Prueba KYMCO Xciting 400 S: Elegante deportividad

16 Prueba KYMCO Xciting 400 S: Elegante deportividad
Fotos: Prueba del Kymco Xciting S 400
Daniel Navarro
Daniel Navarro

El KYMCO Xciting 400 ha sido, desde su presentación en 2013, el scooter 400 por excelencia si buscabas prestaciones y deportividad. Pero en un segmento donde la elegancia y comodidad es obligada, otros rivales podían superarle. Ahora, con la versión S, no.


Xciting es todo un clásico en el catálogo de KYMCO. Hace más de 20 años que apareció este término como el GT sport superior de la gama con aquel 500 que inició la saga. Hubo varias versiones, desde un popular 500 hasta un 250 menos conocido. Era un scooter económico para su cilindrada; bastante más barato que su competencia. Lo cierto es que esa era su mejor arma para competir. Pero seamos justos, y al César lo que es del César: no era -por bastante- ni el más rápido ni el más capaz ni el más elegante, pero estaba bien terminado y podía presumir de ser uno de los primeros scooters con doble tija, lo que le daba un gran tacto a ese tren delantero y un paso por curva eficaz, muy sport. Eso sí, a poco que le cogieras el gusto a ese buen tacto, los roces del caballete en el suelo eran continuos.

Bastantes años después, con la llegada del Super Dink, KYMCO se introduce en las «ligas mayores». Sus scooters ya eran muy reconocidos: Dink, Grand Dink o el propio Xciting 500 se vendieron bien, pero siempre tuvieron consideración de baratos y duros. Un paso por detrás de las grandes marcas en calidad, estética o prestaciones. El KYMCO Super Dink se lanzó para superar a todos sus rivales, en todo. Lo logró, e hizo que esa imagen de marca cambiase.

Desde aquel Super Dink, KYMCO se ha convertido en una de las firmas de más enjundia en el segmento scooter. Un rival temible para el resto de marcas que ha visto, varias veces ya, como los scooters taiwaneses se convertían en la referencia a batir. Y una trayectoria similar consiguió la siguiente generación del KYMCO Xciting: el 400.

La primera generación era un scooter más potente y rápido que sus rivales. Tenía un enfoque más sport que la competencia más directa. Por ejemplo, el Yamaha XMAX 400, casi tan rápido como el KYMCO, era más grande y pesado, más elegante y caro, pero seguía rozando el suelo a nada que tumbases y sus suspensiones, más pensadas para la comodidad, requerían un paso por curva más calmado. El Suzuki Burgman 400, el iniciador de la cilindrada, siempre tuvo un carácter más GT que sport y así seguía, además de un precio muy superior. Y el SYM, en un nivel de precio similar al KYMCO, siempre quiso parecerse al Suzuki, cómodo, elegante y poco sport.

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Llegó, poco después, el Xciting 400 ABS. La siguiente generación modificaba el cuadro y adoptaba una cúpula alta en sustitución de aquel primer «flequillo » ahumado y un nuevo cuadro, así como nuevos colores más serios y elegantes: un giro hacia esa mayor comodidad y elegancia de sus rivales, pero en el fondo seguía siendo el mismo sport, deportivo y algo duro.

Hace un año llegó su última actualización y la más profunda, con nueva carrocería, retoques en motor, ciclo y equipamiento y adopción del apellido «S». Y resulta llamativo: esa «S», generalmente sinónimo de «Sport», se ha adoptado en el Xciting más señorial, cómodo y elegante de la historia. Hace un año, cuando te comentaba su presentación, jugaba con la idea de si esa «S» no significaría, en este caso, algo así como «Señor Scooter». Pero lo cierto es que tampoco ha perdido ese carácter sport.

