Cómo afrontar la vuelta al cole en moto

Vuelta al cole en moto
Cómo afrontar la vuelta al cole en moto
Salvador Hernandez
Salvador Hernandez
Cada vez está más cerca el momento de que los más pequeños de la casa vuelvan al cole, y muchos padres recurrirán a las motos y ciclomotores para cubrir la distancia entre sus domicilios y los centros lectivos de sus hijos. AMV se ha preguntado cómo afrontar con éxito y seguridad este momento esperado por muchos y odiado por otros tantos.

La moto y los ciclomotores están viviendo una auténtica edad de oro en nuestro país. Las restricciones a la circulación a los vehículos más contaminantes, el precio más elevado de los automóviles o los reparos que aún presentan muchos usuarios frente al transporte público han hecho que la moto cobre especial importancia. Y con la vuelta al cole, esta tendencia promete continuar.

Pero para que la vuelta al cole en moto sea todo un éxito y que los más pequeños de la casa viajen en ella sin ningún tipo de riesgo, hay que tener en cuenta multitud de factores, que van desde la elección del equipamiento hasta cuál es la normativa al respecto. AMV, empresa líder en la comercialización online de seguros de moto, ha elaborado una completa guía con la que busca dar respuesta a todas las posibles dudas de padres y madres moteros.

Qué tener en cuenta para volver al cole en moto

Vuelta al cole en moto

La seguridad siempre debe ser lo primero a tener en cuenta. Por eso, antes de subir a los niños a nuestra moto, no debemos olvidar tener claros algunos detalles.

  • ¿Desde qué edad pueden montarse los niños en moto?

La normativa, en este sentido, es clara: solo los mayores de 12 años pueden ocupar el asiento trasero de la moto o ciclomotor si van a circular con cualquier adulto, y a partir de los 7 años si el conductor es el padre, la madre o el tutor, o en su defecto, una persona mayor de edad que haya sido autorizada por estos últimos. La multa por no cumplir este punto asciende a 200 euros.

  • ¿Es posible utilizar cualquier tipo de moto?

La respuesta es NO. De acuerdo con el Reglamento General de Circulación, “los niños que viajen en una moto o ciclomotor tendrán que ocupar el asiento correspondiente detrás del conductor”. Esto implica que, si una moto tiene únicamente un asiento monoplaza o no está homologada para su uso para más de un ocupante, el menor no podrá viajar “de paquete”. La mejor forma de conocer si existe algún tipo de limitación al respecto en nuestra moto es comprobar el permiso de circulación: en el apartado S.1, dedicado al número de plazas, tiene que figurar un número 2. Hay que tener en cuenta, también, que en ningún caso se podrá transportar a los niños en remolques o semirremolques.

  • ¿Cómo sentar a los niños?

En todo caso, deben ocupar el asiento correspondiente detrás del conductor, por lo que en ningún caso será posible que se sitúe entre la persona que conduce y el manillar. Además, deberá viajar a horcajadas y con los pies apoyados en los reposapiés laterales. Si no llegan correctamente, algo muy frecuente, se deberá adquirir unos reposapiés adicionales o unos alargadores de los originales, que se deben situar a la altura correcta del menor para que pueda apoyar los pies con firmeza en ellos. En el caso de los más pequeños, es posible adquirir un asiento especial que se fija mediante correas universales, y que cuenta con reposapiés regulables y respaldo de apoyo en la espalda.

  • ¿Es necesario que el menor lleve algún equipamiento específico?

El Reglamento General de Circulación solo especifica claramente que los menores deben utilizar un casco de protección debidamente homologado, algo que puede comprobarse si en él aparece, en su etiqueta, la letra E, acompañada de un número dentro de un círculo. Además, bajo la letra E deben aparecer cuatro referencias: la primera de ellas (04 o 05) indica bajo qué norma se ha realizado la homologación, siendo el código 05 el correspondiente a la más completa. Los cuatro siguientes números representan el número de homologación del casco, y se acompañan de una letra que identifica el tipo de casco y su nivel de seguridad: P (integral o modular); N/P (modelos que protegen la mentonera pero no llegan a cubrirla); J (cascos abiertos de tipo jet); y P/J (autoriza a circular con el casco modular abierto). Finalmente, el número de serie, que debe estar compuesto por cuatro dígitos.

