Dorna y FIM impiden a Honda hablar de la telemetría

Se puede interpretar como una censura impuesta por Dorna y FIM a Honda por más que Livio Suppo diga –diplomáticamente- que se lo rogaron para no enturbiar todavía más el ambiente. En cualquier caso, es un atentado a la libertad de expresión. Es el tercer aplazamiento de las esperadas explicaciones que Honda prometió dar después de Malasia. El Mundial sigue esperando ese momento para conocer las pruebas defensoras de la corrección de su piloto en aquellas carreras. Aseguran en Honda que la telemetría de la moto de Márquez lo demuestra claramente.
Livio Suppo explicó la situación. «La otra vez fue decisión nuestra no enseñar esas pruebas. Esta vez han sido Dorna y FIM quienes nos han pedido no mostrarlas ni hablar de ello para evitar crear mayor confusión y no tirar más gasolina al fuego. Respetamos su decisión, pero más adelante las mostraremos. No sabemos cuándo, pero todavía habrá que esperar. Ahora conviene pacificar la situación«. Es fácil intuir que ese fue el argumento esgrimido por los mandatarios del Mundial para seguir silenciando a Honda. Pero no hacen nada para evitar que Valentino Rossi siga sacando a colación el asunto cada vez que se le acerca la prensa. Sigue intoxicando cuanto puede con total impunidad.
Aparte de esa buena intención esgrimida ante Honda para evitar atizar el fuego –no extensiva a Valentino Rossi- da la impresión de que Dorna y FIM están intentando distraer la atención sobre esas pruebas. Parece que las teman, cuando en realidad era su obligación actuar de oficio y pedir la telemetría a Honda para verificar las acusaciones esgrimidas desesperadamente por Rossi. Pero Il Dottore es el icono del Mundial de Dorna. Figura intocable. Se le tolera cualquier tropelía, se las miran con sonrisa en los labios. Aplauden sus ingeniosos recursos fuera de reglamento. Miran hacia otro lado.
Urge legislar con acierto y sancionar de inmediato con penas preestablecidas de forma clara y sin margen de interpretación. Los pilotos lo piden a gritos. Claman en el desierto. En Honda, como en tantos otros equipos, piden reorganizar el proceder de Dirección de Carrera para agilizar sus funciones sobre el mismo terreno de juego. Es necesario actuar de inmediato aplicando las sanciones bien determinadas y tabuladas en el reglamento sin dar margen de interpretación. Como las sanciones de tráfico.
Si en Sepang hubieran sancionado a Rossi con un «drive through», se habrían evitado todo el escándalo habido a la vez de preservar sus intereses ante la final de Valencia. Livio Suppo aboga por ello: «Pienso que en nuestro deporte se necesita más contundencia y rapidez para tomar decisiones. Es un asunto que ya habíamos hablado con Dorna y FIM después de Assen. En aquel caso, tanto Marc como Valentino hubieran debido ser penalizados con diez segundos para evitar que ciertas cosas ocurran de nuevo«. No sirvió de nada el esmero de Honda en aras de mejorar el correcto desarrollo de las carreras y del campeonato, así como para impulsar una revisión a fondo del código deportivo. Pero eso no interesa. Tampoco que se saque a relucir la telemetría para desmentir a uno y honorar al otro. Mejor silenciar el asunto. El tiempo lo cura todo. Pero no borra la memoria.