CÓMO ES EL KYMCO XCITING 400 S

El KYMCO Xciting 400 S es el resultado de la evolución lógica del Xciting anterior. Salvo la carrocería, en su interior no hay un revolución que haya cambiado estructuras principales o elementos básicos, pero si retoques -algunos de ellos de mucha envergadura- que mejoran el resultado final a todos los niveles.

En el motor se ha trabajado para ganar eficiencia y superar ya la Euro 5 sin perder respuesta. La transmisión se ha modificado por completo con un nuevos variador, embrague y correa, elementos que según la marca aportan una ganancia de un 3.5% en esa eficiencia buscada. La culata también es novedad, con un rediseño de los ángulos de válvulas, alzada de las mismas y muelles. Se obtienen ahora 35,53 CV a 7.500 rpm con un par de 38,4 Nm a 6.500 rpm y un consumo oficial declarado de 4,2 litros cada 100 km. Siguen siendo los mejores datos de la categoría en cuanto a potencia y par, solo igualados por el tres ruedas Peugeot Metropolis, lógicamente, con otro peso y dentro de otra categoría.

En el chasis ha sucedido algo similar. Sigue empleando el de tubos de acero formando una estructura doble que acaba hacia delante en una pipa de dirección donde se monta esa doble tija que desde siempre ha sido seña de identidad del Xciting. Pero el montaje del motor se ha modificado con un nuevo eje que lo lleva más hacia delante. Se mantiene el mismo equipo de horquilla de 41 mm, amortiguadores traseros regulables en precarga y los discos ondulados con pinzas frontales radiales. Pero se ha modificado el tarado de las suspensiones y con ello parte del carácter de la moto.

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Los cambios más profundos son los más visibles. La carrocería es completamente nueva, diseñada en Italia por Giancarlo Felice «Félix», inspirado por las líneas maestras del buque insignia de la marca, el AK550. Más afilado y visualmente ligero, incorpora iluminación completa de LED, una nueva cúpula regulable en cinco posiciones con palanca manual, asiento de nueva factura que ahora se abre también con un botón desde la piña izquierda y dos guanteras delanteras, aprovechando que el mando del freno de aparcamiento ha pasado del escudo al manillar, en un gatillo, a la manera que lo lleva el KYMCO AK 550 o el YAMAHA TMAX.

La estrella de esta renovación, en lo que al equipamiento se refiere, es la inclusión del sistema Noodoe de conectividad con el móvil. Permite personalizar la pantalla central, corazón del sistema, en la que puedes visualizar notificaciones del móvil, interactuar en redes sociales con otros usuarios e incluso ver las indicaciones del navegador, entre otras funciones.

El hueco para el casco se ha modificado. No es más grande que antes (sigue siendo, de hecho, de los más pequeños entre los 400) pero cabe un integral y deja hueco para otros objetos. Antes se abría el asiento por completo y ahora lo hace sólo la parte delantera, lo que resulta cómodo para poder dejar cosas sobre la parte trasera, pero complica la operación de meter cosas dentro. Delante, las dos guanteras se cierran de forma electrónica bajo llave cuando bloqueas la dirección. Las nuevas piñas incluyen los mandos del sistema Noodoe y han modificado los demás pulsadores. Todos son cómodos y funcionales, pero la intermitencia, antes de interruptor normal tipo «moto», ha pasado a ser de corredera y pulsador, de menor calidad. Y, por supuesto, mantiene un caballete central y la pata lateral con desconexión de motor, ambas fácilmente utilizables.

CÓMO VA EL KYMCO XCITING 400 S

Encontramos por tanto nuevos reglajes de suspensiones, soporte de motor diferente, una carrocería modificada, con elementos como el manillar y el asiento también novedosos y un motor retocado para Euro 5 que, si bien ha mantenido la potencia y el par, suele hacer los motores de este tipo menos briosos. ¿Se notan todos estos cambios? Por supuesto, pero para bien en casi todos los casos.

