MotoGP Francia: Miller, king of the ‘flag to flag’
Ni una colada cuando empezaba a llover en Le Mans, ni las dos sanciones recibidas por saltarse el límite de velocidad en el pit lane privaron a Jack Miller de sumar su segunda victoria consecutiva para una Ducati que vive su idilio particular. Y en dos semanas llega Mugello.
Ya lo avisamos en nuestro previo. Si la lluvia hacía acto de presencia, Jack Miller, empoderado tras su victoria en Jerez, iba ser uno de los principales favoritos a la victoria en Francia. Le Mans no perdonó y una intensa lluvia cayó durante la primera parte de la carrera de MotoGP. El australiano, que lideraba, entraba colado en la curva 11, pero conseguía salvar los muebles y entrar al pit. Eso sí, en su intento por perder el menor tiempo posible se olvidaba de activar el limitador de velocidad en el pit, por lo que se salto por bastante el límite de velocidad.
Cambió de moto y se colocó en la tercera plaza, muy cerca de Fabio Quartararo, pero lejos de un Marc Márquez que se iba al suelo tras forzar demasiado. Fue entonces cuando Dirección de Carrera le sancionó con dos ‘long lap penalty’ por el exceder el límite de velocidad en el pit. Tal era el ritmo del australiano bajo la lluvia de Le Mans que, cumplidas las dos sanciones, sólo cedió cuatro segundos a Quartararo. Sólo precisó de unas pocas vueltas más para darle caza y escaparse. En estas condiciones, el de Ducati era imparable, por rendimiento y por confianza. La actuación fue, en cierto modo, parecida a la del año pasado, donde Danilo Petrucci suplió las carencias de la Desmosedici en este circuito con un gran talento sobre agua.
La segunda victoria consecutiva para Miller llegó tras una excelsa demostración de rendimiento, confianza y determinación en unas complicadas condiciones. ¿Lo más importante? Ducati está materializando una gran actuación en unos circuitos donde, a priori, no son competitivos. Y es que en Le Mans, tres de sus pilotos top acabaron el Top 5. Además, con la segunda plaza de Johann Zarco, lograron otro doblete. Por otro lado, la cuarta plaza de Pecco Bagnaia les hace aumentar la ventaja su ventaja en la clasificación de constructores. Ahora llega, tras un año sin estar por la pandemia, el circuito de Mugello, otro de los baluartes para los de Borgo Panigale y donde Petrucci acabó venciendo, con Andrea Dovizioso tercero.
Quartararo, mucho mejor en la lluvia y con el liderato bajo el brazo
La lluvia no es el fuerte del francés, pero no por falta de talento, si no por la falta de experiencia. Pocas son las carreras en las que el Diablo ha rodado en mojado. Lo pudimos ver el año pasado en este mismo circuito, cuando pasó de la pole al P9 final. Además, la reciente operación de su brazo derecho podría mermar el rendimiento del francés que, durante todo el fin de semana, se esforzó al máximo por estar delate.
En carrera, logró salvar los muebles ante la aparición de la lluvia. Eso sí, el caos reinante en pista le hizo entrar a boxes en la zona de su compañero de equipo Maverick Viñales. Los mecánicos del de Roses, le sujetaron la moto, ante el desconcierto del otro lado del box, y tuvo que pegarse una carrera extra para subirse a su moto. Aun así, salió a rueda de Márquez para quedarse en la segunda plaza, no sin antes cumplir una ‘long lap penalty’ por lo sucedido en el box.
Fue a partir de este momento cuando se pudo apreciar el enorme salto hacia adelante del francés rodando sobre mojado. La lectura de carrera también fue la correcta. Miller, y luego su compatriota Zarco con mejores ruedas, eran mucho más rápidos y Quartararo optó por oponer demasiada resistencia y concentrarse en mantener la tercera plaza. Posición que no iba a abandonar hasta el final de carrera y que le valió para recuperar el liderato por un punto sobre Bagnaia, que acabó siendo cuarto.
Autocrítica de Márquez
El de Honda llegó a ser el más rápido en pista y, cuando se disponía a poner distancia de por medio con respecto a Quartararo, Márquez se iba al suelo en la última curva. No obstante, lograba subirse a la moto y seguir firmando los tiempos más rápidos de toda la manga de MotoGP. Fue en la segunda caída donde sí se le vio especialmente enfadado al 93.
Y es que en este tipo de carreras, donde el físico no es tan importante, Márquez pudo tirar de talento para reducir la brecha con respecto a sus rivales. Tras la carrera, Márquez declaraba que la segunda caída pudo ser evitada, pero le pudo más “pensar en un buen resultado que en acabar la carrera”.
Suzuki, totalmente perdida bajo la lluvia de Le Mans
Ninguno de los dos pilotos logró acabar en el GP de Francia. Joan Mir, el actual campeón del mundo, sufrió en su primera carrera ‘flag to flag’ y es que ni siquiera llegó al cambio de moto. Àlex Rins, por su parte, lograba engancharse a la cabeza de carrera en el cambio de moto, pero perdía el tren delantero en la curva cuatro y se borraba de la lucha por la victoria. El de Suzuki optaba por seguir, aunque unas vueltas más tarde se volvía a ir al suelo, poniendo fin a su actuación.
Fin de semana para olvidar para los de Hamamatsu, los cuales retroceden hasta las sexta y duodécima plaza, respectivamente. Frente a unos rivales que el año pasado estaban a una forma diferente, en la que no había un ganador claro, esta vez pilotos como Miller, Quartararo, Zarco o Bagnaia sí que están firmando unos resultados más regulares. No obstante, apuntan a que este circuito no es favorable para ellos y confían en que las siguientes carreras puedan obtener mejores resultados.