña de este twin.

Y como la estética importa en motos de este calibre, la Classic 650 luce unas curiosas aletas deportivas más cortas que le proporciona un aspecto dinámico. Los nuevos neumáticos anchos, más modernos, complementan las capacidades de la moto cuyas formas más voluminosas le confieren una presencia acorde con la mayor cilindrada del motor.

Para dotarle del estilo de conducción típico de la marca, la nueva Classic 650 dispone del chasis de la Super Meteor y la Shotgun 650. Se incluye de serie el asiento biplaza, con la posibilidad de retirar el del acompañante y el portaequipajes mediante un tornillo.

Esta Royal Enfield conserva el clásico estilo característico de las motocicletas británicas de posguerra, mostrando un bello acabado de aluminio y cromo brillante pulido del faro y los intermitentes delanteros. Al tiempo, el emblemático depósito de combustible en forma de lágrima junto a la carcasa característica de Royal Enfield aportan un estilo inconfundible.

Encontramos montado un faro LED junto con las características lámparas proyectoras; un rasgo que perdura en las motocicletas Royal Enfield desde 1954.

Como cabe esperar, la ergonomía es otro de sus puntos fuertes, confortable y lista para hacer kilómetros sin límites. Las suspensiones delantera y trasera Showa y su configuración se ha establecido acorde con el tipo de conducción de este tipo de motos.

Desde el puesto de mando se puede ver una pantalla LCD digital con odómetro, cuentakilómetros parcial, indicador del nivel de combustible, recordatorio de mantenimiento, indicador de marcha y reloj horario.

No podía faltar una atractiva oferta de accesorios originales, con con vistas a practicar una personalización a gusto del usuario y diferentes opciones para ello.

Cada uno de los colores disponibles, Vallam Red, Teal y Black Chrome, aportan su sello y un aumento de precio, según versión, comenzando desde 6.887 euros para llegar a un techo de 7.187 euros.