Peugeot Metropolis 400: Ofensiva tres ruedas

No sé si sabes cómo se reparte el mercado de los scooter de tres ruedas que se pueden llevar con carnet B. El mercado más importante del mundo es Francia: allí, las ventas del líder, los Piaggio MP3 LT se cuentan por decenas de miles. Y curiosamente, dentro de Francia, la mayor parte de las ventas se producen en París. Lógicamente, para una marca como Peugeot, eso de que «le ganen en casa» no debe ser plato de buen gusto y, por ello, aunque se han tomado su tiempo, han reaccionado contundentemente.

Tras la escasa penetración en nuestro país de Quadro, Peugeot «planta cara» al MP3 de Piaggio y lo hace con este nuevo Metropolis que ya hemos podido probar en su versión definitiva. Un tres ruedas homologado para poder ser conducido con carnet de coche que equipa un nuevo y potente motor de 400 cc desarrollado por la propia marca (el primero de su época reciente de más de 125 cc) para así poder prescindir de los propulsores -precisamente- Piaggio  que emplean en el resto de la gama superior a 125 cc. Desarrolla 37,2 CV, más cerca de las prestaciones de un 500 cc que de un 400 cc, y próximamente se montará en otros scooter de la gama, como el Satelis, que será el primero en recibirlo.

Se trata de un scooter muy bien equipado, con detalles como el freno de mano de accionamiento eléctrico o luz delantera DLR (la luz de día por leds que ves entre las ruedas delanteras), ordenador de abordo o arranque por llave de proximidad, entre otras peculiaridades. Su arquitectura, a pesar de la similitud, tiene poco que ver con lo ya conocido: el tren delantero, bautizado como DTW (Dual Tiliting Wheels), se compone de un paralelogramo deformable con un sólo amortiguador superior (dos laterales en el Piaggio) y dos “damper mass”, amortiguadores de inercia a los lados del amortiguador “normal” para absorber vibraciones. Un sistema de frenos combinados, con mando a las manos o al pie y bautizado como SBC, completa la lista de las características más importantes del nuevo “tresruedas” Peugeot.

En marcha es el motor el que se lleva las mayores alabanzas. Es un 400 cc con un nivel de potencia cercano a los 500 cc Piaggio que emplea la marca. Para su desarrollo, Peugeot Scooters ha contado con amplio apoyo de la división de ingeniería de motores de  automóviles de la marca. Con tecnología de baja fricción, igual que ya se empleaba en el LFE de 125 cc, el motor del Metropolis es capaz de empujar con decisión  y será algo digno de ver en el Satelis, más ligero. El sistema DTW de tren delantero funciona de forma similar al de Piaggio: se bloquea mediante un botón por debajo de 10 km/h, siempre que estemos sobre el asiento y se desbloquea o al abrir gas o al pulsar el desbloqueo.

A velocidades medias o altas, el comportamiento es bueno, similar al de una moto normal. Pero a baja velocidad y, sobre todo, si el suelo tiene baches, los rebotes del amortiguador horizontal tienden a “levantar” el scooter, ofreciendo un comportamiento al que hay que acostumbrarse. Son los frenos combinados los que menos convencen. Frena correctamente y los tres discos tienen suficiente capacidad de detención, pero el tacto, con las dos manetas “unidas” por las tuberías de líquido, más el pedal, que también utiliza el mismo circuito, complican el uso. Si tiras de una maneta, la otra coge presión y te empuja la mano; si pisas el pedal, son las dos manos las que se “sueltan”. Así, frenar con precisión es muy difícil y la única solución razonable es utilizar sólo uno de los tres mandos disponibles y dejar que el sistema “decida” cómo frena. Algo quizá útil para los que vienen del coche, pero poco convincente para el que esté acostumbrado a una moto.