En todo caso, además, está prohibido que los niños utilicen cascos de adultos, algo que aumenta exponencialmente el riesgo de sufrir cualquier posible lesión grave en caso de accidente, y que podría suponer, además, una multa de 200 euros.

Aunque no es obligatorio, sí es aconsejable que los niños viajen siempre con chaquetas con protecciones homologadas, al menos en los hombros y los codos, y si es posible, que posean colores llamativos y reflectantes para que otros conductores puedan verlos con mayor facilidad. Si la chaqueta es de color oscuro, es aconsejable dotar al menor de un chaleco reflectante. Y en el caso de los pantalones, lo ideal es que sean de cordura y cuenten con protección en las rodillas.

Respecto a los guantes, hay gran cantidad de modelos para niños, fabricados con tela resistente a la abrasión. Deberán contar con refuerzos en los nudillos y la palma, y cierre con velcro. En cuanto al calzado, es muy recomendable que utilicen botas que cubran todo el pie, el tobillo y la parte inferior de la tibia. Y si el calzado lleva cordones, se debe comprobar siempre antes de iniciar la marcha que están correctamente atados para evitar que puedan desabrocharse y engancharse en cualquier parte móvil de la moto.

Algunos consejos adicionales para llevar a los niños al cole

Vuelta al cole en moto

El primer consejo, quizás el más evidente, es viajar siempre con un extra de atención cuando viajemos con niños en moto, tanto si vamos al cole como si no. Pero además, hay unos cuantos factores que no se deberían olvidar en ningún caso.

  • Mantenimiento de la moto

Parece obvio que la moto en la que vamos a viajar con nuestros hijos debe estar siempre en perfecto estado, pero no está de más recordar la importancia de llevar a cabo los mantenimientos periódicos aconsejados por el fabricante, y prestar especial atención antes de salir a los frenos, los neumáticos y el estado de las suspensiones.

  • Mochila

Es importante recordar que los niños nunca deben llevar la mochila del cole colgada de su espalda al circular con la moto, y mucho menos si va cargada, lo que podría desestabilizarlos en marcha y provocar caídas. En todo caso, debe llevarse en el portaequipajes de la moto, o amarrarse convenientemente al transportín.

  • Sujeción

Antes de iniciar la marcha, se debe comprobar que el menor puede sujetarse con firmeza. Si no es así, en ningún caso se debe iniciar la ruta.

  • Seguro

Si el menor va a viajar con frecuencia en la moto, este hecho se debe poner en conocimiento de la aseguradora o del mediador de seguros para que pueda informarnos de cómo cubre la póliza de la que dispongamos la presencia de un acompañante.

  • Normas de circulación

Si respetar las normas de circulación resulta imprescindible al circular con nuestra moto, al hacerlo con niños todavía es más importante. En ningún caso se deben exceder los límites de velocidad, y se deben respetar al máximo las señales de tráfico que se encuentren. Es muy recomendable, también, guardar un mayor margen de seguridad con los vehículos que rodean la moto y también con los que estén aparcados.

  • Conducción de la moto

Al circular con un acompañante, la maniobrabilidad de la moto es completamente distinta que cuando se hace solo. Por ello, es importante evitar cualquier maniobra brusca o agresiva, y acelerar la moto de forma suave y progresiva, realizando trazadas limpias para que los estribos, el caballete o el escape no lleguen a rozar nunca con el asfalto. Además, al conducir es importante tratar de evitar generar estrés a los niños y, así, evitar que montar en moto para ir al cole acabe siendo un mal trago.

  • Descenso de la moto

Al viajar con niños se debe prestar especial atención al momento de descender de ella, prestando especial atención al tubo de escape para evitar que sufran cualquier posible quemadura, y en todo caso hay que realizar esta operación por la zona más próxima a la acera. Es recomendable, también, utilizar uno de los brazos del padre o la madre para que lo usen como punto de apoyo para su descenso.