La primera impresión es la de un scooter más ligero y moviéndolo a baja velocidad, maniobrando, también se siente más liviano a pesar de que no lo es: pesa 4 kilos más que antes. El extra de equipamiento se tiene que notar. Pero ese manillar nuevo y el asiento ayudan a estas sensaciones. Por supuesto, el nuevo cuadro y piñas o la cúpula regulable también se notan a la vista: estás sobre un scooter mejor terminado que antes, más equipado y lujoso. La llave al contacto, maneta (regulables en distancias las dos) apretada y tocas el botón de arranque. Se pone en marcha inmediatamente, con un sonido que, si conocías el anterior Xciting, te lo recuerda. Pero es más suave, hay menos vibraciones (el anterior tampoco vibraba demasiado) pero se ve que ese nuevo soporte de motor aísla mejor que antes. Esto también se aprecia cuando saliendo o recuperando, en regímenes medios, el ligero traqueteo del anterior se ha convertido ahora en un simple cambio de sonido igualmente ronco y agradable, sinónimo de potencia.

Las suspensiones son otro punto a destacar, puesto que es del comortamiento que más notarás en marcha. El primer KYMCO Xciting 400 quiso ser un deportivo y se notaba en aspectos como este: no era precisamente blando. Tampoco era incómodo, si buscabas agarre y nobleza de reacciones, pero si te acababas de bajar, por ejemplo, de un Suzuki Burgman 400 o de un SYM Maxsym 400, resultaba bastante más duro. Esta nueva versión se ha suavizado. Te das cuenta simplemente subiéndote, cuando las suspensiones ceden un poco más que antes. Pero sin embargo no notas excesivamente que haya perdido estabilidad. Solo a muy alta velocidad, en curvas muy rápidas hay una ligera diferencia y se mueva algo más, de forma suave. Por supuesto, en una utilización normal, a velocidades normales, la diferencia desaparece en este sentido, mientras que pasando baches sí agradeces el nuevo tarado.

Frena muy bien y sigue siendo muy rápido. No llega a la velocidad máxima del anterior, aunque también es cierto que entre los anteriores nos encontramos con unidades dispares: unos corrían bastante más que otros, no sé por qué. Aun así, este nuevo KYMCO Xciting 400 S sigue siendo uno de los 400 más rápidos del mercado en velocidad punta. No es difícil verle pasar de 160 km/h con algo de bajada o viento a favor, una cifra más que suficiente hoy día. En carreteras de curvas es divertido de llevar, con un motor que sale muy bien, buenos frenos y estabilidad suficiente. Y en ciudad, esa capacidad de pasar por más ligero y ágil que el anterior se agradece, además de la posibilidad de mandar indicaciones de navegación a su pantalla central. Es, en el fondo, un KYMCO Xciting 400 en lo deportivo, pero más «Señor», como te decía antes.

LO MEJOR

-Alto nivel de equipamiento

-Comportamiento

-Finura y suavidad de marcha

MEJORARÍA CON

-Hueco bajo el asiento justo

-Mecanismo de ajuste cúpula

-Mando de intermitencias

ASÍ VEMOS EL KYMCO XCITING 400 S

En carretera: 4

En ciudad: 4

Pasajero: 4

Confort: 4

Equipamiento: 4

Autovía: 4

(De 1 a 5 puntos)

El KYMCO Xciting 400 S es un scooter que, sin renunciar a su esencia deportiva, ha mejorado en el resto de aspectos, haciéndose más equipado y cómodo, manteniendo un nivel de precio muy acertado entre los 400. Un scooter que en ciudad se muestra agradable y ágil, en la carretera es estable y divertido y cómodo y suficientemente rápido en la autovía. Un equipamiento muy mejorado, con elementos realmente premium como la cúpula regulable o, sobre todo, el sistema Noodoe, cómodo para dos pasajeros, que solo pude mejorar en aspectos como la capacidad de carga.

Más información del KYMCO Xciting 400 S

 

 

Kymco Xciting 400