Prueba MV Agusta Brutale 800 2016: Brutalmente eficaz

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Prueba MV Agusta Brutale 800 2016: Brutalmente eficaz
Daniel Navarro
Daniel Navarro
Hace año y medio probamos la anterior versión de la MV Agusta Brutale 800. Ya entonces era brutal, aunque podo polivalente. La nueva versión engancha igual, pero resulta más fácil y menos violenta... sin dejar de ser una bestia.


Recuerdo bien aquella prueba de la MV Agusta Brutale 800. Te aseguro que no son muchas las motos que «se graban» en mi memoria tan bien como aquélla. Fue de aquellos modelos que realmente impresionan, distinta a lo demás. Y recuerdo el sabor de boca que me dejo: excesiva, pero muy atrayente. Una barbaridad de comportamiento si tienes que analizarla desde en un punto de vista frío y formal, pero enormemente apasionante si en tu pecho late un poquito de corazón «RR».

Era rápida, efectiva gracias a un montón de electrónica y asistentes que hacían que una moto de menos de 170 kg y 125 CV, con una distancia entre ejes «enana», se mantuviera dentro del asfalto y con las dos ruedas en el suelo de forma controlable. Pero precisamente por eso resultaba radical. En una carretera de curvas o en un circuito, fantástico. Pero ir en el día a día así? no sé si es prudente. Y en el fondo era (o quería ser) una naked media, que, por definición, debe tener cierto grado de polivalencia.

MV Agusta Brutale 800

Cómo va la nueva MV Agusta Brutale 800

Cuando en el dossier oficial de la marca leí que se trataba de una moto más suave, sinceramente pensé que a lo peor «se la habían cargado». La anterior era brutal, sí. Pero a mi me enganchó. Me gustó mucho las sensaciones que transmitía, siendo consciente de que era una moto poco polivalente. Era fantástica en curvas. La idea de que aquella brutal Brutale desapareciese en pro de una naked media estándarizada no me hacía ninguna gracia.

MV Agusta Brutale 800Cómo agradezco que no haya sido así y la MV Agusta Brutale 800, en su versión 2016, siga en mi lista de motos favoritas. De hecho, supera a la anterior. No ha perdido apenas personalidad ni sensaciones, y ha ganado en polivalencia. ¿Cómo es posible? Porque la moto está bien hecha y bien pensada. Partiendo de la base de la anterior versión, se ha trabajado para aumentar su versatilidad, pero intentando que no deje de ser la buena deportiva que era. Cuando te subes a ella, el motor suena igual, el cambio es más suave y es tan compacta como antes. Si sales «de buenas», el nuevo EAS 2.0 es más dulce de reacciones y menos tosco a la hora de cambiar a baja velocidad. El embrague, duro de accionar, no supone un problema: lo vas a usar al salir en primera y poco más. No gira demasiado, en esto tampoco ha cambiado con respecto a la anterior, y maniobrar requiere paciencia y espacio.

MV Agusta Brutale 800Una vez en marcha, en ciudad, es estrecha y resulta agradable y más fácil. No es el entorno donde va a dar lo mejor de sí, pero tiene un comportamiento más que aceptable. Sales a la autovía y depende de tus ganas de vivir sensaciones «Brutale», porque con «mapping» en modo Normal o Rain es una moto noble, tranquila si no le buscas las cosquillas, mientras en modo Normal (obviamos el Custom, que en el fondo es el que tú te personalices), si abres gas con ganas y empleas el cambio EAS como en una deportiva, ya se nota su genio.

Tienes espacio para agacharte. Si no lo haces, es una naked pura: no hay nada donde esconderte del aire. Agachado, el cuadro y la aerodinámica del faro algo hacen, pero le vendría muy bien una pequeña cúpula. En la caja de cambios se han modificado algunas de las relaciones intermedias, pero al igual que en su predecesora tiene un cambio más de RR que de naked al uso, es decir, muy calculada para ofrecer aceleraciones y maximizar prestaciones. Nada de primera corta para ciudad y sexta larga para ahorrar…

MV Agusta Brutale 800Llegas a la carretera, a una zona de curvas. Seleccionas el Modo Sport. En la anterior éste hasta asustaba un poco. Con aquel modelo necesitabas de los ABS, control de tracción y demás filigranas eléctricas para ir deprisa, aunque en modo Sport estas se establecían en unos reglajes mínimos. Ya no es así. La moto ha ganado en nobleza y es menos violenta. Te permite actuar tú antes que la electrónica y solo entra en acción cuando te pasas. Muy rápida cambiando de dirección, excitante al cambiar y reducir, noble al tumbar? sigue siendo una moto corta, con solo 1.400 mm de distancia entre ejes y todavía, a veces, le notas como quiere «levantar el morro» al abrir gas fuerte en una marcha corta.

MV Agusta Brutale 800Sigue frenando muy bien, con un ABS poco intrusivo que hace lo mismo que el control de tracción: actuar únicamente cuando es verdaderamente necesario. Y lo notas algo, pero poco, por ejemplo, al frenar de atrás al tiempo que haces una reducción fuerte. El cuadro te servirá para poco aquí: si llevas el cuerpo inclinado hacia delante, la información se queda muy abajo y retrasada, no la lees bien si no bajas mucho la cabeza. Dispone de luz de destello de sobrerrégimen, pero es un LED pequeño en la parte inferior del cuadro, por lo que tampoco se ve mucho.

Al final, con los cambios introducidos en el motor, chasis y electrónica, la MV Agusta Brutale 800 2016 se ha convertido en una moto indudablemente mejor. Tan buena como la anterior a la hora de subirte la adrenalina, seguro que cronometro en mano, en el circuito, es más efectiva. Y ahora te sirve mejor para usarla todos los días.

MV Agusta Brutale 800

 

MV Agusta Brutale 800